Finaliza la vendimia en la D.O.Navarra
3 de noviembre de 2011
Hasta la fecha, se han vendimiado cerca de 72 millones de kilos de uva. Así finaliza la campaña en la D.O.Navarra, donde un 92% de uvas han sido tintas (Tempranillo, Garnacha, Merlot, Cabernet Sauvignon, Graciano, Mazuelo, Pinot Noir y Syrah) y un 8% blancas (Chardonnay, Viura, Malvasía, Sauvignon Blanc, Garnacha blanca y Moscatel de Grano Menudo).
En cuanto a la distribución por subzonas, la Ribera Alta ha aportado un 39% de la uva total, la Ribera Baja, un 31%, la Baja Montaña, un 16%, Tierra Estella, un 8% y Valdizarbe, un 8%.
Si comparamos esta producción con la del año pasado, se ha recogido un 16% menos de uva. Dos circunstancias han motivado este descenso: la reducción de las hectáreas de viñedo y la escasez de precipitaciones durante todo el período vegetativo. Este último hecho ha provocado que los racimos pesaran menos que en otras ocasiones y que los granos presentaran un menor contenido de agua y más azúcares y polifenoles. De esta manera, la concentración de color para los vinos tintos será superior y podrán contener una mayor intensidad aromática, numerosos matices en nariz y complejidad en boca.
En general, la climatología ha ayudado de manera importante al estado sanitario de la uva que es excelente. Tras unos calurosos y secos meses de primavera y verano, no se han registrado enfermedades importantes. Tan solo se han observado algunos focos aislados de oidio, principalmente en variedades como Mazuelo, Tempranillo y Chardonnay que no han tenido mayor relevancia.
Desde la D.O. prevén unos vinos de gran calidad que se podrían llegar a caracterizar por su “excelencia”. De los primeros blancos que ya está analizando el Panel Oficial de Cata de Vinos de la Comunidad Foral cabe resaltar su potencial aromático. Dada la gran madurez adquirida, se espera que los vinos rosados muestren una nariz y un color intenso, matizado por tonos violetas y cereza.
En cuanto a los tintos, que en este momento están acabando su proceso de elaboración, destaca sobre todo su alta intensidad colorante por lo que los enólogos tendrán un amplio abanico de posibilidades para dirigir su futuro como vinos jóvenes, crianzas o reservas.