Obtener el máximo rendimiento de la viruta
16 de septiembre de 2011
En un proyecto reciente llevado a cabo por Ehaff, el cliente mecanizaba en 4 centros de mecanizado dos tipos de materiales diferentes, bronce y acero (indistintamente), cuya viruta generada se recogía en un contenedor a la salida de la máquina.
El reto
El reto requería transportar automáticamente toda la viruta de las 4 máquinas hasta un punto concreto de la nave, en el que se debería separar el bronce del acero para más tarde depositar cada material en un contenedor diferente.
La solución
La solución propuesta requería el bombeo de la viruta de cada máquina mediante una estación de bombeo hasta un filtro laminar, aprovechando para ello la taladrina de refrigeración como elemento vehicular. En un primer paso, el filtro separa la viruta de la taladrina. Después, filtra las partículas más finas retornando totalmente limpia a cada uno de los tornos. El filtro se encarga de forma automática del mantenimiento constante de la concentración del líquido, de la extracción de los aceites extraños (hidráulicos, de guías, etc.) que se pueden encontrar en la superficie de la taladrina y de mantener la taladrina en continuo movimiento (aunque no haya producción) evitando la generación de microorganismos.
La viruta de acero-bronce separada en el filtro, pasa a una máquina centrifugadora para extraer la mayor parte de la emulsión, dejándola con una humedad máxima de 1,5%. A continuación, pasa a un separador magnético de doble efecto a través de un vibrante, en el que se consigue separar entre un 80-90% de la viruta de bronce de la de acero.
Resultados
Los resultados obtenidos fueron los siguientes:
- Viruta de bronce puro y seco que el cliente puede volver a fundir o vender obteniendo el máximo beneficio.
- Viruta de acero seca y por tanto transportable, que el cliente puede vender evitando cualquier penalización en la gestión de residuos
- Mayor vida de la emulsión, con el consiguiente ahorro en la compra y en la gestión de la taladrina agotada.
- Eliminación de pérdidas de tiempo de personal en:
- el transporte de los contenedores a la salida de los tornos
- la mezcla manual de taladrina, al realizarlo automáticamente el filtro
- limpieza del entorno de trabajo
Cerrando el círculo (triturado y briquetado de viruta)
Otras dos soluciones muy interesantes en la gestión de viruta son el triturado y briquetado de viruta.
El proceso de triturado es muy útil cuando se desea reducir el espacio ocupado por una viruta voluminosa o cuando se quiere transportar la viruta por bombeo o centrifugarla. En ambos casos, el tamaño de la viruta debe ser reducido.
El briquetado por su parte, se puede considerar el último proceso de la viruta en el que obtenemos briquetas o lingotes de alta densidad que optimizan el transporte del material por estar compactado y con baja humedad. Las briquetas son apreciadas por los fundidores por su calidad.