La revolución silenciosa del vehículo eléctrico
Nuestro país está viviendo una revolución silenciosa en su movilidad, que sin duda va a modificar (ya lo está haciendo de hecho) los patrones en la forma de desplazarse de los ciudadanos en su entorno urbano y periurbano, no ya solo con iniciativas privadas, sino también con el impulso de gobiernos locales que apuestan cada vez más por un transporte público no contaminante.
La necesidad de abordar soluciones que reduzcan de forma drástica el nivel de emisiones contaminantes en las ciudades, unido a una nueva generación de ciudadanos cada vez más concienciados con la importancia de la calidad del aire que respiran y con un sentido práctico en el coste que supone su movilidad para sus bolsillos, junto con un desarrollo tecnológico que permite disponer de opciones económica y ecológicamente más eficientes, están ayudando a este cambio en los patrones de movilidad, que cada vez resulta más evidente y que transformará en la próxima década la vida y la forma de interrelacionarse en el entorno urbano.
Es algo que sucede en todo el mundo, casi sin excepción, pero que se manifiesta de forma diferente en cada continente, país y ciudad. Las políticas de apoyo al vehículo eléctrico a cargo de gobiernos nacionales, regionales y locales afectan de forma decisiva a la velocidad e intensidad de este cambio, que sin duda acabará imponiéndose de forma global, pero cuya velocidad varía en función de quienes nos gobiernen. Leer más…
Arturo Pérez de Lucía
Director Gerente de AEDIVE
Artículo publicado en: FuturENERGY Septiembre 2016