Aplazadas las expectativas
La IMTS de Chicago no ha traído la confirmación de la recuperación económica. Al menos de forma tan clara y tajante como algunos esperaban.
Este era, a grandes ragos, el escenario donde se desarrolló la IMTS, la gran feria de la máquina herramienta de Chicago.
Según una opinión generalizada, la feria tenía que actuar de revulsivo del sector, afectado por el enfriamiento bursátil y productivo que había quedado tras el clima de euforia económica del año 1999. Ya antes de la feria se esperaba un despegue "claro y vertical", visible durante la segunda mitad de este año, y que no se acaba de producir aunque, al parecer de muchos, la crisis ya ha tocado fondo.
Los expositores españoles que se desplazaron a Chicago comparten esta opinión una mezcla de nervios y alivio con la que reconocen tanto el descenso de visitantes de la feria como los primeros indicios de una posible recuperación.
Ramón Cenarruzabeitia, de Fresmak, que acudió como expositor, confirma esta idea. "Si nos basamos en comentarios (que es lo único que puedo aportar) parece ser que la situación no va a peor e incluso parece que comienza a apuntar una ligera subida" y añade "La sensación es de que parece que ya se ha acabado la crisis, pero tampoco se ve esa mejoría clara que todo el mundo esperaba".
La opinión de la Asociación de Fabricantes de Máquina Herramienta (AFM) es parecida. En un comunicado emitido después de la feria, la asociación considera que la feria "ha puesto de relieve que las expectativas de mejoría se aplazan al 2003". Sin embargo, la AFM destaca algunas impresiones positivas, "las empresas norteamericanas necesitan realizar inversiones de reequipamiento tecnológico" y "el incremento en la utilización de la capacidad de producción existente".
Menos visitantes
Sin embargo, que se tratara de una feria "floja", como la ha definido Jesus A. Echabe, director de Márqueting de Danobat, no significa que no se hayan cerrado tratos ni se hayan hecho negocios.
Una cifra considerable pero alejada de los más de 100.000 del año anterior
Negocios
Respecto a los negocios, la suerte fue bastante caprichosa. Cenarruzabeitia comenta que una de las empresas donde habían colocado ocho mordazas había vendido 14 máquinas y esperaba la confirmación para otras cuatro, pero "lamentablemente añade esta no fue la tónica habitual en todos los stands de maquinaria".
La empresa Danobat, por su parte, acudió a la IMTS con la ambición puesta en el mercado estadounidense, fruto del acuerdo de su filial (Danobat Inc.) con la firma americana C&B en materia de rectificado. El acuerdo afecta a las rectificadoras de las firmas Danobat y Estarta, ambas del grupo Mondragón y la voluntad de apostar por ese mercado se puso de manifiesto con la presentación de siete máquinas y la presencia en dos pabellones en el pabellón donde se encontraba la representación española de la AFM y en el pabellón donde estaba la firma C&B. Todo ello, lógicamente, con el conocimiento y la prudencia ante "la situación en la que se encuentra Estados Unidos"