Entrevista a Helena Peñas, responsable de Bioenergía y Gases Renovables en Norvento Enerxía
El biogás se posiciona como una herramienta estratégica para la descarbonización y la reducción de la dependencia energética en las empresas españolas, especialmente en sectores como el agroalimentario. Norvento Enerxía destaca su potencial para convertir los residuos en energía útil, impulsar la economía circular y mitigar la volatilidad de los precios energéticos. Así nos lo explica Helena Peñas, responsable de Bioenergía y Gases Renovables de la compañía en esta entrevista.
¿Cómo valora el potencial del biogás para mejorar la competitividad de las empresas en España?
El biogás representa una oportunidad estratégica para que las empresas en España puedan avanzar en su proceso de descarbonización y reduzcan su dependencia de fuentes convencionales. Tanto en sectores con generación de residuos orgánicos, susceptibles de ser transformados en biogás, como en aquellas empresas que puedan disponer del mismo a relativa proximidad (sector primario u otras empresas agroindustriales, por ejemplo), se conseguirá no solo una disminución de su impacto ambiental, sino que también se logrará una mayor estabilidad frente a la volatilidad de los precios energéticos. Este tipo de solución permite convertir un desafío, como es la gestión de residuos, en una ventaja competitiva, contribuyendo tanto a la sostenibilidad como a la eficiencia de las operaciones.
¿Qué beneficios pueden esperar las empresas industriales al incorporar el biogás en sus operaciones?
La incorporación del biogás aporta múltiples ventajas a nivel competitivo y operativo. Además de reducir su huella de carbono y contribuir a la sostenibilidad, las empresas pueden disminuir su dependencia de fuentes de energía convencionales, lo cual mitiga riesgos relacionados con los precios de la energía y la volatilidad del mercado. Desde Norvento ofrecemos soluciones personalizadas que maximizan el aprovechamiento de los recursos propios de cada empresa y de su entorno, generando ahorros en gestión de residuos y una fuente de energía estable y controlada.
¿Qué sectores industriales pueden beneficiarse más de las soluciones de biogás de Norvento, y de qué manera?
Toda empresa del sector industrial con demanda energética, y con disposición de residuos a proximidad o generados en su propio proceso productivo, como es el caso de la industria alimentaria, cárnica, bebidas, sector lácteo… son especialmente aptas para beneficiarse de nuestras soluciones de biogás. Desde Norvento, desarrollamos proyectos ad hoc, diseñamos plantas de biogás adaptadas a las necesidades y recursos específicos de cada industria, facilitando una gestión sostenible de los residuos orgánicos y la conversión de estos en energía útil. Tenemos varios proyectos en desarrollo en el sector agroalimentario, donde trabajamos con empresas para avanzar en su proceso de descarbonización, convirtiendo sus propios subproductos en una fuente de energía que impulsa su productividad.
¿Cómo está contribuyendo Norvento Enerxía al desarrollo del biogás y biometano en España?
En Norvento llevamos años trabajando en el sector del biogás en España, convencidos de su enorme potencial para contribuir a la transición energética. Contamos con plantas asociadas al sector primario en operación desde hace más de una década, somos de alguna forma pioneros en este ámbito. Nuestra experiencia en este campo nos ha permitido validar soluciones tecnológicas, y desarrollar esquemas innovadores de proceso.
Un ejemplo de proyecto de biogás asociada al sector industrial, de reciente ejecución, es nuestro proyecto con una relevante empresa cárnica gallega. En esta planta de biogás, tratamos unas 30.000 toneladas anuales de subproductos orgánicos, incluyendo los desechos del matadero y gran parte de sus aguas residuales. Gracias a este sistema, generamos aproximadamente 7.000 MWh anuales de biogás, cubriendo el 80 % de la demanda eléctrica y el 100 % de la térmica de la instalación.
Este proyecto permite evitar la emisión de más de 400 toneladas de CO2 al año, únicamente por el reemplazo del combustible fósil, lo que es clave para reducir la huella de carbono de la industria cárnica. Hemos implementado un sistema de depuración del digestato que cierra el ciclo de gestión de residuos, haciendo de este proyecto un ejemplo de economía circular.
Nuestro objetivo es seguir desarrollando iniciativas de este tipo, donde la sostenibilidad y la eficiencia energética van de la mano, demostrando que el biogás es una solución viable para sectores que hasta ahora no habían aprovechado al máximo su potencial.
“Es necesaria la implicación de todos los agentes de la cadena de valor que sumen esfuerzos para conseguir un desarrollo sostenible del biometano en España”.
¿Qué innovaciones tecnológicas ha implementado Norvento Enerxía para optimizar la producción de biogás y biometano?
En Norvento Enerxía apostamos por la innovación como pieza clave para el desarrollo del sector. En nuestra plataforma de I+D en Xustás (Lugo), investigamos y probamos nuevas tecnologías de codigestión de subproductos, y procesos disruptivos en torno a los gases renovables. Esta instalación nos permite pilotar procesos innovadores, como es el caso de la fermentación oscura, que desarrollamos en el marco del proyecto Zeppelin, y que busca la generación de hidrógeno verde, un recurso clave para el futuro energético, a través de procesos biológicos similares a la digestión anaerobia.
Otro ejemplo de desarrollo reciente ha sido la llevada a cabo en el proyecto Neosuccess, en el que se ha investigado sobre la formación simultánea de biometano y ácido succínico, convirtiendo el CO2 biogénico presente en el biogás en esta molécula plataforma de gran importancia en la industria, principalmente de producción de plásticos.
Hablemos de futuro, ¿cómo evolucionará?
El sector se encuentra sin duda en un momento álgido en España. Existen estudios que apuntan a un potencial de biometano en recurso superior a cualquiera de los países del entorno (hay estimaciones que señalan que se podría cubrir el 45% del consumo de gas con biometano). Por otro lado, el grado de implantación de la tecnología dista mucho del recorrido de países como Alemania, Francia, Italia… quedando todavía prácticamente todo el camino por recorrer.
Se hace necesaria ahora la implicación de todos los agentes de la cadena de valor (promotores, ingenierías, epecistas, proveedores de recurso, administraciones…), que sumen esfuerzos para conseguir un desarrollo sostenible del biometano en España, y superar las barreras, ya no técnicas, pero sí económicas o societales que puedan surgir.