El aluminio permite ahorros energéticos de hasta el 25%
Según los informes que han llevado a cabo distintos estudios de arquitectura, el impacto del aluminio como material de construcción en la eficiencia energética es notable, sobre todo cuando este elemento se usa en todo tipo de cerramientos de aluminio, como pueden ser las puertas o las ventanas.
Según los datos obtenidos a través de distintas webs, apostar por esta clase de cerramientos puede llegar a suponer una reducción en la pérdida energética del 25%.
Las diferentes certificaciones energéticas están encaminadas a fomentar la sustitución de materiales poco eficientes por otros que ofrezcan un rendimiento superior, de manera que, en poco tiempo, se recupere la inversión y se comience a ahorrar en materia de costes. A la larga, la decisión de apostar por materiales como el aluminio es una alternativa económica.
Lógicamente, cuando se habla de un inmueble, las aberturas exteriores se convierten en el principal foco de pérdida de calor en invierno o fresco en verano. Por lo tanto, es en esta zona donde más hay que trabajar, puesto que está considerado como un punto crítico. Las carpinterías de aluminio con rotura de puente térmico son una solución eficaz, ya que permiten ahorrar hasta un 40% de la energía que se malgasta.
Es importante tener en cuenta también que los trabajos de carpintería metálica se han descubierto como cuidadosos con el planeta y el medio ambiente, permitiendo una reducción máxima de los desechos, un uso eficiente de los recursos naturales y una maximización de la vida útil de todos sus componentes.
En este sentido, no se puede olvidar que una de las principales características del aluminio como material de construcción es que se puede reciclar y reutilizar tantas veces como se quiera sin que ello suponga una pérdida de eficiencia o calidad.
La estimación en porcentaje de recuperación con estas ventanas de aluminio supera, según los mismos estudios, el 90%.