El Observatorio de Tratamiento de Purines de Porcino analizará las mejores técnicas disponibles para tratar y desnitrificar el excedente de purín en zonas vulnerables
Tras el rechazo del Gobierno a votar en el Congreso la enmienda que prorrogaba la vida útil regulatoria de las plantas de cogeneración de purines, respaldada por la mayoría parlamentaria de ambas cámaras, los cogeneradores y ganaderos buscan alternativas para gestionar el excedente de purín de porcino. En este contexto, la Asociación para el Desimpacto Ambiental de Purines (ADAP) ha lanzado el Observatorio de Tratamiento de Purines de Porcino (OTP) con el objetivo de “convertirse en una red de conocimiento en torno a la gestión de residuos procedentes de las deyecciones porcinas, en la búsqueda de las mejores técnicas disponibles para minimizar su impacto en el entorno natural, al tiempo que permite el desarrollo sostenible y competitivo del sector porcino”.

El presidente de ADAP, Josep Capdevila, ha explicado que la puesta en marcha de este Observatorio busca “avanzar hacia la búsqueda de una solución integral al tratamiento, higienización y desnitrificación de los purines de porcino para convertirlos en un subproducto adecuado para su valorización fertilizante. Que proteja suelos y aguas subterráneas y favorezca una industria ganadero-cárnica rentable, sostenible y generadora de riqueza en entornos rurales”.
El cierre de las plantas de cogeneración de purines, que durante 25 años han gestionado el excedente de manera eficaz y sostenible, supone un desafío para el sector. El veto en el Congreso a la votación de la enmienda para prorrogar su funcionamiento hasta la transición al nuevo modelo de biometano deja a los ganaderos sin una alternativa viable en la actualidad. “Es fundamental poner en valor esta herramienta, sin alternativa a día de hoy, para dar salida al excedente de purines de porcino”, ha insistido Capdevila.
Las consecuencias del fin de la vida útil regulatoria de estas plantas ya se han hecho sentir, con el cierre en diciembre de las plantas de Alcarrás y Les Masies de Voltregá, que daban servicio a cerca de 190 ganaderos. Estos ahora afrontan el sobrecoste de las alternativas temporales disponibles y el riesgo de cesar su actividad por falta de rentabilidad. La situación se agravará en los próximos años con el cierre progresivo de las otras 24 plantas de cogeneración de purines, que actualmente tratan el 40% del excedente de purines del sector porcino. “La falta de una solución inmediata genera incertidumbre y pone en riesgo la sostenibilidad económica y medioambiental del sector”, ha advertido ADAP.
Un espacio de colaboración
Ante este escenario, ADAP ha impulsado el OTP como un espacio de colaboración entre representantes de toda la cadena de valor, incluyendo actores del ámbito ganadero, integrador, ambiental, académico y energético. “Siempre con la tecnología y la ciencia en el centro de la conversación, buscando una simbiosis entre tecnologías maduras y eficaces como la cogeneración de purines y los nuevos desarrollos de plantas de biometano y gases renovables”, han señalado desde la asociación.
A corto plazo, el Observatorio trabajará en la promoción de una propuesta regulatoria para un nuevo modelo de gestión de las plantas de purines basado en la colaboración entre estas y las plantas de biometano. Para ello, ADAP considera “imprescindible una moratoria para las plantas de cogeneración de purines al término de su vida útil regulatoria y un Plan Renove que favorezca su transición hacia nuevos modelos más eficaces, eficientes e integrados en la Hoja de Ruta del Biometano”.
La presentación oficial del Observatorio tendrá lugar el próximo 27 de marzo en Madrid, en el Instituto de Ingeniería de España, y contará con la participación de expertos de diferentes disciplinas y del sector porcino. Durante el evento se debatirá sobre “las mejores prácticas para la gestión sostenible de los purines, la viabilidad del biometano como alternativa y el papel de la regulación en la transición del sector”, según ha adelantado ADAP.