Entrevista a Antonio Cordón, presidente de la Asociación para la Transición Energética
La Asociación para la Transición Energética (ATE), fundada en 2019, se ha destacado por su independencia y neutralidad en el debate sobre la transición energética, otorgando voz a la sociedad civil. En esta entrevista, Antonio Cordón, presidente de ATE, nos ofrece una visión sobre los logros de la asociación, sus objetivos y actividades para promover la transición energética, así como las conclusiones del documento presentado recientemente sobre las redes eléctricas y los desafíos a los que se enfrentan. Además, Cordón explica el papel crucial de las redes inteligentes y propone soluciones para superar los obstáculos en su desarrollo, subrayando la importancia de la colaboración público-privada y la adaptación normativa.
La Asociación para la Transición Energética fue fundada en 2019. ¿Cuáles han sido los principales logros de la asociación desde su fundación?
El principal logro de la asociación ha sido precisamente la creación de una entidad independiente y neutral centrada en el debate sobre todos los aspectos relacionados con la transición energética y en otorgar una plaza en ese debate a la sociedad civil.
¿Cuáles son los principales objetivos de ATE y qué actividades lleva a cabo para alcanzarlos?
El principal objetivo de ATE es que la transición energética, que consideramos que es el proceso de transformación económica, social e incluso política más importante de nuestro tiempo, encuentre el lugar que le corresponde en el debate público. Esto no es una tarea fácil ni está al alcance de una asociación modesta como es la ATE, así que nuestro objetivo es encontrar alianzas y movilizar recursos para tratar temas concretos en lugares de interés especial, de forma que podamos encontrar un eco mayor e ir creando la receptividad necesaria y consecuente hacia estas cuestiones que son capitales.
El pasado mes de enero, ATE presentó el documento ‘Redes eléctricas: necesidad, urgencia y desafíos’. ¿Cuáles son sus principales conclusiones?
La principal conclusión del debate entre expertos fue la necesidad y la urgencia de invertir en redes eléctricas en este preciso momento a fin de acomodar el proceso de electrificación que el propio gobierno ha decidido y que la sociedad espera, y aprovechar la oportunidad económica que supone la transición energética.
¿Cuáles son los principales retos de las redes eléctricas? ¿Está preparada la red eléctrica española para hacer frente a los desafíos de la transición energética?
La red eléctrica española está muy bien diseñada para hacer frente a las necesidades del país ahora. La cuestión es que los objetivos que nos hemos impuesto, tanto en España como en la UE, prevén un salto cualitativo y cuantitativo espectacular, tanto en la electrificación como en las fuentes de producción de energía, y eso en plazos muy exigentes. Sin inversiones en la red, ese salto es una entelequia, sobre todo para poder atender la nuevas inversiones que pueden venir a España o la demanda de industrias que quieran descarbonizarse.
¿Cuál es el papel de las redes inteligentes en la transición hacia un nuevo modelo energético?
¿Cuáles son los principales obstáculos con los que se encuentra el desarrollo de las redes eléctricas? ¿Qué propuestas ha presentado ATE para superar dichos obstáculos?
El principal obstáculo al que se enfrenta este desarrollo es cambiar el marco regulatorio de la financiación de estos proyectos, así como agilizar los procesos de acceso y conexión. Todo ello en relación con la colaboración público-privada, la innovación tecnológica y la adaptación normativa. Tenemos que conseguir una planificación flexible y ágil con una revisión bianual de los planes de desarrollo de la red que nos permita adelantarnos a las necesidades urgentes y ofrecer alternativas atractivas para los inversores en los nuevos proyectos de la sociedad descarbonizada.
Según el documento presentado por ATE, desde hace 10 años el esfuerzo inversor en redes eléctricas es prácticamente vegetativo. ¿A qué obedece esta situación y cómo se
puede impulsar la inversión?
El esfuerzo inversor en redes eléctricas es siempre considerable y por lo tanto obedece a las leyes de la oferta y la demanda. La cuestión es que ahora tenemos que hacer algo más porque estamos ante el reto de la descarbonización pero también ante el reto de una reindustrialización europea y en ambos campos tenemos que ser proactivos si queremos ser uno de los países que se beneficien de la transición energética. Es un reto país.
¿Qué opinión tiene la asociación sobre el Plan de Acción para las Redes Eléctricas lanzado por la Comisión Europea?
Es un plan exigente a la altura de la posición de liderazgo que la UE quiere desarrollar en el mundo. Resulta positivo que se ponga el foco en las redes, sin las que la transición no es posible.
El pasado mes diciembre, el Consejo y el Parlamento de la UE alcanzaron un acuerdo para reformar el mercado eléctrico. ¿Cuál es su valoración sobre esta reforma?
Nos parece que está en el camino correcto. Podríamos destacar que el mismo propone la necesidad de realizar inversiones anticipadas en redes, en línea con lo que hemos venido comentando.
"Tenemos que conseguir una planificación flexible y ágil con una revisión bianual de los planes de desarrollo de la red que nos permita adelantarnos a las necesidades urgentes y ofrecer alternativas atractivas para los inversores en los nuevos proyectos de la sociedad descarbonizada"