Caniches: tijeras, técnicas y cortes

“En mi opinión, lo ideal es tener diferentes tamaños de tijeras para cada ejemplar”.

Hoy en día existe una amplia gama de tijeras en el mercado, pero hay que asegurarse de escoger modelos sobre todo ligeros y ergonómicos, ya que nuestras muñecas y dedos también sufren con el trabajo continuado. Un buen acero equilibrado en dureza y en resistencia al desgaste y peso hará que nuestras tijeras nos acompañen durante mucho tiempo.

Podemos encontrar las clásicas tijeras rectas, de filo dulce o bisel, de filo de navaja o integrado, convexo, o cualquiera de los anteriores, microdentados. Las tijeras de filo microdentado se suelen utilizar, mayormente, para pre-cortes y desbastados, dejando las de filo convexo y navaja para acabados y pulidos finales. El microdentado también hace que el pelo no se deslice por la pala mientras cortamos, facilitando así más precisión.

También tenemos la opción de las tijeras curvas, que facilitan mucho el trabajo a la hora de hacer formas redondeadas, evitando de esta manera tener que dar más cortes con una tijera recta para conseguir, por ejemplo, una carita tipo Teddy.

Ejemplo de tijera ‘chunker’.

Desde hace ya un tiempo se han puesto de moda, y con razón, las llamadas ‘chunkers’ o ‘diente de tiburón’. Son unas tijeras con una pala lisa y otra dentada, cuyos dientes son más anchos de lo habitual, respecto a una tijera de esculpir. Dependiendo del número de dientes, y de la forma y del tamaño de los mismos, se consigue un efecto u otro sobre el pelo a cortar. A muchos nos gusta usarlas para desbastar rápidamente y dar forma a los cortes en pelo rizado y denso, ya que son muy rápidas en este tipo de pelo y no dejan marcas. Ideales para caniches y frisés y, por experiencia personal, muy útiles también en los kerry blue, entre otras razas, este tipo de tijera da velocidad con más margen de error que una recta, ya que no se nota tanto el corte y permite corregir, en caso de equivocación. En un caniche es conveniente terminar de pulir con una tijera de filo liso, ya sea curva o recta, pero siempre dependiendo del tipo de pelo que tengamos encima de la mesa. Como sabemos, dependiendo del color, la densidad del pelo cambia bastante, incluso, a veces, color a parte, la genética también juega su papel.

Las tijeras chunker se pueden encontrar con más o menos dientes, pero siempre serán más anchos que los de las tijeras de esculpir y con una forma muy característica. Las que tienen menos dientes y más anchos, serán muy rápidas en pelo rizado, pero se marcarán más en el liso; y las que tienen más dientes un poco más estrechos, serán algo más lentas, pero no se marcaran tanto en este tipo de pelo, por lo que resultan ideales también en, por ejemplo, los shih tzus.

En la categoría de los tamaños, hay profesionales que las prefieren siempre grandes, ya que abarcan más cantidad en cada corte, pero, en mi opinión, lo ideal es tener diferentes tamaños de tijera para cada ejemplar: no es lo mismo cortar un caniche Estándar (gigante) que un caniche Toy.

Existen tijeras desde 5 pulgadas, aunque las más cortas se suelen usar más bien en peluquería humana, dejando para la canina las de a partir de una medida de unas 6,5 hasta 9 pulgadas, e incluso, para manos más grandes, las de 10.

En cuanto a la ergonomía, las tijeras offset hacen que nuestras manos sufran menos, siendo siempre conveniente que las tijeras curvas sean, en cambio, simétricas, ya que se van a usar por ambos lados.

“Yo personalmente suelo arreglar a los caniches con dos chunkers, una recta y una curva; y con tijeras curvas de filo de navaja”.

Yo, personalmente, suelo realizar el corte de pelo del caniche con una chunker recta y con una curva, para terminar puliendo con curvas de filo de navaja. Me ayuda mucho marcarme primero las formas con la chunker, desbastar, y después “aterciopelar” con la tijera de acabados. El tamaño que uso depende, en cada caso, del tamaño del animal, ya que a mí me resulta más sencillo usar tijeras más pequeñas si el ejemplar es pequeño. También en función del tamaño de mi mano, se me hace más complicado usar, por ejemplo, tijeras de 9 pulgadas, ya que me bailan y no me funcionan bien.

En definitiva, debemos buscar material adecuado a nuestras manos en tamaño y en peso, de buen acero, que nos facilite nuestro día a día, y también saber escoger qué tijera necesitamos para cada perro y para cada corte. En nuestra profesión sabemos que “el tiempo es oro” y, por ello, trabajar con las herramientas adecuadas nos hará ser más rentables y optimizar nuestras horas de trabajo.