Los Premios Envero buscan 1.000 catadore
El sábado 1 de junio será la fecha de celebración de la 22 edición del concurso Premios Envero, en la cual 1.000 personas, desde aficionados o consumidores de vino a profesionales del sector, tendrán la oportunidad de elegir a los mejores vinos de la DO Ribera del Duero.
Este año además con una gran novedad: todos los participantes deberán llevar su teléfono móvil para emitir la puntuación a través de un código QR o formulario web. Un sistema inédito que se estrena en este popular certamen.
El Ayuntamiento de Aranda, organizador del concurso, ha abierto el plazo de inscripción para los catadores, que deberán entrar en el enlace premiosenvero.arandadeduero.es para reservar cuanto antes su plaza en esta demandada cata. De hecho, el año pasado se cubrieron las 1.000 vacantes en tan sólo… cinco días.
En esta edición se ha apostado fuertemente por las nuevas tecnologías, creando un sistema de votación inédito en este tipo de concursos multitudinarios. Es una actualización acorde con la innovación que se está implantando en todos los ámbitos de la sociedad y que va a permitir una mayor agilidad en el sistema de contar las puntuaciones.
La concejala de Promoción, Celia Bombín, junto a David Lobo, creador de la aplicación que se usará en el recuento.
Los 1.000 catadores deberán llevar su móvil con conexión a internet propia; aunque van a seguir utilizando las tradicionales fichas de cartón donde reflejarán las puntuaciones. A continuación, deberán trasladarlas a un formulario web al que podrán acceder leyendo un código QR o a través de una URL que se facilitará para los que no dispongan de esta app.
El sistema es mucho más riguroso y va a exigir más responsabilidad y solidaridad a los catadores que se apunten. Será exclusivamente el número de DNI con el que se inscriban el que les permita acceder a este procedimiento de votación, por lo que si alguien causa baja se ruega que se notifique a la organización para poder disponer de su plaza. Además, no podrán modificar el localizador que se les otorgará en el momento de la inscripción. Pero también va a reducir al máximo la posibilidad de errores humanos al contar automáticamente todas las puntuaciones que cada catador introduzca.