“Se prevé que la capacidad de producción mundial de biopolímeros crezca aproximadamente un 47% en los próximos cinco años”
Entrevista a Eva Verdejo, responsable de la Línea de Negocio de Reciclado y Medio Ambiente en Aimplas y al frente del seminario BIOS
Los polímeros ganan terreno en el ámbito industrial. Conscientes de esta tendencia, de las dificultades que entraña la recuperación de materiales, la fabricación de materias biodegradables y los avances en la material, Aimplas ha convocado el próximo 1 y 2 de marzo la VI edición del Seminario Internacional Biopolímeros y Composites Sostenibles en la Cámara de Valencia en Paterna, en el que se rodea de empresas punteras que ya tienen productos de esta índole en el mercado y a investigadores que conocen de primera mano la actualidad y el enorme potencial de estas materias primas.
Existe un cierto desconocimiento en cuanto a la terminología de algunos conceptos bio en el sector de los plásticos. Para aclararlos, ¿qué es un biopolímero? ¿y un composite sostenible?
Un biopolímero es un polímero, que o bien tiene un origen renovable o es biodegradable; existiendo biopolímeros que son a la vez de origen renovable y biodegradables.
Un composite sostenible es aquel material compuesto que tiene unas características de buen comportamiento ambiental; en este ámbito hablamos de resinas y fibras de origen renovable y/o biodegradable.
Sin embargo, no todos los biodegradables son biopolímeros…
Todos los polímeros biodegradables son biopolímeros, pero hay biopolímeros que no son biodegradables, como por ejemplo un BioPET, que es un PET de origen renovable, pero que no es biodegradable y que podría seguir el mismo fin de vida que un PET convencional: el reciclado mecánico.
Lo cierto es que cada vez más, escuchamos estos términos en la industria del plástico. ¿No tiene la sensación de que se habla mucho de ellos en relación con su presencia real en el mercado?
Hay que tener en cuenta que si bien es verdad que los bioplásticos, constituyen una pequeña proporción con respecto a la totalidad de los plásticos, sigue creciendo. Se habla mucho de ellos por distintas razones, algunas veces contrapuestas a los propios plásticos tradicionales. Por ejemplo, estamos viendo la legislación francesa que en algunas aplicaciones de un solo uso presenta un calendario de prohibición para materiales no biodegradables. En estos casos, el crecimiento de estos materiales se espera que sea muy significativo.
Un dato significativo, en 2016 la capacidad de producción mundial era de 4,16 millones de toneladas. Y se prevé que esta capacidad crezca hasta las 6,1 millones de toneladas en 2021; es decir, aproximadamente un 47% en los próximos cinco años.
Los biopolímeros llevan ya años disponibles. ¿Ha cambiado mucho su composición química en los últimos años? Quiero decir, ¿continúan desarrollándose o básicamente son similares a los de hace años?
Ha habido un cambio significativo de crecimiento. Los materiales biodegradables tuvieron un gran impulso, pero en la actualidad y para los próximos años se espera un crecimiento mayor para los de origen renovable. Por ejemplo el 41,2% de la capacidad de producción mundial en 2016 de biopolímeros se corresponde con el biopoliuretano.
Además hay una tendencia, que se ve cada vez más en la propia investigación, donde se busca como origen de estos materiales, no productos agrícolas, sino residuos agrícolas y de la propia industria agroalimentaria.
¿Están los biopolímeros cada vez mejor preparados para su uso en la industria?
En este aspecto también se ha adelantado mucho. Antes pensábamos en un biopolímero como un material con peor procesado y peor propiedades que los materiales plásticos convencionales; sin embargo en la actualidad estos aspectos se han mejorado mucho. El precio en algunos casos sigue siendo una limitación, aunque también se ha reducido mucho la diferencia de precio y cada vez será menor si aumenta la capacidad de producción.
¿En qué medida piensa que son una solución real, con los pies en el suelo, al problema de los residuos plásticos?
El tema de los residuos plásticos tiene varios aspectos: se necesitan procesos de producción más eficientes, una buena conciencia ciudadana y buenos procesos de valorización de los residuos, además de una buena acción política, legal y administrativa. Poner a los bioplásticos como la solución a los residuos plásticos es un error. Los materiales biodegradables pueden ser una buena solución en el caso de una alta degradación del material plástico por uso, para plásticos que por su uso queden contaminados con una alta carga orgánica, por ejemplo. Los renovables pueden ser una buena solución para generarlos a partir de residuos, obteniendo productos de alto valor añadido. Pero los bioplásticos son una familia de los plásticos, deben convivir con ellos y complementar a los mismos; empleándose en las aplicaciones adecuadas y por supuesto gestionándose de la forma correcta.
¿Cree que su mayor implantación depende de una mayor concienciación sobre la importancia del medio ambiente por parte de la industria y de los consumidores? ¿O hay otros factores más complejos y económicos que condicionan su uso masivo?
La implantación de estos materiales depende de muchos factores, tanto ambientales, como sociales, económicos o legales. Es importante tal como se ha dicho anteriormente dar valor a estos materiales en su uso y trabajar adecuadamente en el sector para obtener buenos productos de forma eficiente. También es importante saber comunicar por parte del productor y /o del comercializador el valor ambiental en cada caso de los materiales y de los productos.
Vertidos cero en 2020, economía circular… ¿Qué papel tendrán en el escenario futuro de sostenibilidad?
¿Cuáles son las principales limitaciones que tienen estos materiales en la industria en la actualidad?
Hay varios aspectos que pueden constituir una limitación y que pueden estar interrelacionados: capacidad de producción, precio, falta de información y desconfianza/desconocimiento. Pero son aspectos que deben tratarse, mejorarse y un punto clave, darlos a conocer de forma seria y con una base científica.
En España y en todos los países de nuestro entorno europeo existen ya sistemas de recogida de residuos plásticos que no tuvieron en cuenta la existencia de biopolímeros. ¿Puede ser un problema la incorporación de los biopolímeros a estos sistemas debido al desconocimiento del consumidor final?
Este punto es muy importante en el caso de los materiales biodegradables. El fin de vida más lógico para estos materiales es separarlo de la corriente normal de reciclado de otros plásticos. La salida más adecuada a priori es el compostaje o la biometanización. Pero se debe separar y es difícil si no se tienen contenedores específicos o los consumidores no saben en cada caso diferenciarlos. Es importante seguir trabajando en estos temas para obtener unos buenos resultados.
Por el contrario materiales de origen renovable no biodegradables como por ejemplo el bioPET o el bioPE no tienen un comportamiento diferente ante el reciclado que los que presentan sus homólogos de origen fósil (PET y PE, respectivamente). La gestión puede hacerse y se hace de forma conjunta, no encontrándose diferencias en la calidad del reciclado obtenido.
Enumere las ventajas de un bioplástico frente a un plástico convencional
Este aspecto es difícil de contestar porque hay que analizar caso por caso. Si pensamos en cualquier producto que se fabrique bien a partir de un material convencional como a partir de un bioplástico hay que analizar cuánto material se usa, cuál ha sido el transporte de cada uno de los materiales, su origen, la temperatura de procesado, el tiempo de ciclo, la vida útil, el fin de vida útil o si existe gestión adecuada, entre otras preguntas.
Se puede decir que en algunos casos, se reducen las emisiones de CO2, se evita la dependencia de recursos fósiles, soluciona problemas en aplicaciones concretas por la capacidad de biodegradación, entre otros puntos importantes.
¿Hacia dónde se dirige la investigación de los biopolímeros y un composites sostenible? ¿Qué avances en esta materia se están dando?
La investigación va principalmente en cuatro vías: 1) Nuevos orígenes: residuos agrícolas, residuos de la industria alimentaria, aguas residuales municipales, por ejemplo. 2) Aditivación adecuada que comparta los mismos principios de estos materiales: renovables y/o biodegradables. 3) Nuevos y más eficientes procesos de obtención de estos materiales. 4) Nuevas aplicaciones de mayor valor añadido.
¿Puede adelantar alguna novedad que se haya lanzado recientemente al mercado en el ámbito de plásticos biodegradables?
Hay diferentes aplicaciones muy interesantes y que precisamente veremos en el VI Seminario Internacional Biopolímeros y Composites Sostenibles a celebrar en Valencia los próximos 1 y 2 de marzo. Estas aplicaciones siguen en el sector envase (cobrando mayor importancia los multicapa o los materiales barrera, por ejemplo), pero cada vez cobran más relevancia en otros sectores como la construcción, donde los materiales renovables son una realidad en fachadas o en particiones interiores o en la automoción, donde el uso de fibras naturales se ve en diferentes modelos de coche presentando unas importantes propiedades mecánicas y unos acabados de gran calidad.
Además hay que destacar otras aplicaciones, como agricultura, pesca y cómo no, la muy actual impresión 3D.
Tampoco hay que olvidar mencionar los biomateriales que tienen una procedencia de residuos, que constituyen una de las vías más prometedoras y sostenibles y que es de esperar nos den unos resultados cada vez más eficientes en la industria.
¿Podría indicar en qué aplicaciones se emplean en la actualidad y en cuáles cree tendrán cabida en un futuro?
La mayor aplicación actualmente de estos materiales es el sector envase, lo que es lógico, porque aproximadamente el 40% de los plásticos se emplean en este sector, y por otro porque el desarrollo de materiales biodegradables se enfocaron para que una vez fueran residuos estuvieran en una aplicación, el envase alimentario, que inicialmente tiene una carga de material orgánico biodegradable. Por tanto su fin de vida envase-restos de alimento fuera conjunta a través del compostaje. Dentro de este grupo destacar el tema de la bolsa para residuos orgánicos como producto para contener estos residuos y que fuera tratado de forma conjunta y no interfiriera negativa en la gestión, si no que le aportara valor.
Otros sectores fueron interesándose por estos materiales, pero también por los renovables, polímeros y/o fibras naturales. Conforme eran conocidos, mejoraban sus propiedades, disminuía su precio y se buscaban productos, y por tanto materiales, más sostenibles.
Respecto al futuro, se sigue esta tendencia y se prevé un crecimiento espectacular de materiales renovables. Por ejemplo el bio-poliuretano parece que es un material que en los próximos años se va a hablar mucho y que se relaciona con piezas de construcción, aislantes, adhesivos, recubrimientos, piezas técnicas, carcasas, entre otras. Es decir, vamos a ver una gran evolución.
Fundamentalmente se emplean en el sector del envase, ¿qué perspectivas de futuro espera que tengan en este segmento industrial? Porque existen soluciones pero, ¿se están implementando de forma que podemos adquirirlas en un supermercado?
En este segmento se espera una evolución positiva con un crecimiento importante hay envases más técnicos que den un valor añadido al producto, mayor conservación o mayor vida útil, entre otros aspectos. Esto implica en muchos casos los vamos a ver para productos de mayor valor añadido, no solamente en alimentación, también por ejemplo en cosmética bien en supermercados o en establecimientos especializados.
En estos casos, esperamos que se haga una buena comunicación del envase, de sus materiales y propiedades. Es importante que el consumidor los conozca y los reconozca, tanto para su elección como en el caso de materiales biodegradables para su correcta gestión una vez se conviertan en residuos.
¿Cómo calificaría el empleo de este tipo de materiales en España?
Son materiales que se emplean; algunos de forma más habitual y conocidas, como por ejemplo el caso de las bolsas biodegradables, otras desconocidas por el ciudadano pero muy importantes como el caso de las fibras naturales en algunos coches o el de las resinas renovables termoestables usadas en las diferentes aplicaciones. Muchas veces hay poca información o al menos ésta no llega al ciudadano.
Si el peso de ellos en la industria crece, ¿de qué manera afectaría a por ejemplo, fabricantes de maquinaria? ¿Se procesan de la misma manera que un material convencional?
El procesado depende del material, que hablemos por ejemplo de un PLA que podría sustituir a un PET en ciertas aplicaciones, implica cambios en el procesado, temperaturas, tiempo de ciclo, etc. Pero por ejemplo un BioPET y un PET tradicional no presentarían cambios sustanciales, lógicamente solamente los relacionados con diferentes grados.
También es importante por ejemplo en el caso de una fibra natural que sustituya a una fibra más convencional como las de vidrio. Lógicamente requiere un conocimiento de procesado para sacar de ellas su máximo partido, pero ¿cuándo no ha sido así? La profesionalidad del transformador con éstos y otros materiales siempre es necesaria y se ha demostrado que por eso el nivel de la industria en España, en particular, y en Europa en general es muy alto; aunque como siempre hay que seguir trabajando y mejorando.
Así, tanto los transformadores como los fabricantes de maquinaria necesitan adaptarse poco a poco en mayor a menor medida a los nuevos materiales y a las tendencias.
¿Y a gestores de residuos plásticos?
Lógicamente la introducción de nuevos materiales influirá en la gestión de estos residuos; por tanto los gestores tienen que conocerlos, saber cómo trabajar con ellos y adaptarse. Pero también hacer llegar qué a fabricantes y transformadores qué problemas podrían plantear en la gestión, para hacer productos ecodiseñados pensando en el fin de vida. Pero esto no solamente debería ocurrir con estos materiales, es necesario trabajarlo también en los tradicionales, donde en demasiadas ocasiones no se tiene en cuenta estos aspectos y presentan problemas de gestión en general y de reciclado en particular.
Hay que tener en cuenta que cuando hablamos de gestión hay que pensar tanto en empresas gestoras, pero, para empresas que van a consumidor final, hay que incluir en estos aspectos al propio ciudadano y a los propios sistemas integrados de gestión y en general ver cómo deben adaptarse los sistemas de recogida y de contenerización por parte de la Administración Pública y las Entidades Locales, entre otros.
¿Háblenos de la jornada, de sus objetivos, ¿por qué han decidido organizarla? ¿Existe suficiente información al respecto?
En este año se celebra la VI Edición del Seminario, que se lleva celebrando de forma trienal desde el año 2002. Cuando se planteó por primera vez se quería dar a conocer estos materiales, muchos estaban en fase inicial, y qué posibilidades de futuro tenían. Se quería mostrar que son materiales que podían aportar mucho a ciertas aplicaciones y productos, de forma complementaria a los materiales plásticos tradicionales. Aunque se dio un enfoque internacional, trayendo en aquel momento los mayores expertos en estos temas, los asistentes eran mayoritariamente nacionales.
Años después seguimos con esta misma filosofía, aunque en esta edición podemos hablar de materiales implantados, de realidades, hablamos de nuevos desarrollos impensables en aquellos momentos. Pero también hablamos de legislación, de políticas europeas, de materiales que son claves en la tan en boga economía circular. Pero lógicamente como una parte de la gran familia de los plásticos y de los composites y de sus grandes propiedades.
Creemos que ahora se tiene en general más conocimiento que hace 15 años, pero la industria necesita conocer estas posibilidades y estas oportunidades de negocio que se le presentan. Además para la Comunidad Científica y Tecnológica es una oportunidad de mostrar su trabajo a través de la sesión paralela de pósters y de compartir entre todos, conocimiento e innovación en estos aspectos clave.
En esta edición, seguimos contando con ponentes a nivel internacional, pero cobran también mucha importancia los ponentes nacionales, señal de que cada vez se hace más innovación e investigación en España sobre estos temas. Los asistentes son de un mayor número de países, muchos de ellos de fuera de Europa.
Por último, ¿cómo convencería a un asistente para que asistiese?
Creo que poco hay que añadir a un programa muy completo respecto a este mundo actual y de futuro.
Pienso que hablar de ponentes y organizaciones como Nova Institute, European Bioplastics, OWS, Centexbel o Sirris; o de empresas como Novamont, Renault o Plásticos Romero, tan destacadas en sus sectores (materias primas, automoción o envases) solo por comentar algunas, da una señal de que va a ser interesante.
Además, por primera vez hemos abierto el seminario un poco más, dando la oportunidad a la presentación de pósters para ver otras posibilidades, investigaciones o realidades, porque pensamos que hay muchos temas interesantes para dar a conocer, y que por temas de tiempo no caben en el programa de conferencias. Estos posters implican todo lo que hay por contar y todas las novedades y las oportunidades que estos materiales representan.
Además se va a hablar no solo de materiales, sino de aplicaciones reales no solamente en envase, también en cuanto, automoción, agricultura, pesca, 3D, o construcción, entre otras, vamos, todos los sectores donde el plástico está presente, por no decir todos.
Esperemos que la VI Edición del Seminario, en la que contamos con patrocinadores de primera línea como API, BASF, Bio-Fed, Kurray, Naturtruck, Novamont y Perkin Elmer, sea todo un éxito, cubra todas nuestras expectativas y que en el 2020 celebremos el VII Seminario con más cosas novedades y cosas interesantes.