La transformación digital de las tiendas físicas
Los puntos de venta tienen que adaptarse a las nuevas demandas y exigencias del nuevo consumidor, ante los cambios de hábitos de consumo.
El retail haría bien en tener en cuenta la omnicanalidad, la experiencia de compra personalizada y la concepción de la tienda física como un espacio de ocio, si quiere ser capaz de satisfacer las cambiantes exigencias del consumidor actual. La presencia en las diferentes fases del ‘customer journey’ empieza a ser obligada para el punto de venta, que debe transformar su modelo de negocio si quiere adaptarse a las nuevas demandas del consumidor.
El 89% de los encuestados en el estudio ‘Retail Trend Monitor 2017’, de GfK, considera que generar procesos de compra rápidos, continuos y personalizados son los mayores desafíos que debe afrontar el retail en la era digital. No cumplir con alguna de estas premisas -malas opiniones, navegación lenta o falta de presencia online-, puede generar frustración y desconfianza en el cliente y alejarlo de la tienda.
En este proceso de digitalización, la Realidad Aumentada, la Realidad Virtual y el Internet de las Cosas irán ganando protagonismo frente al marketing personalizado, la experiencia móvil y la experiencia multicanal. La tecnología en tienda deja de ser un simple complemento para convertirse en una herramienta esencial para ofrecer experiencias únicas a los consumidores.
Puntos de venta digitalizados
Los establecimientos ya están empezando a incorporar todo tipo de tecnologías, desde la opción de pagar con el móvil, hasta probadores inteligentes, pasando por pantallas táctiles. La tienda del futuro debe ser todavía más experiencial y los expertos predicen que se convertirán en espacios de ocio, más allá de un simple lugar en el que comprar, la tecnología se está implantando en el offline para poder ofrecer a los consumidores todo aquello que están demandando.