La Comunidad de Madrid emplea las últimas terapias con perros para atender a personas con discapacidad grave
27 de octubre de 2014
Así lo ha destacado el Consejero de Presidencia y Justicia y portavoz del Gobierno regional, Salvador Victoria, en la rueda de prensa posterior al Consejo de Gobierno en el que se autorizó un gasto de 2,8 millones de euros para la prórroga de 5 contratos de gestión de servicio público para la atención de personas con discapacidad física gravemente afectadas. Esta atención es prestada a través de 246 plazas distribuidas en 6 centros de día gestionados por la Fundación del Lesionado Medular, la Asociación Esclerosis Múltiple de Madrid, la Fundación Instituto San José, la Asociación Dato y la Asociación de Padres de Alumnos Minusválidos (Apam).
Estos centros están destinados a la atención de personas mayores de 18 años que padezcan discapacidad física en grado de afectación graves y que precisen de una tercera persona para realizar las actividades más elementales de la vida diaria. Dichos recursos cuentan con un conjunto de servicios que se adaptan a las necesidades de las personas según sus procesos de parálisis cerebral, esclerosis múltiple, lesión medular o espina bífida.
El Ejecutivo regional también destina 180.000 euros para la atención de personas con discapacidad intelectual en un centro gestionado por la Institución Orden Hospitalaria de San Juan de Dios. Victoria recordó que la Comunidad de Madrid es la única administración regional que presta la atención a las personas con discapacidad de manera gratuita. El Gobierno regional destina este año 23 millones de euros más al presupuesto para la atención a la discapacidad, elevando el importe total a 338 millones.
Algunos centros de la Red de discapacidad de la región disponen de programas complementarios de atención a estas personas. Cabe destacar la terapia asistida con perros (canoterapia) que es una de las iniciativas que se realizan para mejorar la motricidad, atención, comunicación, empatía, autoestima e interacciones sociales de personas con discapacidad física grave.
El programa de actividades incluye cuidado del perro para promover la estimulación motora, ejercicio de dar órdenes gestuales y verbales al animal para estimular el lenguaje del usuario o aprendizaje del nombre del perro para ejercitar la memoria.