LA UCM estudia qué partes del cerebro se activan al beber vino
La Universidad de Castilla-La Mancha (UCLM) ha tenido una fuerte presencia una edición más en la Feria Nacional de Vino, Fenavin 2019, pues además de dar a conocer a los bodegueros su oferta científico-tecnológica y de formación en el sector de la viticultura en su estand, y presentar el nuevo Grado en Enología; ha venido desarrollando diferentes charlas técnicas sobre innovación en el mundo del vino y un interesante taller sobre Neuromarketing del vino, durante los tres días que ha durado la feria.
A lo largo de toda la feria han estado presentes Ángel Millán y Marta Retamosa, ambos profesores del Área de Marketing de la Facultad de Derecho y Ciencias Sociales de Ciudad Real; Carlota Lorenzo y Miguel Ángel Gómez, profesores del Área de Marketing del Grupo de investigación Marketic de la Facultad de Ciencias Económicas y Empresariales de Albacete; y Pedro Gómez, profesor en el Laboratorio de Interacción con el Usuario e Ingeniería del Software del Instituto de Investigación de Informática de Albacete.
En él, los ponentes han tratado de descubrir qué sensaciones, emociones y activaciones se generan en el cerebro a la hora de percibir un vino, mediante una cata con cascos que miden las respuestas fisiológicas de los asistentes. Algo similar a lo que hacen los aparatos de electroencefalograma, que miden la actividad eléctrica al cerebro.
“Pensamos que era una buena idea medirlo cuando una persona está desarrollando un proceso de cata ya que, se activan muchas sensaciones, independientemente de que esta lo plasme o no en un papel”, señalaba Miguel Ángel Gómez, explicando que, con este experimento se quiere estudiar y analizar la actividad del cerebro durante todas las fases del proceso de percepción, es decir, si hay o no diferencias mientras la persona ve el vino, lo huele o lo está degustando. “Queremos saber qué le transmite a una persona un vino cualquiera, de forma aleatoria, si le gusta, si le da placer… Sin que ella nos diga nada verbalmente, sino gracias a su cerebro”, explicaba.
De este modo, se ha querido responder a cuestiones relativas a cómo las nuevas tecnologías y avances en neurociencia han introducido nuevas herramientas y métodos para conocer a los clientes; las emociones y reacciones a productos y marcas se generan en nuestro cerebro ante las experiencias con los productos; ¿qué pasa cuando catamos un vino?; o ¿qué ocurre en nuestro cerebro al hacerlo?