Aguacate, oro verde en auge
Elio Sancho García
19/10/2020El cultivo de esta fruta no ha dejado de crecer en España en los últimos años y supera ya las 14.000 hectáreas de superficie y roza los 100 millones de kilos de producción. Andalucía es líder en volumen y extensión, con Málaga y Granada como puntas de lanza, aunque también está creciendo en las Islas Canarias y la Comunidad Valenciana.
El aguacate es un cultivo en expansión en España, que supera ya las 14.000 hectáreas de superficie, concentrándose su gran mayoría en la conocida como Axarquía de Málaga y la costa tropical de Granada, que lucen más de 10.000 hectáreas en conjunto, aunque también se viene estableciendo con fuerza en las Islas Canarias, la Comunidad Valenciana e, incluso, en otras zonas de Andalucía como Huelva y Cádiz, según los últimos datos del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, correspondientes al ejercicio 2019.
En concreto, Málaga lidera el ranking nacional de extensión de aguacate cultivado, con 7.390 hectáreas; le sigue Granada, con 2.683 hectáreas. Las Islas Canarias dispone de un total de 1.866 hectáreas, de las que 1.581 se explotan en Santa Cruz de Tenerife, mientras que las 285 restantes se encuentran en Las Palmas; le sigue en superficie Cádiz, con 592 hectáreas, 553 de las cuales, se cultivan en regadío y el resto en régimen de secano; a continuación, Valencia, con 543; tras ella, Huelva, con 520; después, Alicante, con 284 hectáreas; y Castellón, con 188. Existen otras zonas con cultivos residuales: once hectáreas en Sevilla, ocho en Baleares, seis en Tarragona, cinco en Almería, cuatro en la Región de Murcia, tres en el Principado de Asturias y una en A Coruña.
Su atractivo precio en origen llama la atención de los agricultores, si bien han de estar precavidos ante el auge que está experimentando la producción en países competidores como Marruecos y Portugal, como zonas más cercanas a España, además de que no deben perder de vista la creciente tendencia de las importaciones transoceánicas registradas por la Unión Europea, procedentes de Perú, Sudáfrica, México y Colombia.
El clima subtropical granadino y malagueño convierte a estas zonas en ideales para su desarrollo, un factor que puede replicarse en cultivos bajo plástico, vigilando adecuadamente el consumo de agua y de energía para que no se convierta en un factor que condicione la rentabilidad final.
El precio medio de aguacate aumenta un 9%
El volumen de producción de aguacate en Andalucía, que aglutina más del 90% del total en España, ha superado las 87.000 toneladas en la campaña 2019/2020, que ha culminado con un buen nivel de precios en todas sus variedades, según recoge el Observatorio de Precios y Mercados de la Consejería de Agricultura, Ganadería, Pesca y Desarrollo Sostenible de la Junta de Andalucía, que destaca la valoración positiva del sector respecto a la respuesta del mercado europeo al consumo de esta fruta durante los primeros meses de la crisis de la Covid-19, al considerar que ha pasado de ser considerado como un producto exótico por parte de los consumidores a formar parte de la lista de la compra habitual.
La cotización media de la campaña se ha situado en 2,34 euros el kilo, lo que supone un incremento del 9% respecto al ejercicio anterior. La variedad 'Hass', que aglutina un 88% de la producción andaluza, ha cerrado el año con un precio medio de 2,44 euros el kilo y ha protagonizado el menor incremento respecto a la campaña precedente, con tan solo un 5%. El aguacate 'Bacon', con un precio final de 1,30 euros el kilo y una representatividad del 3% de la producción total es el que ha registrado el mayor aumento respecto a 2018/2019, con un 66%. La variedad 'Fuerte', que representa el 5%, incrementa su precio final en un 28% y se sitúa en 1,53 euros por kilo. Por categorías, sobresale la primera de ellas, que ha supuesto el 71% del volumen total comercializado, alcanzando un precio medio de liquidación en origen de 2,73 euros el kilo.
La producción andaluza de aguacate se ha visto favorecida por la situación del mercado europeo, donde la alta demanda se enfrentaba a una oferta relativamente débil con escasez de calibres gruesos. Los altos precios pagados por Estados Unidos han motivado el desvío de importantes volúmenes de esta fruta procedente de México y Perú hacia este país; mientras que Chile entraba en el mercado con una importante reducción de su producción y abundancia de aguacate de bajo calibre, que junto al de Colombia, ha presionado al alza las cotizaciones de los calibres más grandes.
Al inicio de la pandemia, en Andalucía aún quedaba en torno al 22% de la producción en el árbol. Las condiciones meteorológicas en aquella época, con lluvias y temperaturas más bajas de lo habitual, contribuyeron a ralentizar el ritmo de maduración de la fruta, mientras el mercado se adaptaba a esta situación excepcional nunca vivida con anterioridad. El cierre del canal Horeca en toda Europa, en las primeras semanas, y la orientación de los consumidores hacia compras masivas de otros productos de primera necesidad, efectuadas, principalmente, en supermercados y grandes superficies, en detrimento de fruterías y mercados de abastos, provocó la caída de los mercados mayoristas. Sin embargo, el progresivo regreso de los consumidores al formato de compra habitual hacía aumentar la demanda de aguacate en un momento de desabastecimiento en el mercado europeo, coincidiendo con el final de la campaña de las producciones de países competidores como Chile, México y Marruecos, además del retraso en la llegada de envíos procedentes de Perú, lo que ha empujado al alza las cotizaciones hasta el final de la campaña, tal y como recoge el Observatorio de Precios de Andalucía.
Según la consultora Nielsen, el consumo nacional se ha incrementado a lo largo de los meses de la pandemia, en comparación con el mismo periodo del año pasado. En concreto, en marzo lo hizo en un 26% hasta situarse en 4.636 toneladas; en abril, creció un 37%, con 4.044 toneladas; y en mayo, un 35%, hasta las 4.318 toneladas. Los precios de venta alcanzados en estos meses fueron de 4,74 euros el kilo en marzo, 4,8 euros/kilo en abril y 4,72 euros/kilo en mayo, lo que supone incrementos del 6, el 7 y el 8%, respectivamente, respecto a los mismos meses de 2019.
El presidente de la Asociación Española de Productores de Frutas Tropicales, Javier Braun, recuerda cómo se vivió la situación al principio del confinamiento provocado por la COVID-19 y su evolución hasta hoy: “Aunque creó mucha incertidumbre y miedo en el sector, ya que estábamos en plena cosecha, solo nos afectó al principio por el tema laboral y el desconcierto que había, pero se fue solucionando, tomamos todas las medidas de seguridad y, aunque más despacio, pero terminó bien la campaña”. Además, destaca que en cuanto a precios “también fue bien, ya que el aguacate ha entrado en muchos hogares gracias a sus cualidades saludables”.
Mercado exterior
El aguacate andaluz, referente de calidad en el mercado, ha incrementado el volumen de sus exportaciones durante el período de producción en un 16% respecto a la campaña precedente; un aumento muy similar al del valor de las exportaciones, que lo ha hecho en un 15%, con una cifra superior a los 278 millones de euros. La Unión Europea recibe el 96% de las ventas exteriores, cuyos principales destinos son Francia, con el 38% del volumen; Países Bajos, con el 17%; y Alemania y Reino Unido, con el 11 y el 10%, respectivamente.
Pero no todo es miel sobre hojuelas. El manejo del cultivo de aguacate no resulta sencillo, pues su rendimiento por metro cuadrado es relativamente bajo. Cada hectárea de aguacate produce en torno a 10.000 kilos de producto, lo que significa una media de un kilo por metro cuadrado. Además, el árbol que da este fruto depende de un óptimo manejo del riego, siendo el sistema de goteo el más adecuado para ello, pues facilita también las labores de fertilización a través del mismo mecanismo.
Precisamente, el sector está padeciendo la escasez de recursos hídricos, principalmente, en el sur de España, donde está experimentando restricciones desde hace meses, como medidas excepcionales tomadas por la Junta de Andalucía ante la persistente sequía, un hecho que preocupa a los productores por la incertidumbre que genera para su futuro. “Sigue habiendo restricciones y más que nos van a poner en este año hidrológico, ya que las administraciones no hacen absolutamente nada y, con ello, van a llevar a la ruina total a la Axarquía y parte de la Costa Tropical”, denuncia el máximo responsable de los productores de España, una asociación que cuenta con cerca de medio millar de socios, que cultivan una superficie conjunta superior a las 3.350 hectáreas.
A la falta de agua se suma el problema de los robos que sufren como consecuencia de las buenas cotizaciones que está registrando esta fruta. “Continuamos padeciendo robos y el problema radica en que el agricultor, unas veces por miedo y otras por no disponer de tiempo para ir a comisaría, no denuncia, aunque tampoco tenemos estadísticas fiables al respecto”, explica Braun.
Futuro prometedor
A pesar de los retos pendientes, el futuro de la conocida como 'fruta de la vida' es esperanzador. Según la Organización Mundial del Aguacate (WAO, por sus siglas en inglés), se espera que al cierre de 2020, la Unión Europea consuma más de 750 millones de kilos de este nutritivo producto, rico en fibra y potasio, bajo en colesterol y triglicéridos y que supone una poderosa fuente de energía. En 2018, en España se consumieron cerca de 75 millones de kilos de aguacate (el conjunto del país produce más de 97,7 millones de kilos), batiendo el récord del año anterior. A pesar de ello, la ingesta media por habitante en España es de un kilo al año, muy por debajo de los 2-2,5 kilos que registran los países nórdicos.
La WAO es una organización internacional sin ánimo de lucro fundada en 2016, que representa a los principales productores, exportadores e importadores de aguacates de Estados Unidos, México, Colombia, Perú, Zimbabue, Sudáfrica, Tanzania, Mozambique y España, que se adhirió en 2018. Su objetivo se centra en promover el consumo de esta fruta difundiendo sus valores nutricionales y sus beneficios para la salud.
Precisamente, uno de los reconocimientos que se persigue desde el sector productor en España es la puesta en marcha de una indicación geográfica protegida que refuerce el valor añadido del aguacate e incremente su diferenciación en el mercado ante el consumidor, una medida que se viene reclamando desde hace años. “En estos momentos la indicación geográfica protegida está parada por la Administración, ya que se comprometió con nosotros, pero como ocurrió con el agua, no están haciendo nada y, además, las cooperativas y grandes comercializadoras no nos apoyan”, se lamenta Javier Braun.
Otro aspecto diferenciador del aguacate radica en sus propiedades, que lo hacen un producto idóneo para formar parte de proyectos de investigación de gran calado, en el marco de la apuesta de la sociedad por la sostenibilidad y la economía circular, contribuyendo a luchar contra el cambio climático. Uno de ellos es el Grupo Operativo Aguacavalue, puesto en marcha en 2018 (culminará en 2020), que pretende impulsar la revalorización de subproductos del aguacate para alimentación animal, nutracéuticos y cosmecéuticos. Por un lado, se aprovecharán la piel y el hueso para la fabricación de compuestos de alimentación animal con alto valor nutritivo, enriquecidos en bioactivos beneficiosos para la salud del animal; y por otro, se investigará el desarrollo de cosméticos y nutracéuticos de alto valor añadido a partir del fruto. El Centro de Investigación y Desarrollo del Alimento Funcional (CIDAF), ubicado en Granada, coordina este innovador proyecto de I+D que une a empresas y entidades de primer nivel: Grupo La Caña, Frumaco, Natac Biotech, Macob y Cooperativas Agro-alimentarias de Andalucía-Granada.