La industria valora la situación del sector juguetero y las previsiones para 2023 (Parte 1)
Pablo Bellido, CEO de Aquamarine Games
“Esperemos que el precio de los transportes se reduzca el año próximo y que los precios se puedan normalizar. Si no es así, se producirán nuevas subidas de precios y ahí tendremos nuevamente un problema. Por su parte, el juego en familia continuará siendo muy importante, y todo lo relacionado con la sostenibilidad tendrá mayor potencial. Así, nosotros seguerimos ampliando toda nuestra línea. Respecto al e-commerce, sigue y seguirá al alza. Tiene un crecimiento imparable, aunque deberíamos tomar conciencia y apoyar a las tiendas físicas también, no debemos olvidarnos de la importancia que han tenido y tienen”.
Arnaud Sattonnay, CEO de BB Grenadine
“Productos sostenibles, evolutivos o que permitan una extensión de su vida útil, al final hacia donde se está dirigiendo la tendencia es hacia una producción consciente, minimizando los residuos y reutilizando. Por lo que, si los padres prefieren menos productos, pero de mayor calidad, se tiene que trabajar en conceptos donde la vida útil se alargue en el tiempo. De esta manera, la conciencia medioambiental está calando en la sociedad que exige que los juguetes se adapten a ello. Por su parte, la pandemia nos dejó un importante avance en digitalización con la creación de gran cantidad de e-commerces para complementar la venta física. Ahora entraremos en una fase de depuración y especialización para conseguir diferenciarse de la competencia, ya que estos se hicieron rápidos y falta una nutrición óptima de los catálogos o mejorar la experiencia en el site”.
César Bernabeu, gerente de Berjuan
“El sector juguetero, al igual que el resto de sectores en general, se está viendo afectado por todos los factores externos que están perjudicando al mercado económico. Todo ello está provocando que tanto la distribución como el cliente final se muestre cauteloso y priorice sus compras. Como parte positiva, destacaría que parece ser que la tendencia de volver a fabricar de nuevo en Europa está creciendo. Ya está ocurriendo con muchos productos, y cada vez son más los clientes que prefieren calidad y garantía. El principal reto es que todo pase cuanto antes. No podemos olvidar que ya llevamos tres años de incertidumbre por diferentes motivos y, en general, necesitamos estabilidad para poder pensar en nuevos retos y en un futuro más normalizado”.
Silvina Meriggi, marketing manager de Artsana Spain
“Estamos atravesando un año marcado por la incertidumbre, un hecho que ha sido denominador común en los últimos años. No podemos saber con exactitud cómo afrontará el mercado los nuevos precios y si el consumo se mantendrá, al menos, como en 2021. Por su parte, la inflación va incrementándose mes a mes y esto sin duda está afectando al sector. Los consumidores cada vez tendrán menos poder adquisitivo y pensarán bien antes de hacer cada compra. Además, el e-commerce seguirá creciendo porque han cambiado los hábitos de compra de los consumidores y brindan una inmediatez que otros canales no pueden dar. También destacamos la tendencia eco-friendly, a la que cada vez más el sector se va adaptando sobre todo las nuevas generaciones”.
Lucas Vicente-Arche, responsable de desarrollo de negocio de Cife Spain Business
“Cada vez hay más oferta y cada vez nos es más difícil elegir. Vivimos en el exceso. No creo que se deba incentivar el desarrollo de más y más productos, sino de artículos que aporten valor y tengan un sentido. El mercado de juguetes ha de mutar en algún momento hacia algo más interactivo y versátil, tampoco creo que se deba incentivar comprar más, sino a comprar mejor, creando y lanzando productos que puedan extenderse en el tiempo. El principal reto será convencer a los compradores para que sigan creyendo en el juguete como método de aprendizaje y que no lo vean como un ‘trasto más’ al que encontrar hueco en casa o en el trastero. No solo es comprar el juguete, sino enseñar a jugar con él, compartir tiempo con nuestros hij@s y orientarles en el desarrollo de sus capacidades mediante el juego”.
José Simon, director comercial de Claudio Reig
“Estamos atravesando una situación compleja que no tiene tintes de solucionarse y que creo que afectará negativamente al sector juguetero. Tenemos un problema con la devaluación del euro y el encarecimiento de precios y suministros generalizado. Es complicado luchar contra estos factores, sin más opciones que intentar ajustar las modificaciones de precios al mínimo. Las familias dispondrán de un presupuesto inferior a años anteriores. Nuestro mayor objetivo es trabajar para superar esta situación y así poder conseguir la cifra de negocio que necesitamos para seguir adelante, con nuevos productos y licencias”.
Marco Sebastiani, country manager de Clementoni
“Si bien la situación de crisis actual nos afectará a todos, esperamos que, como en otros años de crisis, el sector juguetero no se vea tan afectado. De hecho, estamos viendo ya que los datos de mercado no son tan malos, por lo que esperamos cerrar el año en cifras de crecimiento. La inflación creemos que se mantendrá en los próximos meses, de hecho, no sería de extrañar que los costes volvieran a subir a principios de 2023. Lo cual afectará negativamente al mercado juguetero, como afecta a otros sectores. El peso del sector seguramente sea similar, si bien se verá el impacto en las unidades vendidas. Respecto a la tendencia eco-friendly, creemos que toda la fabricación se irá enfocando cada vez más a ser más eficientes y sostenibles, tanto en procesos como en materiales”.
Santiago Agudo, director comercial de Colorbaby
“El sector juguetero tuvo un desarrollo bastante aceptable hasta el verano. Hay muchos inputs externos negativos que pueden influir negativamente en el consumo, pero la historia en circunstancias similares nos dice que la repercusión no es tanta. Lo importante es mantener la visión en los objetivos, y no dar desesperados cambios de rumbo. El resultado puede ser contrario a lo esperado. En el próximo curso, nos encontraremos con la obligación de dinamizar la primera campaña, especialmente el verano. Es la segunda gran oportunidad de facturación del año, y hay que amoldar nuestra oferta al interés del consumidor. Existen nuevos nichos de demanda alejados del cliente tradicional para explorar”.
Fernando Falgás, CEO de Comansi
“El 2022 ya ha sido un año marcado por la inflación y creemos que en 2023 seguirá la misma tendencia. Hasta que no veamos la evolución de esta Campaña de Navidad y Reyes es arriesgado hacer una valoración clara de la situación. Pero, como en cualquier contexto de crisis, es probable que el consumo se retraiga y termine también repercutiendo de alguna manera en nuestro mercado. En mi opinión, los implicados en el sector juguetero deberíamos insistir en concienciar a la sociedad de la importancia de los juguetes y los juegos en el desarrollo de los niños y niñas y tratar de evitar que nuestros hijos se expongan a los videojuegos en edades tempranas. Es un mensaje por el bien de nuestra sociedad en general y no solo por nuestro sector, así que me parece primordial dedicarnos a ello”.
Joaquín Albo, country manager de Crayola
“Creo que mientras no bajen los precios de las materias primas, el transporte, la electricidad, el dólar, etc., la inflación va a seguir al alza. Los juguetes serán más caros, aunque la subida será más contenida, y afectará al número de unidades vendidas que se reducirá. A pesar de todos estos indicativos, el juguete es una ilusión para los niños y si hay buenos productos (apoyados por series, películas o publicidad), funcionarán. El futuro se debe afrontar con calidad y creatividad. El reto es conseguir que los padres consideren al juguete como un bien esencial, tan importante como la alimentación, la ropa o ir al colegio. Que siempre dediquen una parte del presupuesto (ajustado) que todos tenemos a comprar juguetes. Ese es el mayor desafío: elevar el gasto de juguetes por niño, ya que somos uno de los más bajos de Europa”.
Vicente Llopis, director de Creaciones Llopis
“Las expectativas para el cierre del año son de bastante incertidumbre, debido a la continua alza de precios y la más que probable bajada de consumo. En 2023, la inflación debería estabilizarse, pero repercutirá de forma negativa, ya que el aumento de varios precios hará para el consumidor muchos productos menos atractivos. Las tendencias estarán marcadas por las licencias de moda y artículos con buena relación calidad-precio, además de la sostenibilidad. Debemos seguir apostando por el cuidado del medio ambiente para intentar aportar nuestro granito de arena para un mundo más sostenible. Nuestro principal objetivo será apostar por muchas novedades, con una buena relación calidad-precio”.
Ángel Pérez, director comercial de Deqube
“Va a ser un final de año complejo. En estos momentos, no viene viento a favor, no solo nos afecta la inflación más elevada de las últimas décadas, sino también un descenso significativo de clientes provocado por el descenso de la natalidad. En nuestro sector, hemos sabido afrontar y adaptarnos a todo tipo de problemas, ya sean económicos, de pandemia, etc., pero considero que el tema de la natalidad nos afecta directamente y quizás nos hemos acostumbrado a ver cómo bajan las cifras año tras año. Por su parte, el juguete debe ser un medio divertido, inteligente e innovador que involucre al niño a aprender y descubrir un mundo más sostenible. La sostenibilidad debe estar presente tanto en los materiales empleados como en la educación mediante el juego”.
Isabel Barros, directora comercial de Devir
“Se están haciendo muchos esfuerzos para contener la inflación y parece que lo peor ya ha pasado. El mercado juguetero está en una situación complicada porque ya hizo una subida de precios generalizada para repercutir costes y con la situación actual no puede volver a hacerlo sin que las ventas se resientan. Hay una gran sensibilidad respecto a la sostenibilidad y el respeto al medio ambiente, pero en este entorno de inestabilidad económica esta tendencia puede verse afectada y pasar a un segundo plano. Eco-friendly acostumbra a ser sinónimo de mayores costes y mayor precio y no estamos en el mejor de los momentos para ello”.
Cristina Sánchez, marketing manager de Diset
“Nos encontramos ante una situación un poco incierta debido a todos los factores externos y sobre todo por la inflación. Por este motivo, esperamos cerrar el año más o menos como el año anterior. En 2023, la inflación seguirá teniendo un papel protagonista y la sostenibilidad tomará cada vez mayor importancia en el sector juguetero, por lo que el sector juguetero irá mostrando más productos vinculados a la tendencia eco-friendly. Por su parte, el próximo año también los servicios de digitalización y el e-commerce continuarán evolucionando y teniendo más importancia”.
Antoni Puig, responsable comercial de Dreamtoys-Siku
“El sector juguetero se encuentra estancado en estos momentos. No tiene intención de realizar ni grandes inversiones ni grandes apuestas por productos ni marcas en concreto. La inflación probablemente desemboque en recesión, lo cual ralentizará las ventas y las hará más selectivas. Un leve incremento de las ventas sería positivo para el sector. Su evolución vendrá determinada por el estancamiento de precios, la estabilidad económica y la estabilidad social. Factores realmente complicados de conseguir el próximo año. El principal reto será conseguir mantenerse, reduciendo costes y reduciendo márgenes. Respecto a la tendencia eco-friendly, seguirá creciendo y particularmente considero que llegará un momento en el que no se aceptará otra forma de fabricar”.
Juan Pedro Devesa, director general de Epoch para Imaginar
“Afrontamos un año con cambios y con tal vez una recuperación de la tienda física. Esperamos un buen año, con crecimientos aceptables. Aunque en este sector, es pronto para hacer vaticinios. La creciente concienciación ecológica puede marcar muchas tendencias en 2023. Pero, sin lugar a dudas, los factores económicos externos serán determinantes. Somos un producto aún no considerado esencial para la educación del niño, a pesar del cambio de percepción sufrido en 2020 a raíz del confinamiento. Por lo tanto, vamos a tener que sortear la crisis de las familias. Por otra parte, parecía que lo tecnológico barrería lo tradicional, pero estamos viendo como soportan mejor estos últimos el paso de los años”.