Los fabricantes italianos reclaman una política de apoyo "más reactiva y flexible"
La presidenta de la Federación Italiana de Fabricantes de Maquinaria Agrícola, FederUnacoma, Mariateresa Maschio apela a una política de apoyo al sector más reactiva y flexible.
La demanda de maquinaria agrícola está creciendo a nivel global, pero los mercados están fragmentados y las variables a gestionar son cada vez más complejas. Este es el escenario descrito por Mariateresa Maschio durante la Asamblea Anual de FederUnacoma, celebrada el 25 de junio en el Palazzo Albergati, en Zola Predosa (Bolognia).
La presidenta explicó que el comercio mundial de tractores creció en los últimos 15 años a una media del 4,7 % anual, y las previsiones para el cuatrienio 2024-2027 indican un aumento medio anual del 4,9 %. Las previsiones son aún mejores para el resto de maquinaria y equipos agrícolas, que han crecido a una media del 5 % anual durante los últimos 15 años y se espera lo hagan una media del 5,4 % hasta 2027.
Estos cálculos se hacen en la esperanza de que la tendencia meteorológica, cada vez más impredecible en los últimos años debido al cambio climático, sea más favorable, garantizando volúmenes de producción e ingresos agrícolas que alienten las inversiones. También se pusieron sobre la mesa otras factores importantes, como el coste de las materias primas y de la energía, que podrían sufrir nuevos aumentos si el conflicto en Oriente Medio se extiende, y que corren el riesgo de afectar a los precios de los equipos, favoreciendo aquellos países que crean tecnologías de bajo costo y que también aspiran a ganar participación en los mercados occidentales.
Otros elementos cada vez más influyentes son los representados por las estructuras geopolíticas: desde las sanciones a Rusia hasta los derechos de importación introducidos por muchos países y las políticas de defensa del producto nacional por parte de potencias económicas emergentes, como India y China, que pueden limitar la exportación de productos italianos.
"La geopolítica también influye en las rutas comerciales y en los costes logísticos", recordó la presidenta. "Si tenemos en cuenta que los ataques sistemáticos que los hutíes yemeníes llevan a cabo contra los buques de carga que transitan por el estrecho de Bab el-Mandeb y, por tanto, el canal de Suez (centros cruciales para las conexiones en el continente euroasiático) ya han provocado un colapso de los tránsitos (-65 % en Bab el-Mandeb y -50 % en Suez) obligando a los barcos a utilizar rutas alternativas, con costes de transporte que solo el pasado mes de mayo se han más que duplicado con respecto a 2023.
En cualquier caso, en el nuevo escenario no faltan nuevas oportunidades de desarrollo para los fabricantes y mercados interesantes para los productores italianos podrían ser los países del Sudeste Asiático, como Tailandia e Indonesia, equidistantes de los bloques políticos de China y Estados Unidos, y los países africanos que están experimentando un fuerte desarrollo como Nigeria, Kenia, Ghana y otros. "Para prevenir factores críticos y aprovechar nuevas oportunidades", concluyó Mariateresa Maschio, "es necesario un apoyo cada vez más fuerte de la política y de las instituciones, con programas diferenciados de acceso a los distintos mercados exteriores, y con intervenciones y apoyos financieros cada vez más rápidos y flexibles".