El Congreso aprueba la Ley de Fomento del Alquiler
Estas iniciativas tienen una clara vocación social y tienen como objeto satisfacer las necesidades prioritarias de los ciudadanos, facilitando el acceso a una vivienda digna de los sectores de población con menos recursos.
España está a la cola de Europa en materia de alquiler: sólo el 17% de la población reside en una vivienda en régimen de alquiler, frente al 83% que lo hace en una vivienda en propiedad.
Por ello, la nueva política de vivienda apuesta por el alquiler frente a la compra de vivienda y dirige las ayudas del Plan Estatal, dotado con 2.421 M€, a quienes más lo necesitan.
El Ministerio de Fomento ha incrementado el número de beneficiarios de las ayudas al alquiler hasta los 133.000, con un importe que llegará hasta los 200 euros al mes. Estas ayudas se otorgarán de acuerdo con la renta de la unidad familiar o de convivencia, para que sean más justas y equitativas y para lograr que las mismas lleguen a quienes más lo necesitan, con independencia de su edad.
Las ayudas supondrán hasta el 40% de la renta de alquiler, cuyo importe sea inferior a los 600 euros, con independencia de quién sea el propietario y el régimen de calificación de la vivienda.
Con el objetivo de un mejor aprovechamiento de los recursos, la concesión de las ayudas al alquiler se hará de forma más equitativa teniendo en cuenta la renta de la unidad de convivencia en una vivienda.
Los beneficiarios de las ayudas al alquiler serán las personas físicas mayores de edad con un límite de ingresos inferior a 3 veces el IPREM, modulable según el número de miembros y composición de la unidad de convivencia, lo que asegura que accedan a la ayuda las familias más necesitadas.
El plan incluye un programa para fomentar un parque público de viviendas protegidas en alquiler y mantiene las ayudas concedidas de subsidiación de préstamos.