“Ahora se ha abierto un mundo de posibilidades a los padres que quieren alejarse de lo estrictamente tradicional”
Ha habido tantos cambios en el sector del bebé desde que comencé hace más de 17 años, que no sabría por dónde empezar. Han sido muchas las familias que han acudido a nosotros para poder dar la mejor bienvenida posible a sus bebés, y existen artículos que han sido y serán esenciales siempre, como los carritos, las cunas y, por supuesto, la canastilla.
Como muy bien sabéis, la canastilla engloba todo el textil para la habitación del bebé (sábanas, cambiadores, sacos, neceseres, primeras puestas del peque…), y, al igual que todos los productos de cualquier sector, han experimentado un gran cambio a lo largo de los años.
¿Quién no recuerda la canastilla rosita y azul celeste, distinguiendo entre niñas y niños? ¿Y los encajes? ¿Y los bebés rosaditos como motivo de decoración? Ahora se ha abierto un mundo de posibilidades a los padres que quieren alejarse de lo estrictamente tradicional, lo cual, personalmente, disfruto muchísimo a la hora de atenderles.
Tendencias de mercado
Respecto a los colores, hemos viajado del rosa y azul clásicos a colores tierra y colores neutros como el gris, el beige, el verde agua o el turquesa. Los motivos también son novedosos, y podemos encontrar formas abstractas, animales o estilos selváticos, como los que han fomentado marcas como Bimbidreams o Bonjour.
Las tendencias en canastilla no solo afectan a estilos, sino también a productos completos. Me viene a la cabeza un producto concreto, la chichonera. Ahora no se recomiendan hasta pasados los 6 primeros meses porque las cunas están cada vez más simplificadas para ayudar a la ventilación y no sobreabrigar al bebé, y las ventas se han reducido considerablemente.
En cambio, los nuevos sistemas para dormir al bebé como las cunas de colecho, el moisés de mimbre y las camitas tipi han despegado en ventas por diferentes motivos: la comodidad y seguridad, la búsqueda de calidad cada vez más exhaustiva del cliente y el estilo y modernidad que aportan al hogar. Por cierto, hablando de modernidad, los vinilos para las habitaciones son una tendencia innegable, ¡cada vez están más solicitados!
Evolución de las ventas
Para terminar, me gustaría destacar el gran cambio que hemos experimentado en nuestro sector: el cliente. Antes las compras eran más impulsivas, pero ahora hemos detectado que consultan más en internet y en tienda, quieren informarse sobre lo mejor para su bebé, y eso ha hecho que en nuestro día a día nos esforcemos al máximo para que, además de hacer la compra, salgan de nuestra tienda con la confianza que necesitan.
Nuestro estilo es cercano y muy humano, y eso lo reflejamos en nuestras redes sociales, un escaparate con el que resolvemos dudas, mostramos nuevos productos y tenemos la oportunidad de conocer mejor a nuestros clientes, todo un lujo para nosotros.