“El valor más importante de un SRI es su capacidad para proteger al niño en caso de accidente”
Los aspectos clave de los SRI siguen siendo los mismos de siempre, y en esto debemos centrarnos los fabricantes. Y no solo eso, es responsabilidad de todos trasladar claramente este mensaje: La seguridad es la esencia de un SRI. El valor más importante de un SRI es su capacidad para proteger al niño en caso de accidente. El confort, la facilidad de uso y, sobre todo, la confianza en una marca responsable y con capacidad de investigación e innovación, son fundamentales en el momento de la elección. La calidad y la durabilidad de los SRI también son y serán puntos clave en los próximos tiempos, ya que la conciencia de no utilizar sillas prestadas, demasiado antiguas o usadas, va aumentando entre las familias y, afortunadamente, están ya valorando estos aspectos.
La seguridad de nuestros niños en carretera está estancada y no evoluciona debidamente, con unos datos de accidentalidad y siniestralidad de 2021 y 2022 que no son para nada esperanzadores y la evolución de los fallecidos que evidencia una crisis del sistema y la aplicación de fórmulas, por parte de la administración, obsoletas. Los fabricantes podemos hacer esfuerzos, y los hacemos, desarrollando productos mejores, más seguros, prácticos, cómodos, y en los últimos años ofreciendo precios ajustadísimos que dejan poco espacio a los márgenes necesarios para seguir investigando y desarrollando. Pero la administración debe hacer un cambio de rumbo definitivo. Es urgente y necesario. Desde AESVI, se está reclamando este cambio desde los inicios de nuestra fundación. Un cambio de rumbo que no base la “mejora” en la sanción, la ralentización y dificultad en la movilidad, sino en la prevención y estudio de los accidentes para implementar soluciones, de la misma manera que se hace con éxito en la aviación, por ejemplo. La formación, el estudio técnico de los accidentes por profesionales, y la aplicación de medidas de corrección, deben ser el eje fundamental para revertir esta alarmante situación. Importante también añadir, que es difícil mejorar un producto de seguridad sin conocer todos los aspectos técnicos que envuelven un accidente con el detalle necesario y poderlos evaluar concienzudamente en un Comité de Investigación que sea capaz de elaborar un informe determinante, que ayude a tomar acciones correctoras, disminuir la posibilidad de errores y la repetición, sobre todo, de fallos en la cadena de hechos que envuelven un accidente.
Tendencias de mercado
Aunque el atributo principal, y como no podría ser de otra manera, es el de la Seguridad, es verdad, por otro lado, que existen tendencias, y éstas vienen dadas por las prestaciones de nuestros productos y la mayor comprensión por parte de las familias, de la importancia de un SRI para la seguridad de sus hijos.
Un ejemplo lo tenemos en las sillas con facilidad de ser usadas en posición en contra de la marcha y a favor de ella. El uso en contra de la marcha, afortunadamente crece, aunque no con la intensidad que nos gustaría. Es verdad también, que existe mucha “rumorología” en torno al mayor uso en esta posición en otros países que, en mi opinión, experiencia y conocimiento, es más que dudosa. En términos generales, diría que en España esta conciencia es alta, aunque mi consejo es que debería serlo mucho más. Es más, estoy convencido que ya deberían implantarse cambios reglamentarios y legislativos en este sentido. Aunque no voy a desvelar en este momento cuál debería ser, en mi opinión, el enfoque de este cambio. También las sillas con un espacio mayor o rango de uso mayor van teniendo más aceptación. Esto ofrece una mayor tranquilidad a las familias ya que la preocupación por el cambio de silla a una de mayor rango de talla no es tan acuciante.
Evolución de las ventas
El futuro es esperanzador. Cada vez aumenta, en términos globales, la conciencia y uso de SRI, aunque desgraciadamente aún existen países con poblaciones muy grandes donde la seguridad en carretera no es, ni de lejos, una prioridad. Pero mi visión de futuro es positiva en este sentido. Los SRI deberán acompañar las tendencias en movilidad y crecer, junto a la necesidad de proteger mejor a nuestros pequeños. Es verdad que la especialización en estos productos no dejará espacio a todos los actores presentes, y el cliente y el estado de la técnica harán su selección.