¡Que la fuerza nos acompañe!

Se acabó. Basta de lágrimas ¡Que corra el cava! ¡Que abunde el turrón! ¡Comamos y bebamos todos con fruición en estas Navidades de las penas y las tristezas! ¡Apaguemos el televisor si alguien vuelve a mencionar la crisis, dejemos el periódico en el kiosco, quitemos las pilas a la radio, evitemos Internet! Amigos todos, el poder está en nuestras manos si lo queremos, la unión hace la fuerza. Un esfuerzo entre todos para poder aplicar, de verdad, este espíritu navideño. ¡Un poquito de por favor, señores!

Atravesamos un momento fatídico en nuestras vidas. Nos debatimos entre que el mundo siga girando o que el mundo se pare. En Interempresas, sin ninguna duda, queremos que siga girando. Y como querer es poder, el mundo seguirá girando. Y con él, esperamos seguir girando nosotros, deseamos que giren y giren todos aquellos que colaboran con nosotros, todas aquellas personas con las que trabajamos, los que nos leen, pero también los que no nos leen, los que se anuncian en nuestro medios y los que no se anuncian, los que nos conocen y los que no pueden siquiera imaginar nuestra existencia. Son buenas fechas las Navidades para desear el bien a todo el mundo. Son buenas fechas también para mirar al nuevo año con determinación, con la capacidad suficiente para discernir lo relevante de lo intrascendente. Lo que nos puede apagar la alegría, de lo que nos puede encender la ilusión.

Dejarnos vencer por el ocaso de los tiempos de bonanza será como abandonarnos al devenir de lo económico. Irremediablemente, lo laboral nos afecta en lo personal. A ver quién es capaz de mostrar alegría desde el desempleo, o desde puestos de responsabilidad en una empresa en dificultades. Difícil sobreponerse a la dificultad. Pero la fuerza está en nuestro interior. Un futuro mejor nos aguarda si entre todos lo forzamos. La fuerza nos acompañará si buscamos su compañía.

Esto es lo que deseamos a todo el mundo, aparte, claro, de que se coma y beba con fruición. Que no por pintar aquí un cuento de color de rosa nos vamos a olvidar de comer y beber.

Amigos, enemigos, personas, animales y plantas, os deseamos a todos las mejores Navidades posibles... bueno, no. Os deseamos...

¡FELIZ NAVIDAD y PRÓSPERO AÑO NUEVO!