Las particularidades del transporte a temperatura controlada
El transporte a temperatura controlada tiene una serie de particularidades que lo hacen especial y, por ello, debe cumplir con ciertos requerimientos. Independientemente de lo que se transporte (alimentos, medicamentos, etc.), el factor más importante es el control de la temperatura puesto que garantiza mantener cualquier producto en buenas condiciones durante todo el proceso logístico. Desde Logística Integrada hemos hablado con algunos representantes del sector para conocer un poco más sobre la logística del frío.
Entrevistas
La opinión de DHL Supply Chain
¿Cuáles son las particularidades del transporte a temperatura controlada y la logística del frío?
La logística del frío tiene varios rangos y afecta, principalmente, a producto alimentario (fresco, refrigerado o ultracongelado) y a producto médico-farmacéutico de distintas criticidades. Ha de garantizar que la cadena de frío, a veces a temperaturas muy por debajo de 0º, no se rompa. El correcto almacenaje, el tiempo de recorrido en la distribución -léase como optimización y organización de flotas- y lograr que no se comprometa la temperatura desde el almacén hasta la entrega final son aspectos fundamentales.
Desde su compañía, ¿qué ofrecen para hacer frente a las necesidades de un servicio tan ‘especial’?
DHL tiene la masa crítica, los modelos, los sistemas, los recursos y las tecnologías para hacer frente a un servicio tan complejo. Además de zonas específicas a temperatura controlada en nuestros almacenes, garantizamos el traslado tanto “en frío” (entre 2º y 8°C) como a “temperatura controlada” (por debajo de 25°C) e incluso temperaturas muy por debajo de 0º para productos ultracongelados, y utilizamos sistemas de predicción de la demanda bajo sofisticados algoritmos de inteligencia artificial; modelos tecnológicos que nos permiten ajustar las flotas para dar respuesta a los pedidos en el tiempo adecuado y de la manera más eficiente y sostenible.
¿A qué retos se enfrenta este tipo de logística? ¿Qué pide el mercado?
En el año 2025 se prevé que haya 8.000 millones de personas en el mundo. Una población con esperanza de vida creciente y de la que el 58% se concentrará en los centros urbanos. Esto provocará que crezca exponencialmente la demanda de alimentos y medicamentos, productos de parafarmacia, material médico de distinta criticidad y alta tecnología para el sector de la salud.
Es necesario así hacer frente a factores tan diversos como el almacenamiento y distribución de productos que requieren temperaturas controladas y entornos esterilizados; la gestión de paquetes combinados de diferentes tipos de productos; o la posibilidad de gestionar servicios para aprovisionamiento urgente de piezas críticas en aparatología médica. El modelo de distribución exige el férreo control de la cadena de suministro de principio a fin y una enorme capacidad de adaptación; ese es el principal reto a superar.