El PP se plantea recuperar la deducción por vivienda si gobierna en 2012
Redacción Ciberperfil03/02/2011
El PP promete restaurar en 2012 la desgravación en el IRPF para todos los que compren piso. Los expertos creen que podría desincentivar las ventas en 2011.
En un principio, la idea era aumentar la renta máxima para disfrutar de la desgravación (actualmente el tope son 24.107 euros). Pero finalmente ha ganado la opción de restituirla para todos. Así, el pasado domingo, en una entrevista con el diario El Mundo, Rajoy ratificó lo que esbozó en noviembre la secretaria general de su partido, María Dolores de Cospedal: si el PP llega a La Moncloa en 2012, lo hará de la mano de este incentivo fiscal inmobiliario.
Preguntado sobre si recuperaría la desgravación en el IRPF por la compra de la primera vivienda habitual, respondió: “No le quepa la más mínima duda, pero ni la más mínima duda”. Y a nadie se le escapa que los populares aventajan en más de 10 puntos porcentuales al PSOE en intención de voto. Son favoritos.
Con esta medida, Rajoy se ha enladrillado entre dos tierras inmobiliarias. Por un lado están los expertos que rechazan de plano la deducción, por calentar el mercado artificialmente y ser un lastre para el necesario ajuste del sector. En este grupo mayoritario se encuentran, además del Gobierno, el Fondo Monetario Internacional, OCDE, Funcas y algunos de los principales expertos inmobiliarios.
Entre los que apoyan la propuesta de Rajoy están, además del PP, el gobierno vasco (PSE y PP), Navarra (UPN), el Instituto de Práctica Empresarial (principal escuela de negocios inmobiliarios de España) y otros analistas del sector.
En los peores años de burbuja inmobiliaria el consenso de los analistas abogaba por eliminar la deducción de hasta 1.353 euros anuales de las cuotas hipotecarias soportadas. Contribuía a que los promotores inflaran los precios. Ahora, en pleno coma financiero del ladrillo, la inmensa mayoría de las voces autorizadas coincide en que el actual Gobierno ha elegido la ocasión menos idónea (2011) para mutilar el incentivo tributario a la compra de inmuebles.
¿Y 2012 ó 2013, sería buen momento para que Rajoy –en el hipotético caso de que llegara a presidente– universalizara de nuevo la desgravación? “No”, dice, categórico, José García Montalvo, catedrático de Economía de la Universitat Pompeu Fabra y uno de los mayores expertos en este campo. Añade: “No hay buen momento para poner la deducción".
"Al contrario de lo que propone, Rajoy tenía que haberla quitado cuando el PP gobernaba, en 2002 ó 2003. Habría contenido así parte de la burbuja, de la que su partido tuvo una porción de culpa. Además, el propio PP apostó en 1998 por reducir mucho la deducción”.
García Montalvo apostilla: “Es un poco absurdo que un partido que en principio es liberal –o debiera serlo– salga con este tipo de medidas. Es muy populista”. Además, el anuncio del PP “tendrá poco efecto sobre la demanda de compradores de vivienda, porque aún queda muchísimo tiempo para las elecciones de 2012”.
Estímulos contra el ‘stock’
No opina lo mismo Julio Gil, socio director de Horizone Consulting Inmobiliario. “Me parece que con una sobreoferta como la actual [un stock de más de 730.000 pisos nuevos sin vender en manos de los promotores] cualquier estímulo a la demanda es positivo y bienvenido.
Pero en el momento en que esta sobreoferta desaparezca habrá que retirar paulatinamente esos estímulos. Cuanto más cercano se hubiese hecho el anuncio a las elecciones, mejor habría sido para el mercado. Si el anuncio de Rajoy es firme, como parece, puede desincentivar que en 2011 se compren casas, en un momento en el que es importantísimo estimular a la demanda”, subraya Gil.
Entre ambas vertientes, Carlos Martínez Jarabo, coordinador general de la plataforma de servicios inmobiliarios Admentum, propone una alternativa original: “Sería mucho más lógico que Rajoy no ofreciera primar la propiedad, sino el alquiler, porque es la única figura que consigue cumplir con el mandato constitucional de derecho a una vivienda digna. Las modificaciones fiscales estatales deben ir dirigidas más al arrendamiento, sin que esto signifique que puntualmente no se pueda incentivar la compra fiscalmente”.
Fuente: Expansión
En un principio, la idea era aumentar la renta máxima para disfrutar de la desgravación (actualmente el tope son 24.107 euros). Pero finalmente ha ganado la opción de restituirla para todos. Así, el pasado domingo, en una entrevista con el diario El Mundo, Rajoy ratificó lo que esbozó en noviembre la secretaria general de su partido, María Dolores de Cospedal: si el PP llega a La Moncloa en 2012, lo hará de la mano de este incentivo fiscal inmobiliario.
Preguntado sobre si recuperaría la desgravación en el IRPF por la compra de la primera vivienda habitual, respondió: “No le quepa la más mínima duda, pero ni la más mínima duda”. Y a nadie se le escapa que los populares aventajan en más de 10 puntos porcentuales al PSOE en intención de voto. Son favoritos.
Con esta medida, Rajoy se ha enladrillado entre dos tierras inmobiliarias. Por un lado están los expertos que rechazan de plano la deducción, por calentar el mercado artificialmente y ser un lastre para el necesario ajuste del sector. En este grupo mayoritario se encuentran, además del Gobierno, el Fondo Monetario Internacional, OCDE, Funcas y algunos de los principales expertos inmobiliarios.
Entre los que apoyan la propuesta de Rajoy están, además del PP, el gobierno vasco (PSE y PP), Navarra (UPN), el Instituto de Práctica Empresarial (principal escuela de negocios inmobiliarios de España) y otros analistas del sector.
En los peores años de burbuja inmobiliaria el consenso de los analistas abogaba por eliminar la deducción de hasta 1.353 euros anuales de las cuotas hipotecarias soportadas. Contribuía a que los promotores inflaran los precios. Ahora, en pleno coma financiero del ladrillo, la inmensa mayoría de las voces autorizadas coincide en que el actual Gobierno ha elegido la ocasión menos idónea (2011) para mutilar el incentivo tributario a la compra de inmuebles.
¿Y 2012 ó 2013, sería buen momento para que Rajoy –en el hipotético caso de que llegara a presidente– universalizara de nuevo la desgravación? “No”, dice, categórico, José García Montalvo, catedrático de Economía de la Universitat Pompeu Fabra y uno de los mayores expertos en este campo. Añade: “No hay buen momento para poner la deducción".
"Al contrario de lo que propone, Rajoy tenía que haberla quitado cuando el PP gobernaba, en 2002 ó 2003. Habría contenido así parte de la burbuja, de la que su partido tuvo una porción de culpa. Además, el propio PP apostó en 1998 por reducir mucho la deducción”.
García Montalvo apostilla: “Es un poco absurdo que un partido que en principio es liberal –o debiera serlo– salga con este tipo de medidas. Es muy populista”. Además, el anuncio del PP “tendrá poco efecto sobre la demanda de compradores de vivienda, porque aún queda muchísimo tiempo para las elecciones de 2012”.
Estímulos contra el ‘stock’
No opina lo mismo Julio Gil, socio director de Horizone Consulting Inmobiliario. “Me parece que con una sobreoferta como la actual [un stock de más de 730.000 pisos nuevos sin vender en manos de los promotores] cualquier estímulo a la demanda es positivo y bienvenido.
Pero en el momento en que esta sobreoferta desaparezca habrá que retirar paulatinamente esos estímulos. Cuanto más cercano se hubiese hecho el anuncio a las elecciones, mejor habría sido para el mercado. Si el anuncio de Rajoy es firme, como parece, puede desincentivar que en 2011 se compren casas, en un momento en el que es importantísimo estimular a la demanda”, subraya Gil.
Entre ambas vertientes, Carlos Martínez Jarabo, coordinador general de la plataforma de servicios inmobiliarios Admentum, propone una alternativa original: “Sería mucho más lógico que Rajoy no ofreciera primar la propiedad, sino el alquiler, porque es la única figura que consigue cumplir con el mandato constitucional de derecho a una vivienda digna. Las modificaciones fiscales estatales deben ir dirigidas más al arrendamiento, sin que esto signifique que puntualmente no se pueda incentivar la compra fiscalmente”.
Fuente: Expansión
