Aoru advierte sobre los riesgos de flexibilizar los objetivos de CO2 en la UE
La Asociación de Operadores de Recarga Ultrarrápida (Aoru), que agrupa a las empresas del sector de carga ultrarrápida para vehículos eléctricos en España, expresó su preocupación ante las propuestas incluidas en el ‘Plan de Acción para la Industria Automovilística’ de la Comisión Europea. En una carta abierta, la organización subrayó la necesidad de garantizar estabilidad regulatoria para fomentar la inversión en la electromovilidad y avanzar hacia un modelo de transporte más sostenible.

Aoru destacó el compromiso asumido por la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, de mantener los objetivos de reducción de emisiones de CO2 en el horizonte regulatorio europeo. Sin embargo, advirtió sobre el riesgo de introducir medidas que generen incertidumbre, especialmente en una industria aún en desarrollo. “Es crucial que las decisiones políticas que se adopten en la Unión Europea garanticen predictibilidad, de modo que se mantenga la confianza de los inversores en un sector innovador”, señaló la asociación su carta.
Uno de los principales puntos de preocupación de Aoru es la propuesta de reabrir los estándares de CO2 en 2025 y aplicar un mecanismo de cumplimiento gradual para los fabricantes de automóviles durante tres años. Según la entidad, esta 'flexibilidad' podría traducirse en una menor inversión en la electrificación del transporte y en la pérdida de competitividad de la industria europea. “Si esta flexibilidad se reitera, puede tener un efecto de desincentivación de la inversión y, por ende, de reducción de la competitividad de la industria europea”, advierte la asociación.
En el caso de España, segundo mayor productor de vehículos en la UE, Aoru recalcó la importancia de mantener los objetivos previamente fijados para garantizar la seguridad jurídica y facilitar la electrificación del transporte por carretera. En este sentido, subrayó la necesidad de establecer medidas normativas claras que impulsen la adopción del vehículo eléctrico, especialmente en las flotas corporativas. La organización instó a la Comisión Europea a incluir incentivos fiscales específicos para los vehículos eléctricos puros en su próxima propuesta legislativa, con el fin de acelerar la transición.
“Nos encontramos en un momento clave para la movilidad eléctrica, y no podemos permitir que la falta de concreción y solidez en las políticas adoptadas dilate en el tiempo los progresos que nuestra industria ya está haciendo en Europa”, concluyó Aoru en su carta. La asociación confía en que la Comisión Europea mantenga su compromiso con la descarbonización del transporte, garantizando así la seguridad jurídica y la estabilidad necesarias para el desarrollo de la industria de la electromovilidad en los próximos años.