PVC, un aliado contra el fuego
El PVC es un material difícilmente inflamable con un buen comportamiento ante el fuego. Además, tiene la propiedad de autoextinguir las llamas en el proceso de combustión. Por ello, es altamente recomendable para la fabricación de elementos de la construcción como son las ventanas, ya que minimiza el riesgo de incendio.
El PVC está clasificado como no propagador de las llamas por compañías de seguros y organismos europeos y estadounidenses y, tiene la característica de no goteo durante su combustión, con lo que evita la propagación del incendio por caída de gota incendiada.
La temperatura de ignición del PVC es cercana a los 400 °C, superior a otros materiales utilizados en la fabricación de cerramientos como la madera.
Según la norma UNE 23727, el PVC rígido utilizado para la fabricación de perfiles de ventanas está clasificado en la categoría M1 (difícilmente inflamable). Solo la categoría M0 estaría por encima, clasificando materiales NO combustibles como vidrio, materiales cerámicos, yesos, etc. Con la nueva normativa UNE 13501, la Euroclase, se cataloga al PVC como B-s3-d0, equivalente a M1.
Máximas prestaciones
La filosofía empresarial del Grupo Veka ha sido siempre la de ofrecer productos de alta calidad unidos a una protección medioambiental consecuente. La formulación del PVC Veka, basado en resinas de policloruro de vinilo, incorpora una serie de aditivos como estabilizantes térmicos, UV, modificadores de impacto o dióxido de titanio, que le dotan de la resistencia y durabilidad necesaria para proporcionar a los sistemas de perfiles Veka, las máximas prestaciones.
Siendo el PVC un material 100% reciclable, el respeto medioambiental del mismo comienza ya desde su elaboración. Durante el proceso de fabricación del PVC y su posterior transformación en ventanas y puertas, sólo se emite vapor de agua a la atmósfera, no generando ningún tipo de emisión de contaminantes a ríos y aguas subterráneas.
Ahorro energético y reciclabilidad
El ahorro de energía que se genera durante su transformación es alto, si lo comparamos con la energía consumida por otros materiales para realizar aplicaciones similares. Al mismo tiempo, debido a su bajo peso, dicho ahorro energético es también muy evidente en su transporte, el cual requiere menos combustible que cuando se trasladan materiales alternativos.
Pero las ventajas del PVC no terminan cuando la aplicación agota su vida útil. Realizando ensayos cíclicos de envejecimiento acelerado, reciclado y transformación, se ha determinado que después de 7 ciclos el PVC reciclado comienza a reducir sus características mecánicas, pero lejos de llegar a ser un material inservible. En el caso de la ventana, si consideramos una vida útil media de 50 años, tiempo marcado por la obsolescencia del edificio y no por la ventana, la reutilización del PVC de esa unidad de cerramiento puede prestar servicio sin merma de prestaciones durante 350 años.
Para Veka, el compromiso voluntario de conservación medioambiental, se centra en dos aspectos: la adaptación de los procesos de fabricación para lograr una reducción del consumo de materias primas y energía en la fabricación, y la posterior reutilización a través de plantas de reciclaje con tecnología propia, aprovechando que la ventana de PVC es 100% reciclable.
Ya en 1993, Veka puso en marcha la instalación de reciclaje de ventanas de PVC más grande y moderna de Europa en Behringen/Turingia (Alemania), con capacidad de reciclar hasta 30 toneladas de ventanas de PVC por hora, convirtiéndose así en la primera empresa del sector con instalaciones propias para la recuperación integral y ecológica de la ventana de PVC en su etapa de post consumo. Posteriormente, dos nuevas plantas de reciclaje en Gran Bretaña y Francia, dan muestra de la conciencia ecológica de la compañía.
Sobre Veka
Veka es un grupo familiar especializado en el desarrollo, producción y comercialización de sistemas de perfiles de PVC para carpintería exterior. Con sede principal en Alemania, Veka está presente en tres continentes, tiene 16 plantas de fabricación en el mundo y opera en más de 80 mercados.
El grupo Veka lleva más de 40 años trabajando para crear sistemas de ventanas que mejoren la calidad de vida de las personas, y siempre con las mayores garantías y las mejores prestaciones. La filosofía empresarial de la compañía, combina la oferta de productos de alta calidad, con un cuidado servicio individualizado y una rigurosa política de protección medioambiental.
La filial para España y Portugal, Vekaplast Ibérica, está ubicada en Burgos. Creada en 1984, cuenta con más de 14.000 metros cuadrados de instalaciones. La fábrica está dotada con la más moderna tecnología alemana, y en ella se trabaja también en la investigación y desarrollo de nuevos productos. Con esta infraestructura, Veka desarrolla en el mercado ibérico sistemas de perfiles de PVC, que dan respuesta a las necesidades de carpintería de cualquier proyecto: sistemas practicables y deslizantes, sistemas de control solar tipo capialzado, mallorquinas y contraventanas, perfiles complementarios y placas.
La amplia gama de perfiles disponibles en multitud de colores, la elevada capacidad aislante, la durabilidad así como las máximas prestaciones que evitan la condensación y las filtraciones de agua y viento, están presentes en todos los sistemas Veka.