Más de 22.000 personas visitan las bodegas de la Ruta del Vino de Lleida
18 de abril de 2011
Un total de 22.128 personas visitaron las bodegas de la Ruta del Vino de Lleida durante el año 2010, según informó la presidenta de Turisme de Lleida, Montse Mínguez, en la Asamblea de la Ruta del Vino que se celebró el pasado día 11 de abril. El perfil del turista de esta ruta responde al de un visitante nacional residente en entornos urbanos, relativamente próximos a las zonas vitivinícolas, que buscan propuestas enoturísticas a partir de recomendaciones y sugerencias de amigos y familiares.
Durante la Asamblea de la Ruta del Vino se hizo balance de las actuaciones realizadas hasta ahora y además se definieron las futuras, centradas en impulsar el plan de comercialización del producto y en hacer crecer los miembros adheridos a la Ruta del Vino. El plan de actuación de este año prevé la promoción y comercialización de la ruta del vino, la sensibilización, la potenciación de la formación y profesionalización de los implicados en la ruta, la mejora de la gestión y funcionamiento de la misma, así como el impacto que le genera la actividad turística. Asimismo, se puso de manifiesto que los turistas que siguen las rutas del vino se desplazan en grupos pequeños y se decantan por el consumo del vino, la gastronomía y el patrimonio. En suma, una visita de este tipo se organiza como un viaje de fin de semana y puentes festivos, aunque también se realizan salidas de un solo día.
Este perfil de turista acostumbra a contratar su viaje a través de teléfono o internet y se desplaza, sobre todo, en coche. Además, consume servicios muy variados que no siempre están relacionados con la cultura del vino. Los usuarios de la ruta del vino tienen un nivel de gasto ligeramente superior al turista medio del país y optan por hoteles, preferentemente de cuatro estrellas. El alojamiento y la restauración conforman buena parte del presupuesto del viaje, dejando también una parte del gasto, notablemente inferior, en bodegas , enotecas, museos y oferta complementaria.
Las bodegas captan el interés de estos turistas que las identifican como aquellos lugares que les acercan al mundo del vino y donde además aprovechan para adquirir este producto. Igualmente, estos turistas muestran un nivel elevado de satisfacción, en cuanto al destino y a los diferentes servicios prestados. Además, cada vez, y en mayor medida, se incrementa el nivel de fidelidad. La gran mayoría de los usuarios manifiesta que repetirá y recomendará el viaje a su círculo de conocidos y amigos.