Reino Unido cree que eliminar la burocracia de la UE impulsará el sector del vino
La eliminación de la “burocracia innecesaria“ derivada de normativas heredadas de la Unión Europea (UE) dará un impulso valorado en 180 millones de libras (207 millones de euros) a la industria del vino del Reino Unido, ”abriendo al mercado nuevos productos y haciendo crecer la economía”.
Así lo indica el ministerio británico de Medioambiente (Defra) en un comunicado en el que señala que los productores e importadores de vino del país “quedarán liberados de la burocracia innecesaria” gracias a las reformas propuestas relativas a la legislación comunitaria sobre producción y marketing de vino.
Según esto, los cambios que se recogen en un proyecto de Ley sobre legislación retenida de la Unión Europea (UE) permitirán a los productores de vino “la libertad de escoger entre una amplia gama de vides, como variedades más resistentes a enfermedades y revocar las restricciones que actualmente impiden a la industria del vino producir nuevas mezclas”.
La nota del Ejecutivo destaca asimismo que los embotelladores podrán “convertir vino importado en vino espumoso“ y señala que los cambios propuestos incluirán, además, ”la eliminación de requisitos de empaquetado caros e incómodos”. Los fabricantes de vino del país quedarán liberados de tener que someterse a “procesos de solicitud laboriosos, previamente exigidos por las normas comunitarias”.
Las reformas son posibles en virtud de los poderes que contempla el citado proyecto de ley de la Legislación retenida de la Unión Europea (UE), empleados para eliminar restricciones a la economía británica al tiempo que se garantiza que no se comprometen altos estándares.
La ministra de Alimentos y Bebidas de este país, Thérèse Coffey, afirma en la nota que este país “cuenta con más de 800 viñedos que están prosperando y con cientos de millones de libras en concepto de comercio de vino que pasan por puertos británicos cada año. Pero durante demasiado tiempo nuestros productores han quedado retenidos por incómodas regulaciones heredadas de la UE. Les vamos a dar la libertad que merecen para prosperar”, lamenta.
Según dijo, las reformas impulsarán los negocios de los fabricantes de vino, “haciendo crecer la economía, creando empleos y respaldando una parte vital del sector de la alimentación y bebidas”.
También la ministra de Negocios y Comercio, Kemi Badenoch, apunta que “la burocracia innecesaria paraliza la innovación y el crecimiento. Ahora que hemos recuperado el control de nuestras leyes, podemos asegurar que trabajamos teniendo en cuenta los mejores intereses de nuestros negocios”, señala.
