Industrias Imar se especializa en chapa perforada
Las aplicaciones principales de sus productos se encuentran, en el sector de la construcción, en techos, pasarelas, fachadas y otros elementos decorativos. Pero no menos relevantes son otros muchos sectores como el de la panadería, en el cual se utiliza la chapa perforada como base para introducir la masa en los hornos, el de transportes, el de los electrodomésticos, maquinaria para diversos sectores o el de la acústica. Este último es uno de los que más están creciendo como consecuencia de las nuevas necesidades de la sociedad. En él se utilizan chapas perforadas que sirven como soporte para las pantallas acústicas y cuyos agujeros actúan como filtros de determinadas frecuencias.
Una segunda línea de negocio la constituye el metal expandido, muy de moda en construcción últimamente. Eduardo Múgica, Director Técnico, señala: “Hemos apostado por una máquina nueva y es una línea en pleno crecimiento. Hacemos desde filtros para campanas extractoras hasta elementos decorativos para construcción, etc.”
Aplicaciones interesantes de chapa perforada se pueden encontrar hoy en día en numerosos edificios emblemáticos. Por citar alguno del entorno geográfico de la empresa, los edificios de Ericsson y Euskaltel en el Parque Tecnológico de Zamudio, presentan una estética atractiva, entre otras cosas por el uso de este tipo de chapa. Pero también los techos de los aeropuertos de Madrid y Barcelona, entre otros, o la fachada de la estación del Ave de Córdoba han valorizado su estética gracias a este tipo de chapas salidas de Industrias Imar.
Pero la chapa perforada de este fabricante no se queda aquí, sino que se utiliza por todo el territorio español, Europa, Sudamérica y Asia.
Industrias Imar trabaja bajo pedido, pero también desarrolla sus propios productos, que ofrece al mercado. “Normalmente trabajamos a medida, es decir, hacemos chapas perforadas específicas para aplicaciones muy concretas que nos pide un cliente determinado. Lo cierto es que atendemos a todo tipo de situaciones: pedidos bajo programa, series grandes e incluso series tan cortas como las de una chapa perforada de una forma determinada para una decoración de una casa. Aportamos soluciones globales, por lo que, además de la chapa perforada, servimos productos terminados, con plegado, soldadura, embutición, anodizado, etc.”.
Medios productivos
En Miranda de Ebro la empresa cuenta con 9.000 metros cuadrados, de los cuales 6.000 son construidos y en Ortuella con 5.000, de los cuales construidos son 3.500, por lo que en ambas fábricas se dispone de mucho espacio para posibles ampliaciones futuras.
El proceso parte de láminas de chapa lisa, que se perforan en prensas especiales de perforar. Para ello se utilizan unos troqueles que Imar construye en sus propias instalaciones. Las perforaciones pueden ser redondas, cuadradas y decorativas, multiperforadas, largas redondeadas y rectangulares y abocardadas-estampadas.
Una visita al taller deja a las claras dos partes diferenciadas. El área de construcción de troqueles y el de perforación de chapa. “Aquí hacemos todo, salvo los punzones, lo cual consideramos una ventaja importante con respecto a otras empresas, ya que nos adaptamos a cualquier necesidad del cliente”, señala Eduardo Múgica. “Contamos con máquinas de perforar de una pasada, otras de varias pasadas, punzonadora Amada, plegadora, máquinas de metal expandido y toda la maquinaria auxiliar para dejar la chapa en condiciones (aplanadoras, cizallas...)”. Miguel Tapia, responsable del taller de troquelería explica: “En la zona de troquelería, contamos con máquinas de electroerosión (de hilo y de penetración), fresadoras, rectificadoras y taladro radial de control numérico de Donau, representada en España por MPE. Algunos trabajos de mecanizado los subcontratamos a otras empresas”.