“La química comienza a percibirse como lo que es, un gran facilitador de soluciones a los problemas de la humanidad”
Entrevista a Carles Navarro Vigo, director comercial y subdirector general de BASF Española
BASF es una de las empresas químicas que más estable ha permanecido en las dos últimas décadas. Muchas otras se separaron en diversas empresas, otras desinvirtieron en algunos negocios para apostar por otros, otras siguen un perfil muy bajo en sus apariciones en los medios. ¿Cree que esto es efectivamente así? ¿A qué lo atribuye?
Creo que ha sido en gran parte gracias a la buena gestión que se ha hecho del portafolio de actividades de BASF. Ha habido una vigilancia permanente de aquellos negocios que pertenecían a las competencias básicas de la multinacional que son la química básica, la química industrial y se ha ido desinvirtiendo en aquellas áreas donde BASF no tenía fortalezas importantes que poder desarrollar. Esto se ha ido haciendo de una manera continua, algunas veces con sorpresas para los propios colaboradores de BASF, como cuando por ejemplo nos separamos del negocio de cintas magnéticas, que era una división tradicional de la firma que había llegado a un punto de muy baja rentabilidad o también cuando nos desvinculamos del área de farmacia que parecía uno de los segmentos con más futuro pero que ahora, visto en perspectiva, fue una decisión muy acertada. Siempre hemos apostado por seguir haciendo bien lo que sabemos hacer y no aventurarnos en campos en los que realmente no estamos capacitados para ser de los primeros en el mundo.
No podemos vivir sin la química, pero es una industria con muy poco prestigio entre la ciudadanía. ¿La batalla de la imagen en sociedad la ha perdido la industria química o cree que esto no es del todo cierto?
No. Yo creo que la estamos empezando a ganar. Es cierto que durante muchos años la química se ha asociado a la contaminación, a gases, a humos, a malos olores… algo que pudo ser cierto en épocas pasadas, pero la verdad es que empieza a ser percibida como lo que pensamos que es, un gran facilitador de soluciones a los problemas de la humanidad y de la tierra.
Cierto es que existe una serie de riesgos en las plantas químicas. Algunos productos que pueden resultar tóxicos o peligrosos, pero el nivel de cuidado y de gestión de riesgos que se emplea actualmente en la industria química es tan alto que éstos quedan muy minimizados frente a las ventajas que aporta la química como ciencia, que puede dar solución a problemas como por ejemplo, la promoción de alimentos, la gestión adecuada de los recursos o la eficiencia energética. Ahí la química desempeña un papel fundamental que estamos entendiendo poco a poco. Cuesta mucho esfuerzo porque hay un peso de imagen negativa que hay que combatir, pero estamos ganando esta batalla.
Química es muchas cosas. ¿Cuál es el principal negocio de Basf en España?
Tenemos seis segmentos en BASF y el que genera más negocio en estos momentos es el de Performace Chemicals, división que engloba los productos para el cuidado del hogar y personal, para la gestión del reciclado de aguas y para los lubricantes y combustibles, es decir, son productos químicos de alto valor añadido que en este momento son los que están soportando parte de la facturación, gracias sobre todo a las adquisiciones que realizamos en 2010 de Ciba y en 2011 de Cognis. Los negocios de estas empresas se han integrado en este segmento y por eso éste ha crecido sobreproporcionadamente con respecto a los otros.
¿Cómo valoran desde BASF Española la situación de la economía en España? ¿Qué dicen sus colegas de la central alemana?
Creo que en Alemania hay una cierta prudencia porque venimos de un año 2011 muy exitoso, con resultados récord. Sin embargo, este año ha comenzado diferente. El año pasado tuvimos un principio de año muy fuerte de actividad, de gran demanda por parte de los principales mercados y regiones, mientras que la segunda mitad fue bastante más floja. Este año continuamos con esta tónica un poco más débil con la esperanza de que la economía mundial se recupere durante el segundo semestre.
La ventaja de BASF radica en que estamos presentes prácticamente en todos los sectores importantes del mundo y cuando un mercado flojea un poco como puede ocurrir en el sur de Europa, tenemos la ventaja de compensar a nivel global con buenos resultados en otras áreas geográficas como pueden ser Sudamérica o Asia. Es decir, que en conjunto, BASF es optimista con respecto a este año. No sé si superaremos los resultados del año pasado, ese sería nuestro objetivo, pero el nivel de resultados que estamos obteniendo se acerca bastante al del año anterior que fue muy bueno.
Investigación y desarrollo, una de las claves de BASF, ¿qué inversión hace BASF en I+D+i y qué papel desempeña en 2012?
Este es un capítulo muy importante de la actividad de BASF. Nuestra estrategia para el año 2025, que recientemente hemos dado a conocer bajo el lema ‘We create chemistry’, señala que el motor de crecimiento para BASF es la sostenibilidad y la innovación. Éstas sólo se consiguen con los recursos necesarios para generar ideas y convertirlas en realidad y ahí hemos estado dedicando recursos muy importantes.
De hecho, nuestro presupuesto de I+D fue de 1.600 millones de euros y está previsto que siga aumentando hasta los 1.800 millones. Es un episodio muy importante, empleamos a más de nueve mil personas, doctores e ingenieros en nuestros laboratorios centrales que tienen la misión de proveer a BASF de nuevas ideas y soluciones. Nuestro objetivo es que el peso de los productos innovadores, de menos de cinco años, sea cada vez mayor en nuestro negocio total.
¿Qué proyectos a largo plazo se ha propuesto BASF y cómo prevé conseguirlos?
En 2020 tenemos objetivos de ventas muy ambiciosos. Hemos anunciado que nuestra meta es alcanzar los 115.000 millones de euros partiendo de la cifra del año pasado de 74.000 millones y pensamos tener un EBIDTA de más de 20.000 millones. Es decir, son crecimientos importantes que se quieren alcanzar mediante el crecimiento orgánico de la actividad de BASF y mediante adquisiciones.
BASF se ha propuesto intensificar su actividad en sectores como la gestión del calor, el tratamiento de agua y la electrónica orgánica ¿por qué? ¿qué proyectos tienen en estas áreas?
La gestión del calor es un campo muy interesante. Disponemos de unos pigmentos especiales muy innovadores que si se incorporan a piezas de plástico o simplemente a pinturas que pueden ir en los automóviles, tienen la capacidad de reflejar el calor. Es decir, esa experiencia tan desagradable de entrar en un vehículo en pleno verano aparcado al sol, tocar el volante y que esté a 60 °C, podría pasar a la historia si realmente conseguimos popularizar nuestra solución, que consiste en que estos pigmentos que consiguen reflejar el calor, impidan que ese calor se acumule en el objeto en el cual están integrados. Esto lo tenemos muy experimentado a escala de laboratorio y estamos presentando estas soluciones a los fabricantes de piezas de plástico o a firmas como SEAT, porque pensamos que puede ser una solución muy interesante.
En el campo del tratamiento de aguas estamos muy activos porque consideramos que la preservación del agua potable es uno de los retos principales que tenemos en la actualidad. Estamos intentando desarrollar, por ejemplo, nuevas tecnologías de desalinización, mediante ósmosis inversa que está muy extendida en España. Precisamente el mercado español es muy importante en la desalinización. A nivel mundial es el segundo productor de agua desalinizada, después de Arabia Saudí.
En cuanto a electrónica orgánica, estamos proponiendo el uso de los LED (Light Emiting Diade) que son los famosos diodos orgánicos. Éstos se pueden incorporar, por ejemplo, en estructuras de cristal y permiten generar luz a través del paso de corriente, lo que permite tener estancias en las que el propio cristal sea emisor de luz, como pueden ser vehículos en los que todo el techo sea una fuente de luz. Es una tecnología bastante revolucionaria y que aún no podemos encontrar más que en prototipos como por ejemplo, el Smart Car que hemos presentado hace poco con Daimler. Pensamos que tiene un potencial de crecimiento importante.
¿Qué novedades presenta BASF en el campo de los plásticos?
En esta división hemos seguido también una política de concentración en los plásticos que tienen menos carácter commodity. Cuando yo empecé a trabajar en BASF hace 22 años teníamos prácticamente todo el surtido de plásticos, el más amplio de todos los productores de plástico del mundo: poliolefinas, polietileno, polipropileno, poliestireno, plásticos de ingeniería, PVC... Esto ha ido cambiando y ahora mismo nuestra gama de plásticos se concentra, por un lado, en los plásticos de ingeniería, poliamida y poliésteres destinados a aplicaciones como piezas de automóvil que siguen siendo muy interesantes para nosotros. Por otro lado, damos especial importancia a las espumas, es decir, plásticos espumados para aislamiento, construcción o packaging, entre los que destacan Neopor o Megatrend, una marca tradicional de BASF.
Cada vez más se utilizan plásticos biodegradables en la industria, y BASF está comprometida en este sentido, ¿qué productos biodegradables tiene BASF?
Es una nueva familia que está creciendo con las marcas Ecovio y Ecoflex. Aquí somos muy activos porque pensamos que es una categoría de producto que ofrece soluciones muy interesantes como la que presentamos, films acolchados fabricados con Ecovio, en lugar de polietileno, un material que debe recogerse al acabar la cosecha. Nuestra propuesta es usar films de Ecovio que no se deben recoger, es decir, que pueden dejarse en la tierra y cuando se procede al arado, ese plástico se mezcla con el resto de los vegetales. Después de la cosecha, y al cabo de poco tiempo, se degrada y se convierte en biomasa, es decir, supone un ahorro de tiempo, de mano de obra y de reciclaje. Es un campo en el que vemos muchas posibilidades. No sirve para todo, hay que escoger muy bien el campo en el que proponemos este tipo de ventaja, pero estamos convencidos de que Ecovio tiene un futuro muy prometedor.
Tenemos también otros plásticos en el área de poliuretanos, para la que contamos con una división, BASF Poliuretanos Ibérica, que produce sistemas de poliuretano para aplicaciones en automóvil, construcción, calzado o en refrigeración, entre otros. Es un sector muy interesante pero que ahora está sufriendo la situación de la construcción y automoción en España.
El pasado 16 de marzo, Ud. fue elegido presidente de la asociación Andimat (Asociación Nacional de Fabricantes de Materiales Aislantes). ¿Cuáles son los principales objetivos que se ha marcado para la Asociación? ¿Su intención es mantener una línea continuista respecto a lo que se venía haciendo hasta ahora?
La verdad es que he tenido el honor de suceder a Andrés Lloansi, el antiguo presidente de la asociación que también era una persona vinculada a nuestra multinacional como gerente de BASF Poliuretanos Iberia. Él era representante de Andimat de la familia de poliuretanos y yo he tomado la función de presidente representado a la familia del XPS. De hecho, el mejor halago que se puede hacer a la función de Andrés es decir que el camino que él ha marcado es el que pensamos que debemos seguir.
Hacer una mayor labor informativa/didáctica sobre las ventajas que aportan los materiales aislantes en ahorro energético, protección del medio ambiente y confort…
Nuestra función es defender sobre todo el uso de aislantes térmicos, conseguir que se aísle más y mejor en el país y que las soluciones se tomen rápidamente, sin esperar muchos años más, porque aislar es una forma muy eficiente de contribuir a la reducción del consumo de la energía.
Eficiencia energética…
Sí, ser más eficientes energéticamente porque a este país le hace mucha falta. Estamos pagando mucho dinero en concepto de derechos de emisión de CO2 porque no cumplimos el Protocolo de Kyoto y el aislamiento, aquí, puede tener una función muy importante.
Andimat es un buen canal para trasladar estos mensajes a la industria y al gobierno, con el que nos reuníamos regularmente, y seguiremos en esta línea de trabajar conjuntamente, defendiendo todos los materiales aislantes desde una posición neutra. No nos decantamos por ninguno de ellos, todos tienen su campo de aplicación y ventajas e inconvenientes. Pretendemos ser una voz autorizada del sector.