Diálogos en Circular de SIGAUS. Entrevista a Lucía Íñigo Paarmann, experta en el Comité de Programa del Consejo Europeo de Innovación de Horizonte Europa
Desde la primera revolución industrial nuestra economía ha sido esencialmente lineal: un camino sólo de ida, en el que extraemos los recursos de la naturaleza, los transformamos, los consumimos y acaban convertidos en residuos. Hoy, asistimos a la ‘cuarta revolución industrial’, impulsada por la digitalización y la innovación, pero también por el gran potencial de los nuevos modelos circulares, donde los residuos se convierten en materias primas listas para ser utilizadas en nuevos procesos productivos. Es, sin duda, el momento de la Economía Circular y de la Industria 4.0, que traerán consigo nuevas formas de producir que permitan conservar y recuperar el valor económico de los recursos antes de que acaben en los vertederos o sean eliminados de otra forma. Precisamente para hablar del futuro en el sector industrial, SIGAUS invita a expertos de estos ámbitos con el objetivo de analizar las posibilidades de las tecnologías emergentes, los nuevos nichos de mercado y la oportunidad que esto supone para el sector en términos de eficiencia, ahorro de costes y reducción de sus impactos ambientales.
Ingeniera de Caminos por la Universidad Politécnica de Madrid (UPM), Lucía Íñigo ha ocupado diversos cargos como Investigadora y Coordinadora de Proyectos en el Departamento de I+D+i de empresas privadas vinculadas a la investigación de procesos y materiales. En el CDTI (Centro para el Desarrollo Tecnológico Industrial dependiente del Ministerio de Ciencia e Innovación) ha sido analista de estrategia para el Programa Marco de Investigación de la UE y Representante española en el Comité de Gestión del Programa de Nanotecnología, Materiales Avanzados, Biotecnología y Procesamiento (NMBP) del Programa de Investigación europeo Horizonte 2020. Desde 2021 es experta en el Comité de Gestión del Consejo Europeo de Innovación del actual programa Horizonte Europa y Punto Nacional de Contacto para el Acelerador de este Consejo.
La Economía Circular es un concepto que está de máxima actualidad y, según los expertos, la clave de la recuperación a la que nos enfrentamos ahora para superar las consecuencias de la pandemia, pero ¿cuáles cree que son las claves para impulsar de forma real desde el sector industrial y productivo esta circularidad y cuáles las barreras con las que se encuentran las empresas y las administraciones para lograrlo?
A nivel de políticas europeas, el Pacto Verde y los fondos de recuperación Next Generation EU han ligado la recuperación económica a la sostenibilidad. Esto supone un importante impulso a la financiación de la transformación industrial que se construye sobre iniciativas de investigación y desarrollo promovidas por el propio sector industrial y productivo como ha sido la colaboración público-privada a través de SPIRE en Horizonte 2020 o la actual Process 4 Planet en Horizonte Europa. Las ‘hojas de ruta’ de estas iniciativas destacan como principales barreras, además de la complejidad técnica sobre la que llevan tiempo trabajando, la necesidad de financiación para abordar los cambios necesarios y algunas barreras regulatorias sobre las que se necesita trabajar en paralelo.
Se dice que estamos ante la revolución industrial 4.0 y en la era de la digitalización. ¿Cree que las empresas españolas están preparadas para afrontar esta revolución? ¿Qué retos plantea para ellas la transformación digital?
El tejido empresarial español cuenta con la ventaja de la infraestructura de comunicaciones ya existente y con unas coberturas de banda ancha muy amplia. Además, se detecta mucha concienciación sobre la necesidad de cambio y las ventajas que éste puede aportar. Aun así, el reto es tanto colectivo como individual: cómo conseguir que esta industria 4.0 llegue a todo el tejido industrial y cómo cada empresa lo afronta desde su realidad y posibilidades actuales. El papel tanto de la política industrial como de las asociaciones industriales es clave en ambos casos.
¿Qué posición ocupa la prevención y la gestión de residuos a la hora de avanzar hacia una verdadera cultura de la innovación? ¿Qué importancia tiene en este sentido la labor de entidades gestoras y recuperadoras de residuos como SIGAUS?
La prevención y gestión de residuos es uno de los eslabones clave de la Economía Circular y, además, uno de los sectores representados en las iniciativas de Materias Primas de la Unión Europea. Es, sin duda, un sector activo en los proyectos de investigación e innovación que se han financiado en Horizonte 2020 y que tienen ya nuevas oportunidades de financiación en Horizonte Europa, tanto para grandes proyectos colaborativos en temas como la Simbiosis Industrial, como para proyectos individuales dirigidos a nuevas soluciones innovadoras basadas en tecnología. Entidades como SIGAUS pueden tener un papel importante en dos vertientes: por un lado, identificando necesidades de nuevas soluciones de mejora de su actividad y por otro, participando en el desarrollo y validación de estas soluciones.
El pasado mes de marzo se dio el pistoletazo de salida oficial al nuevo Consejo Europeo de Innovación (European Innovation Council, EIC), una de las principales novedades del Programa Horizonte Europa y quizá la iniciativa de innovación más ambiciosa hasta el momento en Europa, con un presupuesto de 10.000 millones de euros para el periodo 2021-2027. ¿Qué va a suponer esto para España en materia de avance de estos aspectos y cómo impulsará la I+D+i en nuestro país?
El EIC es la ‘ventanilla única’ de Horizonte Europa para todo tipo de innovadores, desde particulares hasta universidades, organizaciones de investigación y empresas (PYME, incluidas start-up y, en casos excepcionales, pequeñas mid-caps). Junto con otras vertientes de Horizonte Europa, estimula todas las formas de innovación, desde la innovación incremental hasta la innovación revolucionaria y disruptiva, con el foco puesto en la innovación creadora de mercado. El EIC, a través de sus instrumentos Explorador o Pathfinder y Acelerador, tiene como objetivo identificar, desarrollar e implementar innovaciones de alto riesgo de todo tipo, cubriendo toda la cadena de innovación y brindando apoyo a proyectos individuales (principalmente para PYME) y consorcios multidisciplinares que trabajen en ideas aún lejanas a la comercialización. Se busca la innovación abierta, pero, en línea con las prioridades políticas de la Unión Europea, se priorizan determinados temas para los que hay una reserva presupuestaria y que actualmente incluyen las innovaciones que contribuyan a los objetivos del Pacto Verde y tecnologías estratégicas como las ligadas a la Digitalización y la Salud. Esto supone una gran oportunidad de financiación del ecosistema español, que ya supo aprovechar muy bien la financiación del piloto del EIC que se hizo al final de Horizonte 2020 y con el que trabajamos codo a codo desde CDTI para maximizar sus posibilidades de éxito en Horizonte Europa, consiguiendo así ayudas para que tecnología desarrollada en España se ponga en el mercado y al servicio de los principales retos europeos.