La ‘Crida del Metall’, 4 meses después
15 de junio de 2009
Antoni Marsal, presidente de la Unió Metal·lúrgica de Catalunya y la Unió Patronal Metal·lúrgica, acompañado de Estanislau Grau, presidente de la patronal del metal de Lleida Femel, Josep Sans, presidente de Apemta, Associació Provincial d’empresaris del Metall de Tarragona, y Jordi de Grau, en representación de Feg Metall, Federació Patronal Metal·lúrgica de Girona, compareció ante los medios para presentar el panorama actual del sector del metal, los resultados de una segunda encuesta efectuada a más de un millar de empresas y a ratificar sus peticiones de ayuda a las Administraciones Públicas.
Panorama poco halagüeño
El año 2009 ha empezado como se esperaba para el sector del metal, con un empeoramiento de la situación experimentada a partir del cuarto trimestre de 2008, durante el cual el 78,5% de los trabajadores afectados por un expediente de regulación de empleo en suspensión de contrato, ERE, provenían del sector del metal, fundamentalmente de la automoción. Durante este primer trimestre de 2009 la producción del sector del metal a escala estatal ha caído un 26,5%, mientras que en Cataluña se han perdido en lo que se lleva de año 24.177 puestos de trabajo, entre asalariados y autónomos. Además, se calcula que las inversiones en el metal en Cataluña caerán un 17,8%. Marsal aportó dos datos más, también poco halagüeños: los ERE del primer trimestre de 2009 se han multiplicado por 20 en relación al mismo periodo del 2008 y hasta 102 compañías del metal no han realizado incrementos salariales en el total de la empresa frente a las 10 que utilizaron esta inaplicación de la cláusula salarial en 2008. Asimismo, de 425 empresas que durante el primer trimestre de 2008 presentaron concurso de acreedores se ha pasado a 1.558 en los primeros meses de 2009, mientras que se han constituido un 45% menos de empresas y se han disuelto un 33% más.
La situación es especialmente delicada en un sector que supone directa e indirectamente cerca del 25% del PIB de Cataluña, comunidad que concentra el 22% del metal español. Así, el metal catalán, con 20.000 empresas y 300.000 trabajadores, aproximadamente, genera el 47% de las importaciones de Cataluña y es responsable de casi el 40% de las inversiones en innovación tecnológica de esta comunidad.
Medidas conseguidas por la ‘Crida’
Cuatro meses después de la celebración de la ‘Crida del Metall Català’, algunas de las medidas propuestas por el empresariado se están llevando a cabo o están en proceso de hacerlo.
De las medidas laborales conseguidas, destaca la mayor agilidad en la resolución de los expedientes de regulación de empleo, “especialmente en los que existe un acuerdo con el comité de empresa”, recalcó Antoni Marsal. Se ha conseguido también la medida llamada ‘contador a cero’ para trabajadores afectados por un ERO, con el que se les computa el paro, en el caso de rescisión posterior de contratos, el tiempo que han estado en suspensión. Se ha obtenido también una dotación especial de 4 millones de euros para un plan de formación de trabajadores en situación de expediente de suspensión y se han podido reducir las cuotas de la Seguridad Social en un 50% a afectados por expedientes de 4 meses.
En cuanto a las medidas financieras, Marsal destacó la creación de líneas de garantías de avales públicos para las empresas y el compromiso adquirido por el Gobierno de compartir riesgo con las compañías aseguradoras de riesgo. Otro de los avances más importantes ha sido también la presentación en el Congreso de los Diputados por parte del grupo parlamentario de Convergència i Unió de una propuesta de reforma de la Ley de Morosidad, que se prevé sea aprobada a principios de 2010. Asimismo, la inyección de recursos públicos a los ayuntamientos, si bien realizada con la idea de reducir la morosidad en el pago, ha servido también para que muchas ciudades hayan realizado plantes de adecuación. La Administración está trabajando también en conseguir un mejor funcionamiento en la aplicación de la compensación de impuestos y en el estímulo de la demanda, como las ayudas en la compra de vehículos.
El llamamiento del metal catalán
Un millar de empresarios catalanes del sector del metal se reunieron el 10 de febrero en el Palau de Congressos de Barcelona para manifestar su preocupación ante la profunda crisis en que se halla el sector y pedir ayuda a la Administración para que aplicara medidas urgentes contra la crisis. Para dejar constancia de este acto, un total de 54 empresarios pertenecientes al sector del metal catalán firmaron un manifiesto para presentarlo a la Administración donde se recogían todas las propuestas para salvar su situación. Como rezaba el manifiesto: “Nosotros no somos culpables de la crisis actual, y en cambio, somos las grandes víctimas de sus consecuencias. Por eso, porque estamos seguros de que el metal tiene futuro y porque pensamos que Cataluña ha de apostar por ese futuro, hacemos este acto reivindicativo: la ‘Crida del Metall’ catalán”.
2ª encuesta de la ‘Crida del Metall’
Después de una primera encuesta, realizada en febrero, la UMC decidió hacer otra para conocer la situación actual del sector desde los ojos de los empresarios y comparar los resultados. Esta segunda encuesta fue realizada a 1.228 empresas del metal, algunas más que en primer caso, entre el 12 de mayo y el 3 de junio de este año.
Sobre los principales problemas que sufren actualmente las empresas encuestadas, el 86,2% acusa una bajada de la demanda. Por orden de importancia le siguen el aumento de la morosidad (52,4%), las dificultades de tesorería (47,6%), la falta de flexibilidad laboral y el pago de impuestos (ambos con el 36,2%). Otras dificultades con las que se encuentran las empresas en su día a día y recogidas en la encuesta son la caída de los precios de venta y el recorte o eliminación de factores como las líneas de descuento bancario, coberturas de riesgo de clientes o de líneas de financiación para inversores.
Ante los contratiempos, “las empresas del sector han hecho sus deberes y han tomado medidas para resolver la situación de crisis”, según Antoni Marsal. Así, el 82,1% de las empresas del sector del metal están recortando costes, el 54,1% está reduciendo el número de trabajadores y el 47,1% está bajando precios para estimular el consumo. Otras medidas incluidas en la encuesta son el paro de proyectos de inversión, la negociación directa con los trabajadores para emprender acciones, negociación de financiación con entidades financieras o aplazamiento en el pago de impuestos y cotizaciones sociales.
Por otro lado, las medidas emprendidas por las Administraciones Públicas no están muy bien valoradas: el 70,2% de las empresas encuestadas opina que éstas no están teniendo ningún efecto hasta el momento. Según Marsal este es un “dato muy importante porque refleja que las medidas de la Administración no están llegando a las empresas”. No obstante, los encuestados han valorado muy positivamente la propuesta de reforma de Ley de Morosidad, el aplazamiento en el pago de cuotas de la Seguridad Social, el mejor funcionamiento en la aplicación de la compensación de impuestos o la mayor agilidad en la resolución de ERE, medidas que ya se han conseguido o que están en el buen camino para hacerlo.
Por último, se ha notado “cierto optimismo” entre el empresariado participante respecto a la primera encuesta realizada en febrero ante las previsiones sobre la evolución de la propia empresa. En concreto, un 10% aproximadamente tiene una percepción más positiva del año 2010, a la vez que ha bajado la visión negativa y muy negativa del 2010 respecto al 2009.
Acciones contra la descapitalización y el cierre de empresas
A pesar que los empresarios no vean su futuro tan negro como meses antes, Marsal no quiso oír hablar de 'brotes verdes'. "La situación del metal es delicada”, en palabras de Marsal, y añadió: “No basta con que las empresas hayan hecho sus deberes. No basta que se tomen medidas de reducción de costes internos, reducción de plantilla o inversiones porque todo esto está creando una situación de debilidad económica que está descapitalizando las empresas, desde el punto de vista financiero, tecnológico y laboral”.
Al incremento de la morosidad, las graves dificultades de liquidez y las propias obligaciones de pago a trabajadores, proveedores y administraciones públicas, hay que añadir la necesidad de las empresas de ajustar sus estructuras. Éstas se ven obligadas a destinar sus recursos para realizar estas reestructuraciones y quedan descapitalizadas, con lo que su supervivencia, en esta situación de crisis, se hace poco viable. “Esta crisis coyuntural –añadió Antoni Marsal- esconde el trasfondo de una profunda crisis estructural. Hemos cambiado de etapa: hemos pasado la fase de expedientes de regulación con despidos, estamos pasando la etapa de concursos de acreedores y estamos entrando en la fase de cierre de empresas. Y una empresa que cierra difícilmente vuelve a abrir”.
En el caso que la empresa consiga continuar, esta falta de capital tiene a su vez otra consecuencia muy negativa, como es la descapitalización tecnológica. Sin capital no hay inversión. Y esto, unido a un futuro incierto y al estrangulamiento financiero, pone en peligro la competitividad presente y, sobre todo, la futura.
Por otra parte, cualquier proceso de ajuste de plantillas supone la pérdida de experiencia y de conocimiento, y más aún si dicho ajuste se centra en determinados colectivos que se caracterizan por ser los mejor preparados. El metal requiere trabajadores especializados y con un largo período de aprendizaje, por lo que los ajustes de plantilla suponen una descapitalización laboral.
Para afrontar la descapitalización financiera Marsal considera necesario activar la demanda, impulsar cambios reglamentarios en materia de morosidad y, muy especialmente, instrumentalizar medidas que obliguen a las entidades financieras a cumplir con sus obligaciones como eje básico de la economía.
Frente a la problemática tecnológica, son las administraciones públicas las que, según el presidente de la patronal del metal catalana, deberían poner en marcha ayudas dirigidas a la inversión en equipamientos e instalaciones.
Finalmente, y con el fin de intentar salvar la descapitalización laboral, Antoni Marsal destaca la necesidad de poner en marcha una reforma del mercado laboral que permita introducir mayor flexibilidad, cosa que seguramente ayudaría a que el despido de trabajadores no fuera la única solución a la adaptación de las empresas frente a la crisis. Asimismo, el presidente de UPM cree necesario potenciar la formación de activos y parados por la vía de ayudas y, especialmente, establecer mecanismos que obliguen a la formación a las personas desocupadas.
Medidas que reclama el sector del metal:
- Actuación política contundente, rápida y eficaz, respecto a las ayudas financieras, el plan integral de automoción, medidas contra la morosidad de les Administraciones Públicas y ayudas a la compra de vehículos.
- Mayor atención a pymes y autónomos, “los que están acusando más la crisis”, enfocando las medidas pensando en estructuras pequeñas.
- Reformas básicas a la economía para mejorar la competitividad y evitar la descapitalización empresarial, enseñanza (FP), infraestructuras, modernización de la función pública, etc.
- Estimular la demanda con ‘planes renove’ (vehículos, motocicletas, electrodomésticos, maquinaria, calderas del hogar, carpintería metálica, etc.) y reduciendo temporalmente los impuestos que afectan al consumo (IVA e IRPF).
- Reforma del mercado laboral:
• Crear modelos de contratos válidos solamente durante la crisis.
• Introducir mecanismos legales que permitan una mejor y mayor flexibilidad de las estructuras empresariales (jornada, turnos de trabajo, salarios, ...) que sean adecuadas a las circunstancias del mercado.
• Eliminar la autorización administrativa de los ERE de suspensión temporal.
• Estudiar fórmulas de flexibilidad adaptadas a pymes y autónomos.
• Reducir los costes empresariales asociados a trabajadores afectados por ERO (Seguridad Social, etc.).
• Hacer obligatoria la formación a trabajadores afectados por ERE y parados, por ejemplo, vehicularla al complemento salarial dado por las empresas o al hecho de acogerse al ‘contador a cero’.
- Medidas financieras:
• Poner en marcha el compromiso político adquirido de reunir al sistema financiero y a la industria.
• Garantizar que la financiación llegue efectivamente al sector privado:
*Establecer obligaciones de actuación del sistema financiero.
*Impulsar el papel supervisor del Banco de España.
*Evitar abusos del sistema financiero en el establecimiento de los precios de los créditos.
*Estudiar la puesta en marcha de los canales de financiación privados-públicos alternativos al sistema financiero que sean más directos (SGR, organizaciones empresariales, etc.).
* Ayudas públicas directamente a las empresas.
• Mejorar las líneas públicas de avales (calidad de los avales, acceso, procedimientos...)
• Mejorar las posibilidades de liquidez de las empresas:
* Rebaja y aplazamiento en las cuotas a la SS.
*Aplazamiento del pago del IVA a facturas no cobradas.
* Mejorar el funcionamiento en la compensación de impuestos: ‘cuenta corriente fiscal’.
- Urgente reforma de la Ley de Morosidad.
- Reformar la normativa sobre medios de pago (cheques, pagarés, etc.).
- Reforma y mayor efectividad de la Ley Concursal.
- Moratoria en la puesta en marcha de nuevas leyes que graven la industria (protección de datos, residuos, medio ambiente, titulaciones en catalán, etc.).
- Propuesta a los agentes sociales de un Pacto Social Contra la Crisis del Metal en Cataluña.
Los empresarios catalanes se adhieren al movimiento ‘Actúa contra la crisis’
Otra iniciativa que parte del empresariado como respuesta a la actual coyuntura económica es ‘Actúa contra la crisis’. Se trata de un proyecto pionero que tiene por objetivo compartir experiencias, casos prácticos y sinergias entre empresas y organizaciones con la finalidad de superar la crisis. Impulsada por el Grupo Inforpress y la Cambra de Comerç de Barcelona, con la colaboración del Departamento de Economía y Finanzas de la Generalitat de Catalunya, esta iniciativa cuenta ya con la adhesión de más de cincuenta empresarios catalanes.
El principal soporte de divulgación de este movimiento es el ‘weblog’ www.actuacontralacrisis.com, donde se comparten experiencias, casos de éxito, consejos, etc. El proyecto culminará con la publicación de un libro que recogerá las cien experiencias y opiniones más destacadas.