Los mercados emergentes y las industrias dirigidas a la infancia

Durante los últimos meses hemos ido publicando en Key4Communications y en las revistas de Ediciones Just una serie de informes sobre los mercados emergentes que pronto editaremos también en forma de libro electrónico.

Estos mercados suponen una oportunidad interesantísima a la hora de exportar, debido a su rápido crecimiento económico. China se ha convertido en una de las principales potencias económicas en la última década, Brasil y México podrían ser los próximos grandes productores y distribuidores del mercado americano, Oriente Medio se está revelando como uno de los principales mercados para las marcas occidentales y la India podría convertirse (a medio plazo), en la próxima China.

Además, estos países aún muestran una tasa de natalidad muy alta, que se traduce en un amplio público potencial para las empresas dirigidas al segmento infantil. Las familias siempre se preocupan más por la seguridad, el bienestar y el desarrollo de sus hijos y, dado que disponen de más medios para cuidar de la mejor forma posible a los más pequeños, están destinando presupuestos cada vez mayores a sillas de paseo, sillas auto, juguetes y otros productos de calidad.

En un contexto en el que los mercados europeos y norteamericanos, por no hablar del español, están mostrando un estancamiento en el consumo, estos países suponen una oportunidad para introducir producto, aprovechando la experiencia, el buen trabajo y la imagen de marca que tienen las empresas de nuestro país.

Eso sí, hay que tener en cuenta que estos crecimientos de dos dígitos en el producto interior bruto no se van a mantener para siempre. De hecho y como se explica en los informes, Rusia ha pasado de sus 8% y 9% a un 4% en los últimos dos años; China ya crece en torno al 7%, habiendo dejado atrás los dobles dígitos, e incluso la India, que tiene más recorrido futuro, ha pasado en los últimos años del 9% al 6%.

Y es que como se afirma en la edición de noviembre/diciembre de 2012 de Foreign Affairs, "la noción de una convergencia entre los países en desarrollo y los desarrollados es un mito". Los 35 países más ricos son cada vez más ricos, y los 145 restantes están cada vez más lejos de ellos. Hay un puñado de territorios que se acercan a los niveles de Occidente, pero queda por comprobar cuáles de ellos lograran un crecimiento sostenido a largo plazo que los convertirá en grandes potencias económicas. China es ya una realidad, los países de la península arábiga también tienen recursos suficientes como para lograrlo, al igual que, tal vez, México, Rusia y Brasil. Pero de momento todo son incógnitas.

Esto significa que las empresas que opten por salir a otros mercados y tengan presentes estos países en su lista de objetivos han de estudiarlos bien y averiguar tanto su potencial como su realidad. Para tener éxito hay que correr riesgos, pero no llevarse sorpresas.