Plan MAD-Re (Madrid Recupera) en dos edificios de Manoteras
Dos edificios del barrio de Manoteras (distrito de Hortaleza) serán los primeros en ser rehabilitados gracias a una iniciativa pionera puesta en marcha con la colaboración del Ayuntamiento de Madrid y el Colegio Oficial de Arquitectos de Madrid (COAM) y financiadas en parte mediante patrocinio privado.
Se trata de una iniciativa que se insertará en el Plan MAD-Re (Madrid Recupera) puesto en marcha por el Área de Desarrollo Urbano Sostenible. En este caso, la novedad consiste en que las comunidades de propietarios se presentan voluntariamente para optar a ser las comunidades piloto que puedan realizar una rehabilitación integral en condiciones muy ventajosas.
Estas comunidades se eligen según una baremación que aplica determinados requisitos esencialmente sociales y del estado de conservación del edificio, para que sea un equipo de arquitectos, cuya propuesta también será elegida mediante concurso abierto, quien rehabilite sus edificios.
De este proceso han resultado elegidos los edificios situados en las calles de San Pedro de Cardeña, 50, y Somotín, 94. Con 10 viviendas cada uno de ellos, ninguno tiene ascensor y ambos padecen una enorme pérdida de energía a través de los muros y de las ventanas, lo que obliga a incrementar muchísimo el consumo de energía y con él, la factura energética.
La singularidad de la actuación es que se realizará prácticamente sin coste para los vecinos, dado que, además del patrocinio privado, los edificios se encuentran dentro de las áreas incluidas en el Plan MAD-RE (Madrid Recupera) calificadas como Áreas Preferentes de Impulso a la Regeneración Urbana (APIRU) y Áreas de Regeneración y Renovación Urbana (ARRU), por lo que existen dos subvenciones aplicables y compatibles entre ellas que se podrán solicitar.
Al proceso de elección de la comunidad de propietarios, realizado por representantes del Área de Desarrollo Urbano Sostenible y del COAM, se presentaron 9 comunidades de propietarios del barrio de Manoteras. Para designar a la comunidad se han tenido en cuenta tanto las condiciones constructivas del inmueble relativas a su antigüedad y estado de conservación como criterios sociales, valorando que vivan en él vecinos en situaciones especialmente vulnerables, por edad, discapacidad, rentas bajas, situación de desempleo, etc.
Las obras darán comienzo a partir del mes de octubre y la intervención mínima prevista consiste en la instalación del ascensor y modificación de la escalera y el portal, de forma que el bloque cumpla en lo máximo posible la reglamentación vigente de accesibilidad; y la mejora de la envolvente de muros y cubierta, dado que mejorar el aislamiento térmico permite reducir notablemente las necesidades de climatización para mantener una temperatura adecuada, tanto en invierno como en verano. De hecho, la necesidad de calefacción, sólo con el aislamiento, se puede llegar a reducir un 60%.
Además, y según el presupuesto y las necesidades de los vecinos, se podrán sustituir carpinterías y vidrios, equipos de climatización y, si hay acuerdo, también se podrán incorporar fuentes de energía renovable, como pueden ser captadores solares térmicos para el suministro de agua caliente y apoyo a la calefacción.
Este proyecto de mejora de la accesibilidad, estética, de las prestaciones del edificio, del confort y reducción de las necesidades de climatización y por tanto del consumo, tendrá el carácter de “rehabilitación tipo” que podrá repetirse y extenderse en el resto del ámbito.
Las entidades que participan de esta iniciativa son la Fundación Annie Johansen, y las empresas Otis y Orona, que aportarán gratuitamente sendos ascensores. También se cuenta con el patrocinio de los fabricantes Saint Gobain y Baumit y la empresa constructora Fernández Molina.