markilux mejora con sus toldos el clima en la ‘Villa Tapas’
Como es bien sabido, los espacios rodeados por grandes cristaleras pueden calentarse enormemente debido a la luz solar. Esta experiencia también encaja con lo vivido por el empresario de la ‘Villa Tapas’, un restaurante en la ciudad holandesa de Assen, a unos 30 kilómetros al sur de Groningen. Para que los clientes puedan disfrutar del ambiente luminoso y abierto con unas temperaturas agradables, el gastrónomo hizo equipar una parte del edificio con sistemas de toldos del fabricante markilux.
En el centro de la localidad de Assen, al este de la provincia de Drenthe, la moderna construcción acristalada del restaurante ‘Villa Tapas’ recuerda, con sus dos plantas de altura, a un invernadero de dimensiones enormes. Cerca de 170 metros cuadrados de cristaleras le dan al edificio, con más de 200 asientos, un carácter transparente y ventilado. Pero la construcción también conlleva problemas de altas temperaturas en primavera, verano y otoño. La instalación de sistemas de toldos del fabricante markilux solucionaron este problema, con lo que ahora, la climatización del espacio interior del restaurante requiere de un menor aporte de energía.
Toldos sobre el techo acristalado
Según afirma Jan Kattenbeck, director de ‘markilux project’, el departamento de proyectos del especialista en toldos, el empresario de restauración decidió dar sombra al techo acristalado que da hacia el oeste. “En una superficie de 166 metros cuadrados, montamos siete toldos sobre-cristal, parcialmente acoplados, de nuestro modelo markilux 8800. Para ello tuvimos que fabricar primero unos soportes de rieles especiales. Con la nueva protección solar se pudo ya reducir la entrada de calor”, explica Kattenbeck.
La combinación de toldos sobre-cristal y verticales permite reducir la entrada de calor en las instalaciones, ahorrando con ello energía refrigerante. Foto: markilux.
Mediante la elección de una lona de color claro, la instalación de toldos se integra sin interferencias en la imagen global de la ubicación.
Toldos verticales para una protección solar adicional
Sin embargo, esta intervención no fue suficiente para el edificio, por lo que, en un segundo paso, también la totalidad de la fachada acristalada occidental fue equipada con protección solar.
En una anchura de 20 metros, una empresa especializada instaló ocho toldos verticales, cada uno de ellos con más de cinco metros de altura. “Debido a que los toldos están equipados con nuestro 'sistema tracfix‘, que lleva la lona a ras por los rieles de transporte, la superficie de lona casi no ofrece espacio de interacción con el viento. Esto es especialmente importante en equipos así de grandes”, enfatiza el experto en toldos, porque además de un agradable aspecto, el material se protege correctamente. De esta manera se evitan desagradables ruidos por el viento.
Para seguir ofreciendo a los clientes la visión al exterior, el gastrónomo eligió un tejido screen transparente. “Con esta combinación de toldos sobre-cristal y toldos verticales que no ocultan las vistas, hemos sido capaces de mantener el ambiente de espacio agradable y luminoso, logrando al mismo tiempo un mejor clima en la edificación. Esto es algo valorado muy positivamente por los clientes y, también, por el empresario”, explica Jan Kattenbeck, quien también se muestra muy satisfecho con el resultado del proyecto.
Con la instalación de toldos markilux, la climatización del espacio interior del restaurante requiere de un menor aporte de energía. Foto: markilux.