12 edición de las jornadas "Visiones Arquitectónicas"
Este año, bajo el lema “Rehabilitar, el nuevo paradigma”, se centra en identificar las soluciones que la arquitectura y el ámbito de la rehabilitación aportan a la actual situación, para que arquitectos, ingenieros y otros expertos en edificación compartan experiencias y conocimientos sobre el tema.
La importancia de la normativa en construcción
Durante los últimos años se ha puesto de manifiesto cómo el sector de la construcción juega un papel fundamental en la lucha por el desarrollo sostenible. Albert Grau, ingeniero industrial y director de operaciones de Envolvalia, Empresa de Servicios Energéticos del grupo Rockwool, afirma que “los edificios juegan un papel muy importante, por lo que si somos capaces de realizar rehabilitaciones energéticas integrales -en lugar de quedarnos sólo en simples reparaciones estéticas- podremos mejorar el rendimiento de la envolvente, evitando la perdida de energía y contribuyendo al ahorro energético”.
Los edificios cuentan con normativas específicas respecto al consumo energético, como el CTE (Código Técnico de edificación) o la Certificación Energética de los Edificios (en vigor a partir de 2.013). Sin embargo, Grau afirma que “aunque parecen un gran paso, estas herramientas aún son insuficientes si las comparamos con el grado de implantación en que se encuentran en la Comunidad Económica Europea. Además, es necesario que las normativas vayan ligadas a su cumplimiento y por útiles que sean, no aportan nada si no se procede a un seguimiento y control de realización”.
El director de Envolvalia alude a otros países de Europa donde, por ley, es obligatorio ofrecer la calificación energética de los edificios, especialmente a la hora de su venta. “De este modo, los compradores tienen más información del edificio que van a adquirir y ya no eligen sólo por una razón estética o de impulso, sino también por su eficiencia energética. Por suerte, la población española comienza a tener una consciencia respecto al peso del consumo energético en su economía, por lo que esperamos que, en pocos años, se equipare el nivel de exigencia al de la normativa en la CEE”, comenta.