Entrevista a Iván Tallón, country manager Iberia de Wallbox

Wallbox es uno de los proveedores líder en soluciones de carga y de gestión de la energía a nivel mundial. Presentes en 113 países, su oferta cubre la carga doméstica, la semi-pública y la pública. Pero no sólo esto sino que su visión es que el vehículo eléctrico es mucho más que una solución de movilidad: es la piedra angular de un nuevo sistema de gestión energética.

“Debemos proporcionar los medios necesarios para que los conductores den el paso definitivo hacia la movilidad de cero emisiones”.

En Wallbox, creemos que el vehículo eléctrico es la pieza fundamental que nos permitirá hacer la transición hacia el uso de fuentes de energía renovables. Y es que el vehículo de cero emisiones nos permite unir diversos elementos y permite hacer una gestión integral de la energía, tanto para la movilidad como para suministrar la energía que tiene almacenada en su batería a una casa, una comunidad u oficinas, por ejemplo.

Cuando hablamos de que el vehículo eléctrico nos lleva hacia un cambio de paradigma de la gestión energética tal y como la conocemos hoy, pensamos más allá de la movilidad eléctrica: desarrollamos nuestros productos partiendo del principio que el coche es una gran batería sobre ruedas que el usuario utilizará para su movilidad, sí, pero también para almacenar energía proveniente de fuentes limpias, y usarla en su hogar en las horas que la energía es más cara en lugar de consumir la energía proveniente de la red eléctrica. El elemento que hace posible este intercambio de energía es el cargador bidireccional: Wallbox lanzó al mercado el primero de uso doméstico hace 3 años y ya estamos a punto de presentar la segunda generación.

En resumen, la cadena que permitirá el cambio de paradigma en nuestra sociedad está formada por el coche eléctrico, los cargadores bidireccionales inteligentes y las fuentes de energía renovables.

Sirius, el software que gestiona todo el consumo energético de nuestra sede en Barcelona. Inicialmente fue creado para dar respuesta a una necesidad interna de Wallbox: nuestras oficinas tienen más de 11.000 metros cuadrados y, tanto por la cantidad de personas como por nuestra actividad, necesitábamos unos 400kW de potencia. Sin embargo, la red nos ofrecía solamente 173kW. La única solución viable era un generador, que va totalmente en contra de nuestra filosofía. Es por ello que decidimos crear Sirius. Este software cuenta con diferentes fuentes de energía: los vehículos eléctricos conectados a través de cargadores bidireccionales, placas solares, una batería de almacenamiento estacionario y la propia red eléctrica.

Sirius funciona como un gran cerebro que decide en tiempo real cuándo usar una fuente u otra, así como reducir o aumentar el consumo de cada una, siempre priorizando las fuentes más baratas y renovables. Esto, como bien decías, nos ha permitido un ahorro de 85.000 euros en nuestra factura eléctrica mientras, al mismo tiempo, nos permite monitorizar nuestras emisiones y, por lo tanto, reducirlas.

Sí, sin duda alguna. Estamos seguros de que el coche eléctrico no sólo es la solución de movilidad más sostenible, sino también -como he explicado anteriormente- es la pieza clave del nuevo modelo de gestión energética y el pilar fundamental para la transición hacia las energías renovables.

En Wallbox ya no nos imaginamos una casa nueva sin un cargador para el vehículo eléctrico; consideramos que es un elemento indispensable y, por este motivo también, damos mucha importancia al diseño.

Cuando Wallbox fue fundada en 2015, el foco de la empresa era la carga doméstica. Y es que Enric Asunción y Eduard Castañeda, los fundadores de Wallbox, consideraban que dar respuesta a las necesidades de los usuarios en cuanto a soluciones de carga para el hogar eran esenciales para el despegue definitivo de la movilidad eléctrica y, en aquel momento, las grandes empresas no se estaban centrando en este tipo de soluciones.

La carga pública, en entornos urbanos e interurbanos, es obviamente indispensable -y es uno de los deberes pendientes que tenemos en España -ya que hay momentos puntuales del año que hacemos un viaje de larga distancia además que no todo el mundo dispone de una plaza de aparcamiento donde instalar un cargador. Pero sabemos que la inmensa mayoría -de hecho, un 80%- de las cargas ocurre en casa, en las horas de la noche o de la madrugada, que es cuando el coche está aparcado y que la energía es más barata. Además, también sabemos que una carga completa es más que suficiente para cubrir la distancia media recorrida cada día en coche por el usuario medio, en sus desplazamientos de casa al trabajo, por ejemplo. Y es que poder llegar a casa, enchufar el vehículo y al día siguiente por la mañana salir con el depósito lleno es un punto fundamental para este nuevo paradigma de movilidad.

Ahora, la velocidad de dicho cambio es un compromiso que debe ser asumido entre todos los actores implicados. Debemos proporcionar los medios necesarios para que los conductores den el paso definitivo hacia la movilidad de cero emisiones.

El primer paso es dar solución a las demandas prioritarias de los conductores: mejores modelos de fiscalidad y la ampliación de la red de carga pública. En este sentido, todos sabemos que España es uno de los países europeos a la cola de la electrificación y es un tema que, entre todos, debemos solucionar cuanto antes. Más cuando somos uno de los principales productores europeos de vehículos eléctricos.

Otro mito es que no hay suficientes modelos de coches eléctricos para elegir. ¡Nada más lejos de la verdad! Hoy ya hay más de 500 modelos en el mercado en todo el mundo, de todas las gamas, para todos los gustos y posibilidades. Y a medida que la popularidad de los VE crece, más modelos llegarán a los consumidores y más baratos serán. Con los avances tecnológicos, el coste de producción de celdas de litio para batería de los VE ha caído alrededor del 87 % en los últimos 10 años.

“Sirius funciona como un gran cerebro que decide en tiempo real cuándo usar una fuente u otra, así como reducir o aumentar el consumo de cada una, siempre priorizando las más baratas y renovables”