Estudios de garnacha y cariñena para proseguir la zonificación
Técnicos del Parque Tecnológico del Vino (Vitec) y enólogos y elaboradores de la DO Montsant participaron en una cata de 19 microvinificaciones de garnacha y cariñena, una cata que se enmarca en el estudio de estas variedades y que está ligada al proyecto de zonificación de esta denominación de origen.
El objetivo de este estudio, que recae en manos de Vitec, es seguir trabajando en la zonificación de la DO Montsant en base a las características del vino. Así pues, y partiendo de la delimitación de la DO en las 6 zonas que estipulaba un primer estudio realizado por Incavi, se quiere conocer cómo las diferencias climáticas y de suelos influyen en los vinos, para poder así establecer un vínculo entre el tipo de vino y las diferentes zonas, cada una de ellas con características propias.
Pilar Just, presidenta de la DO Montsant, afirmó que “el conocimiento y la investigación son una de nuestras prioridades”. “Si somos capaces de mejorar el conocimiento que tenemos de nuestro territorio y nuestras viñas, esto nos servirá para el día a día en el campo y en la bodega, pero también a la hora de trasladar a profesionales y consumidores quienes somos de manera muy bien fundamentada”, añadió la presidenta.
La elección de proseguir el estudio en base a las características de los vinos con garnacha y cariñena se debe a que estas son las variedades más cultivadas en la DO Montsant y, en consecuencia, las que predominan en los vinos bajo su amparo. De hecho, el 94% de la vid cultivada en Montsant corresponde a variedades tintas, donde la garnacha supone un 34% y la cariñena un 30%. Este estudio centrado en estas variedades se inició en 2015, y se llevará a cabo durante los próximos 3 años.
El procedimiento seguido en esta fase del estudio ha consistido en la selección de unas viñas en plena producción y plantadas según los sistemas de conducción, densidad y portainjerto predominantes. Estas viñas se encuentran en parcelas que, por climatología y suelos, son representativas de cada una de las 6 zonas definidas.
A partir de esta selección, pues, se hará el seguimiento y las vinificaciones de cada vid, vinificaciones que se someterán a análisis de laboratorio y, como se demostró el pasado 1 de febrero, a análisis sensoriales por parte de expertos. De este modo, el objetivo final de este estudio es poder establecer un vínculo entre el vino y el territorio, afianzar su identidad y explotar su potencial vitícola.