Bodegas Ysios, camino de convertirse en la punta de lanza de La Rioja
18 de octubre de 2011
Cepas antiguas, parcelación de los viñedos, vendimia y despalillado manual, maderas nuevas muy seleccionadas (algunas suministradas en exclusiva desde los más recónditos bosques franceses) y un seguimiento tánico y diario del mosto, tanto en depósito como en barrica. Éstos son los axiomas de un exhaustivo y selectivo proceso de elaboración con el que Bodegas Ysios busca alcanzar los máximos estándares de calidad y excelencia para sus vinos. Y es que más allá de su diseño, obra del arquitecto valenciano Santiago Calatrava, la bodega riojana inició hace cuatro años una importante evolución cualitativa de sus vinos que culmina ahora con la obtención de las más altas calificaciones para Ysios Reserva 2006 e Ysios Edición Limitada 2007 en la Guía Peñin 2012, así como en la concesión de importantes premios a nivel internacional para el Reserva: oro en Concours Mondial Bruxelles 11, bronce en Decanter World Wine Awards 2011, plata en International Wine Challenge 2011 y en International Wine & Spirit Competition 2011.
Ysios Edición Limitada 2007, un ejemplo del cuidadoso proceso de elaboración que se lleva a cabo en la bodega riojana.
La bodega cuenta con 75 hectáreas de viñedo repartidas en ocho pequeñas parcelas, situadas en los términos de Laguardia y El Villar, con cepas de una media de 30 años de antigüedad (las más viejas tienen 80) y cada una de ellas con su particular terruño, orientación, altitud y microclima. Cada viñedo se trabaja por separado, con el fin de obtener su máxima expresión en caldos de diferentes matices que reflejan desde la potencia y concentración propias del clima atlántico, hasta la suavidad y carácter afrutado de los vinos mediterráneos, pasando por la estructura, elegancia y color y el excepcional color que imprimen al mosto las zonas continentales. Y, especialmente en las parcelas de 80 años, se hace un seguimiento detalladísimo ajustando los rendimientos a la baja para que la uva sea de mejor calidad.
En bodega, la uva recorre por gravedad la trayectoria hasta su siguiente destino: 36 depósitos troncocónicos, que en la Rioja Alavesa Ysios fue pionera en utilizar y desde donde Luis hace un seguimiento polifenólico exhaustivo, catando y evaluando diariamente la evolución del mosto y sus yemas. Y, aunque considera que “la crianza es un complemento”, ésta se cuida al extremo realizándola, al igual que en la elaboración, por separado. El coupage no lo realiza hasta el final sino que cada mosto, según sus características de terroir, se ensambla con maderas de diferentes tostados y procedencias “contamos con un pequeño porcentaje de roble húngaro que respetan el carácter frutado del vino, pero sobre todo usamos barricas de roble francés nuevas de tostado medio, para que no marquen tanto el vino”.