Castilla-La Mancha produce el primer vino sin alcohol, para compensar la caída del consumo
1 de diciembre de 2010
España consume 17 litros de vino por persona y año. En general, se ingiere menos producto que en décadas pasadas, un cambio de hábitos que redunda en un descenso de los precios por parte de los productores que deben compensar, de alguna manera, esa baja demanda. Castilla-La Mancha es una de las comunidades donde se agrava este problema, ya que produce la mitad de los 40 millones de hectolitros de vino que se cosechan en España. La tendencia a la baja, en el consumo de esta bebida alcohólica se explica por dos factores. En primer lugar, la competencia de otras bebidas con menos graduación alcohólica como la cerveza y, en segundo lugar, los controles de alcoholemia. Como revulsivo a esta situación, el Instituto de la Vid y del Vino de Castilla-La Mancha (Ivicam) ha logrado producir un vino sin alcohol. Una innovación en un mercado donde cohabitan caldos con más de nueve grados de alcohol. Fuentes de este instituto han aclarado que la nueva bebida no es zumo de uva o mosto. Desde el centro tecnológico aclaran que el zumo de uva consiste en uva exprimida que produce un zumo de una fruta y el vino sin alcohol es un caldo al que se le elimina el alcohol, conservando todos los componentes del vino. Así pues, se reconstituyen las partes del vino más volátiles que el alcohol, que se suprime, para a posteriori captar los olores por un lado y los sabores por otro.