Vidresif en el Hotel Alàbriga, un nuevo establecimiento de lujo

Vidresif ha participado de forma activa en un nuevo proyecto en el que el vidrio ha sido uno de los grandes protagonistas. El Hotel Alàbriga, con más de 10.385 m², ha nacido como un innovador concepto que combina gastronomía, bienestar y cultura, en un marco único como es el de la playa de Sant Pol en Sant Feliu de Guíxols, en Girona.

Vidresif ha sido la empresa encargada de proporcionar todos los vidrios técnicos de grandes dimensiones de este espectacular complejo hotelero. Con su trabajo, la empresa ha conseguido reforzar la idea de conexión de los interiores con su entorno, conectando los espacios al aire libre como parte integral de las habitaciones. En un proyecto así, el vidrio fortalece la idea de transparencia y conexión con la naturaleza, creando un entorno atractivo y cómodo, con una iluminación natural óptima y unas vistas al mar inmejorables.

Además, todos los vidrios fabricados cumplen con las máximas exigencias para ofrecer soluciones avanzadas en vidrio estructural, con unos resultados que aseguran resistencia y baja emisividad. Se trata de un material absolutamente adecuado para los requisitos arquitectónicos de la obra.

Con este nuevo proyecto, Vidresif ha ampliado su trabajo y presencia en la provincia de Girona, con el fin de mostrar la calidad y el rigor de los profesionales de la demarcación. Cabe recordar que la empresa es uno de los habituales patrocinadores de los Premios de Arquitectura de las Comarcas de Girona, además de haber llevado a cabo numerosos proyectos en la provincia catalana.

El primer vistazo a la fachada del hotel no deja indiferente a nadie. Sus onduladas formas, presentes en casi cualquier rincón de la envolvente, evocan de forma irremediable al mar, tan cercano a la ubicación del establecimiento. Pero una vista más general nos hace entender que el Hotel Alàbriga es, en realidad, un gran barco a punta de surcar las aguas del mar Mediterráneo.

Ideado por DNA Barcelona Architects, el diseño contemporáneo de su fachada refleja el espíritu de innovación y su inspiración con la naturaleza para brindar un enfoque emocional al espacio: las formas de onda y los materiales definen la apariencia del edificio, con patrones característicos que se basan en el movimiento marítimo.

Si por fuera destaca, el interior tampoco se queda atrás. O lo que se cree que es interior, ya que con los grandes vidrios instalados en la fachada la sensación de estar siempre en contacto con la naturaleza es una constante en casi todas las habitaciones y compartimentos del hotel. Esta idea era especialmente importante por la ubicación de la obra, a escasos metros del mar. Poder ofrecer a los huéspedes la oportunidad de disfrutar de la influencia relajante del Mediterráneo se convirtió en una de las exigencias más básicas de todos los implicados en la renovación del establecimiento.

La iluminación natural era otra de estas exigencias, siempre con la idea de que los futuros visitantes pudieran experimentar el máximo bienestar en cualquier rincón del hotel. Fue un requerimiento en el que el trabajo de Vidresif, con su experiencia y sus vidrios de altas prestaciones, encajó como un guante. En conclusión, el diseño se basó en generar la máxima interacción entre el edificio y el entono.

Más allá de Vidresif, toda la obra está construida con materiales de primera calidad, buscando que la etiqueta de establecimiento de lujo no fuera únicamente a causa de los propios servicios del hotel. Se buscaba, y se consiguió, que el edificio también fuera, en todos los sentidos, de primer nivel. Por ello, el proyecto hotelero ha sido fabricado con materiales duraderos y fuertes para que los huéspedes puedan alojarse en sus instalaciones con el mayor confort posible, tanto para la construcción exterior como la interior.

Más allá del trabajo arquitectónico, el establecimiento destaca por ser un complejo hotelero con más de 10.385 m² construidos, en un proyecto en el que el lujo y naturaleza conviven en un mismo espacio. Con 29 habitaciones, todas ellas de gran amplitud (entre 80 y 140 m² con todas las comodidades), el inmueble dispone de aparcamiento de 40 plazas, salón chillout con piscina, restaurantes, Spa, boutique y una biblioteca con gran chimenea. Los usuarios pueden disponer, además, de jet privado, un yate de 20 metros de eslora para uso particular y un beach club 'exclusivo'.

El objetivo parece bastante evidente: crear un lugar donde el huésped obtenga las máximas comodidades a todos los niveles, permitiendo al usuario poder relajarse de manera casi instantánea. Más allá de las construcciones previas, el establecimiento también ha intentado dar mucha importancia a los servicios auxiliares disponibles.

Además, cada rincón del hotel está asociado con el mundo del arte y el diseño. Alàbriga aspira a convertirse en el centro de cultura de referencia de la zona, ofreciendo exposiciones de arte, presentaciones de nuevas colecciones de moda, lecturas teatrales, conciertos al aire libre y espectáculos de todo tipo. Un lugar en el que se puedan reunir artistas y aficionados al mundo del arte, aprovechando el marco incomparable en el que está ubicado el inmueble.

Por todas estas características y el lujo de sus instalaciones, el Hotel Alàbriga ha sido reconocido como uno de los mejores hoteles europeos. Buena muestra de ello son los dos galardones recibidos recientemente: ‘Mejor Luxury All Suite de Europa’ según los World Luxury Hotel Awards; y premio Prix Villégiature Awards 2018 al ‘Mejor servicio de Hotel en Europa’.

Ficha técnica

• Nombre del proyecto: Hotel Alàbriga.
• Ubicación: Sant Feliu de Guíxols (Girona)
• Estudio de arquitectura: DNA Barcelona Architects
• Propietario: ALÀBRIGA S’AGARÓ S.L
• Empresa Contratista: Alàbriga S’Agaró, S.L.
• Proyecto: 29 apartamentos, servicios, 40 plazas de parking, salón chillout y piscina.
• Fecha final de obra: 2017.
• Superficie: 10.385 m²
• Vidrio: Vidresif