Antes de emprender el viaje hay que tener bien organizado el traslado, aunque se viaje en el vehículo propio
De viaje con la mascota
Los propietarios de perros que quieren llevárselos con ellos de vacaciones deben tener en cuenta ciertas consideraciones, tanto las que afectan al traslado propiamente dicho como al alojamiento, pasando por los lugares a los que puede acceder sin problemas. Antes de emprender el viaje hay que tener bien organizado el traslado, aunque sea en el propio vehículo y saber, aproximadamente, cuánto durará el viaje y, por tanto, si será necesario hacer alguna parada para que el perro pueda “estirar las patas” y hacer sus necesidades. Esto es especialmente importante cuando se viaja en transporte público, que exige consultar con la compañía si admite el traslado de mascotas y en qué términos, por ejemplo, tipo de transportín, si puede viajar con el dueño o debe hacerlo en alguna dependencia especial, tamaño máximo de la mascota, etc. Además, hay que conocer la tarifa por el transporte del animal.
Por supuesto, si el lugar de destino es de propiedad, no hay más que tener en cuenta las limitaciones propias de la comunidad de vecinos, ya que algunas no permiten la tenencia de mascotas, aunque son las menos.
En cuanto a los alojamientos que no son de propiedad, es necesario consular si admiten la estancia de mascotas, ya que hay establecimientos hoteleros que no las admiten pero otros las permiten en determinadas áreas y tienen reservadas habitaciones para cuando son necesarias. Incluso si se trata de una casa rural o un apartamento que se alquile al completo, hay que consultar si se pueden alojar con mascota. También es posible combinar un alojamiento para los dueños y otro para el perro, en áreas especialmente diseñadas para ello.
Los lugares públicos que admiten mascotas van aumentando paulatinamente y existe una amplia oferta en la web Mascotas Bienvenidas. En ellas pueden encontrarse infinidad de lugares a los que acceder con perro, sea para alojarse con él o simplemente para poder acceder, como establecimientos de hostelería o tiendas en general. Independientemente del tipo de transporte y del lugar de destino, el animal no debe pasar mucho tiempo sin beber y es necesario llevar su comida habitual; Para perros que se ponen muy nerviosos durante este proceso existe un alimento especial. Si fuera necesario, consultar con el veterinario si es conveniente que tome algo para el viaje, especialmente si sabes se marea y es recomendable llevar un botiquín de primeros auxilios. La documentación sanitaria es imprescindible.