El lehendakari inaugura el museo de TDG Clamping Solutions y celebra el centenario de la compañía
TDG Clamping Solutions ha aprovechado su centenario para renovar su imagen de marca y reafirmar su compromiso con la innovación, establecido desde que fuera fundada un 12 de mayo de 1916 en Gernika. Una guerra civil, dos guerras mundiales y varias crisis económicas después, TDG ha querido celebrar su capacidad de resistencia a los tiempos en compañía del lehendakari Iñigo Urkullu, la consejera de Desarrollo Económico e Infraestructuras, Arantxa Tapia; el diputado foral de Desarrollo Económico y Territorial, Imanol Pradales; y el alcalde de Gernika, Jose María Gorroño, así como con toda su plantilla. Además, aprovechó las celebraciones y la presencia de las citadas personalidades, el pasado 8 de octubre, para inaugurar su museo, que contiene elementos de su historia (maquinaria, documentación, fotografías y primeras campañas comerciales).
TDG comenzó con la fabricación de pequeños platos de torno, afiladoras de broca y otro tipo de herramientas de corte. En el siglo XXI ya ha dado el salto a la especialización de soluciones de amarre de gran diámetro de manera personalizada para cada cliente. Así llegó a fabricar el plato automático de torno más grande del mundo con siete metros de diámetro. Hasta 73 toneladas de hierro fueron necesarias destinar a esta pieza que se trabajó a 1.500 ºC.
En todo este tiempo, la firma ha mantenido su sede siempre en Gernika (Bizkaia) y la mirada puesta en el mundo con más de 30 países en contacto directo, entre los que destacan Italia, Alemania, Estados Unidos, Rusia, India y Taiwan, así como toda Europa. En total, un 70% de su fabricación está destinada a la exportación.
Ahora su reto pasa por mantener su compromiso con la innovación, la calidad y los mercados internacionales. Para eso, adecua su nombre a los nuevos tiempos con 'TDG Clamping Solutions', nueva imagen corporativa y la regeneración de sus instalaciones ubicadas en Gernika desde su creación en 1916.
TDG supera los 100 años de vida fabricando soluciones de amarres para tornos con más de un 70% de la producción destinada al mercado internacional, 42 personas en plantilla y cinco millones de euros de facturación anual.
Un nuevo museo testigo de la industria vasca
En este proceso, han adecuado un espacio en la planta para exponer la evolución de las máquinas, documentación financiera, campañas de publicidad y otros materiales con gran valor histórico tanto por sobrevivir al bombardeo de Gernika como por ser una buena expresión del proceso transformador de la pequeña y mediana industria vasca.
El espacio estará abierto junto al edificio principal de TDG a todos los interesados en conocerlo. El propio inmueble está protegido por su valor histórico al salir indemne del bombardeo de Gernika y por formar parte del legado arquitectónico de Ricardo Bastida (1879-1953).