Edgetech y su Super Spacer en el ‘BaseCamp’ de Lyngby

La construcción modular en serie, los materiales de fachada reciclables de bajo coste, las energías renovables y las zonas verdes y de filtrado casi naturales de los edificios fueron las claves del éxito en este caso. Uno de los principales transformadores de vidrio de Escandinavia, Glaseksperten A/S, ha contribuido en gran manera a la ejecución del ambicioso concepto de construcción del ‘BaseCamp’ de Lyngby, gracias a su proceso de producción automatizada de las unidades de vidrio aislante (UVA), a la construcción de vidrio dependiente de su orientación en su instalación en la obra y al uso del sistema de espaciadores de borde caliente Super Spacer T-Spacer Premium Plus, de Edgetech Europe.

La nueva sede europea de Google en Londres contará con una pista de ‘running’ en su azotea, pero hasta dentro de 3 o 4 años, como mínimo, no podrá ser utilizada. En cambio, los residentes en ‘BaseCamp’ de Lyngby, construido en un terreno de 41.000 metros cuadrados, pudieron calzarse sus zapatillas para correr ya en agosto de 2020. En la azotea verde de este extenso complejo de residencias estudiantiles, construido al norte de Copenhague, se extiende un parque con un sistema de plantación biodiversa, zonas de jardinería urbana y un sendero de 800 metros de largo que puede utilizarse para caminar o trotar.

Desde el nivel del suelo, este sendero se sitúa seis pisos por encima del edificio, siguiendo de forma orgánica un recorrido por todo el contorno del complejo, rodeando en este proceso acogedores patios interiores y un centro comunitario circular. La disposición vertical de los paneles de las fachadas, en tres tonos diferentes de madera de roble, evocan los altos árboles de un bosque, al igual que la línea de ventanas, creando así una imagen de diálogo coherente de todo el complejo con la naturaleza circundante. El promotor del proyecto, ‘BaseCamp Student Nordics’, integrado en el ‘Europe-Wide BaseCamp’, quería que el municipio de Lyngby pudiera disfrutar de alguna manera del complejo y así entablar un diálogo sobre los aspectos sociales y medioambientales del mismo. De esta manera, la azotea se abre al público local para proporcionar áreas de reunión.

El tiempo de construcción para un proyecto de este tamaño ha resultado impresionante. Los 786 pisos cerca de la Universidad Tecnológica de Lyngby, incluyendo 639 para estudiantes y otros 48 para ancianos, se completaron en el espacio de dos años y medio. En un principio, no se prevaía que el edificio fuera tan espectacular, pero un aspecto distingue al ‘BaseCamp Student’ de Lyngby de muchos otros proyectos importantes: la ecología y la economía determinaron el concepto arquitectónico por igual.

Para hacer frente a los costos de esta construcción, estimados en unos 75 millones de euros, la empresa danesa Lars Gitz Architects diseñó un módulo trapezoidal que rota repetidamente en 180° y se apila a diferentes alturas para crear una estructura suavemente redondeada. La piel exterior también constituye un modelo de construcción rentable. El muro cortina ventilado está aislado con lana de roca y revestido con placas de roca basáltica volcánica prensada de Rockpanel. Con un peso de 8,4 kg por m², el extremadamente ligero material puede cortarse a medida en el lugar y fijarse simplemente a la subestructura.

Los paneles de las fachadas, con su aspecto de madera natural, se componen casi en su totalidad de roca volcánica natural y lana de roca reciclada y pueden reutilizarse repetidamente según una idea de economía circular. Esto hace que la fachada sea uno de los pilares del concepto de sostenibilidad necesarios para conseguir el certificado BREEAM Very Good (equivalente al certificado DGNB en plata). El tejado verde de módulos fotovoltaicos favorece el ahorro de energía y ejerce al tiempo de aislamiento térmico, proveedor de energía y de aire acondicionado natural. El agua de lluvia que se capta se devuelve al ciclo natural del agua a través de la evaporación, lo cual alivia la carga del sistema de alcantarillado y reduce la temperatura ambiente.

Las ventanas de aluminio con triple acristalamiento también forman parte de este concepto global. Como suele ocurrir en la arquitectura escandinava, los estudios del ‘BaseCamp’ y las zonas comunes están acristalados hasta el nivel del suelo para permitir que entre la mayor cantidad posible de luz del día en la habitación, incluso durante el invierno. El fabricante danés de vidrio aislante Glaseksperten suministró debidamente empaquetados al lugar de construcción 4.000 unidades de vidrio aislante en tamaños de hasta 4.011 x 1.127 mm, siguiendo un meticuloso plan de logística.

Debido a la forma orgánica del edificio, las estructuras de vidrio cambian según su orientación. En función de la entrada de calor y la cantidad de luz, se utilizaron vidrios de control solar, vidrios de aislamiento térmico o vidrios transparentes con diferentes revestimientos y espesores de vidrio. Glaseksperten optó por el Super Spacer T-Spacer Premium Plus de Edgetech Europe, en varios anchos, como sistema de espaciador de borde caliente. Jesper Hønning, gerente de ventas de la empresa vidriera, declaró: “Un número cada vez mayor de nuestros clientes desean instalar ventanas de bajo consumo. Utilizamos constantemente vidrios de aislamiento térmico bajo emisivos y vidrios de control solar combinados con espaciadores de borde caliente no metálicos para evitar los puentes térmicos y optimizar el coeficiente de transferencia de calor”.

En la sede de la empresa, en Hjørring, se dispone de una línea de vidrio aislante ultramoderna y automatizada para la producción de vidrios aislantes de hasta 3,2 x 6 metros. “El Super Spacer tiene una importancia clave para Glaseksperten en lo que respecta al suministro de productos de calidad. Ello también nos acredita como una empresa líder en términos económicos y ecológicos”, afirma Hønning. “La aplicación continua del espaciador, totalmente automatizada desde la bobina, ahorra tiempo y dinero y garantiza una calidad de producto de primera clase".

Por su parte, Joachim Stoss, director general de Edgetech Europe GmbH y vicepresidente de ventas internacionales de Quanex añade: “El norte de Europa es un pionero global en el campo de la protección climática y por lo tanto uno de los mercados en crecimiento para los productos de borde caliente. Por supuesto, estamos extremadamente orgullosos de que nuestro sistema Super Spacer haya sido instalado en otro proyecto insignia escandinavo”.