AIMCRA impulsa un plan de I+D que permitirá analizar y gestionar el cultivo de la remolacha y mejorar su productividad
Con el objetivo de mejorar el rendimiento y la productividad de la remolacha, AIMCRA, la Asociación de Investigación para la Mejora del Cultivo de la Remolacha Azucarera, está trabajando en un plan estratégico de I+D para impulsar la investigación en la producción sostenible e innovadora de este cultivo.
Se trata de dos proyectos centrados en analizar las diferentes fases del cultivo. Así, para la fase más temprana, AIMCRA diseñará una novedosa herramienta que le permitirá:
- Digitalizar el cultivo de la remolacha azucarera para la obtención de datos de calidad que ayuden a tomar decisiones y, al mismo tiempo, favorecerá al medioambiente al optimizar los recursos destinados al cultivo. Para ello, se incorporarán nuevos sensores que permitan observar elementos antes difícilmente observables, lo que permitirá ir un paso más allá de la transferencia de conocimiento, con el objetivo de que sea el agricultor el generador y foco de las mejoras agronómicas y de ahorros. Se trata de aprovechar las soluciones tecnológicas que existen actualmente en el mercado o que deben adaptarse a la realidad agrícola y aplicarlas así al cultivo de la remolacha para que los agricultores con rendimientos más bajos y costes más caros, así como otros que no se habían planteado este cultivo, puedan posicionarse a la par de los agricultores con rendimientos más altos y costes más bajos.
- Mejorar el rendimiento de las parcelas mediante el uso de herramientas de agricultura de precisión como la incorporación de tecnología de dosificación variable de los insumos y la obtención de mapas de rendimiento para ver oportunidades de mejora en la gestión de los insumos, permitiendo, a su vez, optimizar los inputs de siembras y destinar menos insecticidas y fungicidas, lo que beneficia al suelo y al medio ambiente. Con los nuevos procesos y la tecnología que se desarrollará, la cosechadora tendrá datos de producción de su parcela metro a metro, variedad por variedad, un año tras otro. De esta manera se podrá comparar el nivel productivo de las distintas zonas de la parcela, para así poder hacer un manejo agronómico diferenciado para cada zona, identificar problemas estructurales y, en definitiva, obtener mejores rendimientos y reducción de insumos. Con el uso de esta tecnología no solo se conseguirá generar un alto valor para todo el sector remolachero-azucarero, sino que el agricultor identificará cómo se comporta su explotación de manera que pueda resolver los problemas que se le plantean. El problema actual es que muchos agricultores siguen aplicando técnicas agrícolas por inercia o cultura sin saber realmente el punto óptimo de consumo de recursos químicos, hídricos o de mano de obra. Las nuevas tecnologías de recolección de datos permiten sobreponerse a este problema, y poder asesorar a los agricultores tanto en cantidad como en calidad. Cuánto de cada insumo utilizar, en qué momento y para qué objetivo.
- Identificar y analizar las variedades resistentes a plagas y enfermedades y desarrollar modelos predictivos que las detecten, en concreto el pulgón y la amarillez virosa, lo que generará menos pérdidas en las cosechas provocadas por enfermedades foliares y plagas y derivará en una disminución de los recursos necesarios para el cultivo y menos desperdicios.
- Establecer nuevas estrategias agronómicas para el manejo del cultivo a través de la monitorización de las labores de las empresas de servicios reduciendo, así, la huella de carbono, y el uso de drones para controlar las plagas y enfermedades, lo que evitará emisiones.
A través de esta plataforma, los técnicos de Azucarera, sus agricultores, empresas de servicios y de insumos podrán gestionar diferentes actividades agronómicas del cultivo y poner en común buenas prácticas agronómicas para fomentar un aprendizaje que tenga como fin aportar mejor rentabilidad y productividad a la remolacha azucarera.
Para las fases más avanzadas y la recolección de la remolacha azucarera, AIMCRA está trabajando en:
- En el diseño de modelos predictivos y prescriptivos para la identificación de enfermedades foliares como la cercospora, el oidio y la roya con el fin de controlarlas de manera eficaz, lo que mermará las pérdidas en cosechas, derivará en una disminución de los recursos necesarios para el cultivo y menos desperdicios.
- En la detección de nuevos productos sostenibles para la reducción del impacto de plagas y enfermedades en el cultivo y elaboración de distintos tratamientos para minimizar su impacto.
- En el desarrollo de la remolacha azucarera ante el cambio climático, lo que implicará unas condiciones climatológicas cada vez más altas y mayor sequía. Por ello, desde AIMCRA se trabaja en la aplicación de nuevos productos retenedores de agua para optimizar el uso de este recurso, lo que permitirá mejorar el consumo de agua y adaptar el cultivo al estrés hídrico. En esta línea, cabe destacar los ensayos llevados a cabo junto a la Universidad de Sevilla con el objetivo de conocer mejor el comportamiento hormonal de la remolacha frente a distintas condiciones controladas de estrés térmico. Adicionalmente, se realizarán pruebas con diferentes productos retenedores de agua (geles) que posteriormente la suministrarán poco a poco reduciendo el consumo de este recurso.
Plan Estratégico de Azucarera
El objetivo final de estos proyectos es la obtención de mejores producciones y más sanidad de la remolacha, lo que redundará en la mejora de la rentabilidad del agricultor y en la disponibilidad de producto final. A ello se une la obtención de beneficios intangibles como un mayor aporte de conocimiento técnico al remolachero y acompañamiento en su labor del día a día.
Estos proyectos se engloban en el Plan Estratégico de Azucarera que surge de la necesidad de contribuir a asegurar la existencia y el suministro de materia prima agrícola local para sus plantas en Castilla y León, a través de la mejora de la competitividad y productividad del tejido agrario remolachero. Esta iniciativa específica, referida a proyectos de I+D en el ámbito agronómico y del cultivo, se suma al resto de actuaciones en otros ámbitos de la fábrica y fuera de ella, tienen como objetivo la mejora de los procesos productivos a lo largo de la cadena para procurar así su sostenibilidad en el corto, medio y largo plazo. Azucarera actúa en dicha cadena como dinamizador y motor de cambio para la mejora del sector en su conjunto, ya que la fábrica depende del cultivo y éste de la existencia de la fábrica.
La competitividad del sector -dada la liberalización de cuotas- ha provocado la incorporación de numeroso y nuevos agentes. Azucarera, por tanto, aplica esta necesidad a todos los ámbitos de actuación en los que concentra su actividad, desde la producción de la remolacha, el proceso productivo y la creación de nuevos productos, tal y como ha quedado reflejado en anteriores apartados. De esta forma, a continuación, se muestra una descripción de los nuevos productos/procesos previstos a desarrollar dentro de dicho Plan.
El Plan Estratégico de I+D promovido por Azucarera se centra en la producción sostenible e innovadora de la remolacha azucarera, principal materia prima del proceso productivo del azúcar, que pasa por actuaciones concretas en ámbitos estrechamente interrelacionados y con un sentido estratégico global de estímulo al sector y ayuda al agricultor individual. Una producción sostenible con un enfoque eminentemente práctico, facilitadora de la labor del agricultor remolachero, basada en datos que permitan ayudar a predecir y gestionar el futuro, que consideren la tierra como esencial en el mantenimiento de la rica biodiversidad del territorio castellano y leonés. Además de todo ello, con este plan buscamos ayudar a la mejora de los rendimientos y la productividad de las parcelas remolacheras y contribuir a mitigar y paliar los efectos del cambio climático. Se proponen también varias líneas de actuación ligadas al avance científico en materia de lucha contra plagas y enfermedades.
Con el apoyo de la Junta de Castilla y León
Para hacer frente a este plan estratégico, AIMCRA contará con una subvención otorgada por la Junta de Castilla y León por valor de 1.110.713 euros, al declarar como de 'Especial Interés' este proyecto.
Azucarera es la empresa líder en producción de azúcar en España y cuenta con cinco fábricas, cuatro de ellas en Castilla y León, tres dedicadas a la producción de azúcar de remolacha y un centro logístico y de envasado. En Toro, además de una fábrica tiene su planta de Especialidades Líquidas y el centro de I+D+i, mientras que en Benavente cuenta con el centro de envasado y logística, ambas en la provincia de Zamora. En La Bañeza (León) y en Miranda de Ebro (Burgos) se encuentran las otras dos fábricas.
El Centro de I+D, ubicado en la planta de Toro, proporciona además un servicio analítico y de asistencia técnica especializada a todas las áreas de Azucarera y dispone de plantas piloto para optimizar el proceso de producción de azúcar de remolacha y azúcar de caña, así como para el desarrollo de nuevos productos. El centro de I+D+i de Toro es además el centro de referencia para los proyectos de Innovación del grupo AB Sugar, al que pertenece la empresa.