Grupo Velux ve con preocupación cómo evoluciona el clima interior de los edificios
18 de febrero de 2014
Esto se explica en un reportaje publicado por el Doctor Richard Hobbay, autor de ‘The Healing Sun: Sunlight and Health in the 21st Century’ (La salud en el siglo XXI a través de la luz natural) en la prestigiosa revista Hospital Infection. El autor afirma que nos vemos en la obligación de actuar para detener la propagación de infecciones y que una de las formas más eficaces para conseguirlo consiste en mejorar la calidad del clima interior de nuestros edificios.
El 30 por ciento de los edificios de hoy en día no ofrecen un clima interior saludable, y muchas de las enfermedades infecciosas que ponen en peligro la salud pública están relacionadas con un ambiente interior poco saludable. Un dato que resulta especialmente alarmante si tenemos en cuenta que pasamos alrededor del 90 por ciento de nuestro tiempo en espacios cerrados.
“Antes de que se desarrollaran los antibióticos, los altos niveles de ventilación y luz natural constituían una forma eficaz de prevenir la propagación de infecciones en los edificios. Hoy en día, se presta menos atención a la ventilación y la luz natural. Los códigos y reglamentos tienden a promover la construcción de edificios herméticos y con mucho aislamiento que funcionan mucho mejor que los antiguos edificios desde el punto de vista de la eficiencia energética, pero que al olvidarse de la luz y la ventilación natural estimulan la propagación de infecciones”, explica Richard Hobday. ”En el futuro, vamos a tener que enfocar nuestra atención en la creación y el mantenimiento de un clima saludable en los edificios, donde pasamos la mayor parte de nuestra vida. Necesitaremos ampliar el conocimiento que tenemos actualmente sobre esta materia", concluye.
Richard Hobday no es el único que se muestra cada vez más alarmado. El Grupo Velux, el mayor productor de ventanas de tejado, también ha estado observando con creciente preocupación cómo ha ido evolucionando el clima interior de los edificios durante las últimas décadas.
"En los últimos años los avances en la normativa de la construcción en España dirigidos a mejorar la eficiencia energética y el clima interior de los edificios han sido notables. Existe, sin embargo, el peligro de que la necesidad de ahorro energético centre las exigencias en el aislamiento y deje de lado el interés por crear unas condiciones interiores saludables. Si siguiéramos por este camino, los edificios del futuro tendrían un clima interior muy poco saludable. Es importante por eso que las nuevas normas de la construcción sean más exigentes en cuanto a los requisitos sobre la luz y la ventilación natural de los edificios, ” explica Pedro Poole, director general de Velux Spain.
Un clima interior empobrecido, con muy poca luz natural y aire fresco se asocia con una serie de consecuencias que afectan a nuestra salud y bienestar:
- El riesgo de enfermedades relacionadas con la humedad tales como el asma, las alergias, la tos y la congestión.
- El riesgo de “síndrome del edificio enfermo” causando enfermedades físicas
- El riesgo de “trastorno afectivo estacional” que causa síntomas relacionados con la depresión
- Una disminución en la salud mental y en el rendimiento
- Una disminución de la capacidad de aprender
- Una menor tasa de productividad.