Persianas contra rejas
28 de abril de 2011
Además de su difícil encaje estético, la seguridad que proporciona una reja convencional de tubo de hierro, sea éste hueco o macizo, respecto a la de una persiana de seguridad es menor. Esto se debe a que, en general, por estética y para no reducir la entrada de la luz, los barrotes verticales y horizontales de las rejas no son muy tupidos, de tal forma que basta con cortar uno de los tubos con una sierra de mano para permitir el paso del intruso.
Actualmente, existen varios modelos y marcas de persianas de seguridad en el mercado, todas ellas metálicas, siendo el aluminio la opción preferente, y con diversos sistemas antiblocantes o antipalanca que las hacen, cuando están bajadas, incluso más resistentes que los propios muros. De hecho, la instalación de persianas de seguridad es la opción más recomendada en viviendas con fácil acceso a ventanas y puertas de terraza, como chalets o viviendas de planta baja.
Persianas de seguridad autoblocante
El sistema de la persianas de seguridad autoblocante que comercializa la casa Velux, gran especialista internacional en cerramientos, se basa en la inserción de una lama intermedia de 14 milímetros entre las lamas principales. Esto evita que la persiana pueda ser levantada desde el exterior ya que, al intentar empujarla desde abajo, se gira y bloquea la persiana. Su instalación no requiere obra, ya que se puede sustituir la persiana antigua por la de seguridad sin tener que cambiar siquiera los cajones existentes.
Las persianas de seguridad deben motorizarse, debido a su elevado peso por metro cuadrado (en torno a los 12 kilos) frente a los 3 que suele pesar una persiana de aluminio térmico convencional. En estas condiciones, levantar la persiana con cinta u otro sistema manual requiere un enorme esfuerzo físico. El motor puede ser convencional con interruptor, o con acceso vía radio. En este último caso, la persiana puede accionarse con un mando a distancia. El funcionamiento de la persiana es el mismo en ambos casos, si bien, la opción con interruptor conlleva más instalación, lo que supone, en muchos casos, más obra.
El motor vía radio tiene como ventaja una instalación más sencilla, rápida y limpia, así como la posibilidad de centralizar todas las persianas en un solo mando. Esto último resulta especiamente útil en casas con varias plantas, como chalets, ya que con una simple pulsación del botón del mando, pueden cerrarse todas las persianas del edificio, sin necesidad de irlas revisando una por una.
Otro ejemplo de persiana autobloncante es el que produce la empresa catalana Collbaix, comercializada bajo el nombre deMajestic 45. En ella, el sistema autoblocante impide que la ventana sea forzada al intentar subirla. Está compuesta por perfiles exclusivos, y el conjunto aparece reforzado por guías antipalanca. Collbaix también dispone de cajones de aluminio exclusivos, para un acabado seguro e impecable.
Al igual que el resto de puertas y persianas de esta firma, equipan tapones inox en los laterales, y motorizaciones adaptables a cualquier sistema actual de domótica.
Persianas antibalas
Por su parte la empresa barcelonesa, especializada en cerramientos, Puertas Mansergas comercializa, bajo las marcas 'Gran Seguridad Compact' y 'Gran Seguridad Supercompact' una gama de persianas motorizadas de aluminio para ventanas o puertas, de alta seguridad (el objetivo del producto es sustituir con ventaja las rejas complementarias en las ventanas y balcones de las plantas bajas), pero con un acabado estético que las hace asemejar a las persianas corrientes de plástico o madera. Su especial diseño permite fabricar puertas con los mismos elementos, con lo que se mantiene la unidad estética en el conjunto arquitectónico, siempre que las puertas no superen los 7,5 metros de anchura. Los acabados son en anodizado o lacado al horno, en diversos colores.
El diseño de las persianas Compact y Supercompact permite diámetros de enrollamiento muy reducidos, de algo más de 2 milímetros de diámetro por cada 20 milímetros de luz. Estas persianas están dotadas asimismo de un sistema de bloqueo sin cerradura, que impide que la persiana sea forzada desde el exterior. Las persianas están formadas por lamas de aluminio huecas, de 1,5 milímetros de espesor, con el mismo aspecto tanto vistas desde dentro como vistas desde fuera. Optativamente se pueden rellenar de poliuretano de alta densidad inyectado (entre 45 y 50 kilos el metro cúbico), lo que refuerza tanto su resistencia como su capacidad de aislamiento térmico y acústico. La opción Supercompact dispone, además, de elementos transversales de aluminio macizo y guías especiales antipalanca. Supercompact está especialmente recomendado allí donde se necesiten cerramientos resistentes a huracanes o vandalismo. Son resistentes a los proyectiles balísticos, lo que las hace especialmente adecuadas para joyerías y otros tipos de comercio con alto riesgo de atraco, para su uso en armarios de armeros o “habitaciones del pánico”.
En ambos modelos, las lamas se ensamblan en los extremos con patines de nilón para facilitar el deslizamiento silencioso de las guías laterales, que a su vez contienen juntas de deslizamiento y estanqueidad. Para que las persianas dispongan de algún punto de ventilación, se pueden incluir lamas troqueladas en su composición, según las necesidades. Los perfiles terminales incluyen refuerzo intermedio y alojan un burlete de estanqueidad.
Estas persianas están automatizadas mediante telemandos, temporizadores, anemómetors medidores de velocidad del viento (para prevenir huracanes), interruptores crepusculares (para que se pongan en funcionamiento en situaciones preprogramadas de incidencia de la luz solar) o por sistemas domóticos.