En el Horizonte 2030 fijado por la Unión Europea todos los envases de plástico serán reciclables o reutilizables
Knauf participa en un proyecto de Ainia que estudiará la reciclabilidad de los envases plásticos
Redacción Interempresas18/03/2019
La compañía de envases, embalajes y piezas técnicas Knauf Industries se ha unido al proyecto ‘Envases Plásticos y Economía Circular’, que busca reforzar las estrategias empresariales para avanzar hacia la economía circular y el horizonte H2030. La iniciativa, impulsada por el centro tecnológico Ainia, se basa en un estudio estratégico que, durante los próximos meses, analizará la reciclabilidad de los envases plásticos y las últimas tendencias en biomateriales como plásticos biodegradables, compostables y biobasados.
De entre los aspectos que analizará el estudio, destacan las barreras y soluciones tecnológicas actuales para el reciclado, las potenciales aplicaciones de los biomateriales, la seguridad de estos envases en contacto con alimentos y la gestión de residuos. Todo ello con la vista puesta en el Horizonte 2030 fijado por la Unión Europea para que, antes de ese año, todos los envases de plástico sean reciclables o reutilizables y que, por lo tanto, disminuya el uso de plásticos de usar y tirar.
Como especialista en la transformación de poliestireno expandido (EPS), Knauf participa en el proyecto junto a una veintena de compañías dentro de su compromiso con el uso responsable y ecosostenible de los envases plásticos tanto a nivel de fabricación como de consumo y reciclado.
“La innovación debe ser la punta de lanza del sector packaging para abordar los retos que tenemos por delante; por eso queremos ser partícipes de proyectos como el que ha impulsado Ainia”, afirma Víctor Borrás, responsable de marketing de Knauf Industries. “En Knauf dedicamos buena parte de nuestros esfuerzos en perfeccionar no solo el reciclado de los envases, sino también su proceso de producción, a fin de diseñar las aplicaciones que respondan a las necesidades del mercado de una forma circular, eficiente y ecosostenible".
El EPS, también conocido como Airpop, es totalmente reciclable a través de distintos procesos que permiten la reutilización del material para construcción, aislamientos térmicos, mobiliario urbano, abono, mejora de suelos, relleno para peluches y cojines, bolígrafos, nuevos envases EPS y la generación de energía mediante combustión, entre otros.
Por lo tanto, su uso se extiende a sectores como la construcción (por sus propiedades aislantes a nivel térmico y acústico), alimentación (al conservar la cadena de frío, garantizar la higiene de la comida y proteger los alimentos de golpes durante su transporte), industria (por su capacidad para absorber impactos y resistir fuerzas de compresión, flexión, tracción y esfuerzo cortante) y logística (su ligereza permite ahorrar combustible, su versatilidad hace que se adapte al formato de palé europeo y su solidez amortigua golpes y vibraciones a fin de garantizar la integridad de los productos delicados).
La posibilidad de reciclar mecánicamente este plástico permite ahorrar costes al incorporar el reciclado en el proceso productivo mediante el triturado de las mermas y del producto limpio. Además, gracias a su capacidad de expansión, el EPS está compuesto en un 98% por aire y solo en un 2% por plástico.