Nerea Aranguren, Directora Departamento Ingeniería de Producto de Ideko
Si nos fijamos en los medios y procesos de diseño y fabricación, la implementación de las más modernas técnicas y herramientas de diseño en la mayoría de los fabricantes europeos ha reinventado los procesos de diseño y producción de máquinas logrando equipos más fiables, más mantenibles y con una mayor disponibilidad. Las técnicas de ingeniería virtual están a día de hoy fuertemente extendidas y su utilización junto con el diseño en 3D, el uso de paquetes de CAD CAM, etc., ha logrado que las empresas tengan un mayor control sobre el comportamiento de sus productos manejando conceptos antaño no considerados como costes de utilización, disponibilidad operativa o vida útil esperada. Otro dato fundamental en este terreno ha sido la implantación de sistemas de calidad y su efecto en los procesos de diseño y producción industrial.
Por último el modelo de negocio, que refleja una fuerte tendencia (sobre todo los últimos años) a la agrupación de empresas de tamaño medio buscando economías de escala, catálogos completos y capacidad de respuesta global tanto en venta de productos como servicios postventa.
Por otro lado, en nuestro entorno la clave de los próximos años estará, como en muchos otros subsectores industriales, en la diferenciación por innovación. La innovación tecnológica va a ser clave en el próximo periodo. Y es que la diferenciación es la base de la competitividad ya que atendiendo únicamente a los aspectos de calidad, coste y plazo, parece que no es viable el conseguir una ventaja mantenible en el tiempo. Es por ello por lo que hay que innovar, pero para hacerlo con garantías es necesario establecer marcos de colaboración estables que faciliten esta tarea. Algunos aspectos fundamentales son la selección del colaborador adecuado y tener capacidad de absorción de las tecnologías a comercializar.
Junto a esta tendencia, la incorporación de servicios a la venta de productos, identificando el servicio postventa como una oportunidad de negocio más que como una molesta obligación, es una línea ya emprendida por varios fabricantes y que sin duda será seguida por muchas organizaciones en los próximos años.
La manera en que el sector sea capaz de diferenciarse a través de la incorporación de tecnologías y nuevos modelos de negocio junto con el impacto que en las empresas y los mercados tenga la crisis financiera actual marcarán el devenir del sector en los próximos años.