Lubricante refrigerante sin bactericida que no se disocia
12 de diciembre de 2011
El factor de limpieza es un criterio importante para la valoración de la calidad de lubricante refrigerante, ya que debido al crecimiento de las bacterias, las emulsiones contaminadas pueden dañar las máquinas, la calidad de las superficies de las piezas tratadas, así como de las herramientas: la lubricidad de la emulsión se reduce y las herramientas dejan de estar suficientemente protegidas contra el desgaste. Otros efectos indeseados es la aparición de residuos gomosos, que se adhieren en las distintas partes de los equipos, llegando incluso a obturar tuberías y causando un incremento considerable en las operaciones de mantenimiento de dichos equipos. Por lo tanto, no sólo son decisivos los costes de un lubricante refrigerante, sino su influencia en el ciclo de vida.
Los modernos lubricantes refrigerantes pueden realizar una importante contribución en las empresas de transformación de metales para aumentar la eficiencia, siempre que se acepten como un factor de producción y calidad. Por este motivo, el nuevo lubricante refrigerante sin bactericida de Henkel, que no se disocia, ha sido probado por el fabricante de máquinas de impresión Manroland AG y ha convencido por sus excelentes resultados. Manroland AG es uno de los fabricantes más destacados en sistemas de impresión y el uno de los principales en el mercado de web offset con alrededor de 7.000 empleados y con unas ventas de 942 millones de euros en 2010.
Con el papel pasando a más de 50 km/h a través de la moderna máquina para imprimir papel continuo, los colores se aplican con precisión de centésimas de milímetro. Maquinaria totalmente automatizada, con elevada tecnología, convierte la impresión en un proceso continuo sin problemas. La precisión y calidad de los componentes mecánicos fabricados individualmente son decisivas. Por ello, Manroland fabrica todos los componentes de sus máquinas de impresión en sus instalaciones de producción propias. Sólo en el mecanizado de metales con arranque de virutas, el parque de maquinaria de alta tecnología que hay en la planta de Augsburgo asciende a unas 300 máquinas en servicio de tres turnos.
No es un material auxiliar, sino un importante factor de producción
Para Anton Büchele, director de Medio Ambiente y Seguridad, entre los factores de producción importantes en el proceso de fabricación mecánica se incluye especialmente el uso de modernas tecnologías de lubricante refrigerante: “Una cadena sólo es tan fuerte como lo es su eslabón más débil. A menudo pasamos por alto que los lubricantes refrigerantes realizan una importante contribución para aumentar la eficiencia y reducir los costes, si se incluyen a tiempo en la planificación”. En la búsqueda de soluciones innovadoras, en el centro de know-how de lubricantes refrigerantes propio de la empresa se prueban desarrollos de producto alternativos en condiciones prácticas. Petra Barthky de Pentafluid GmbH explica por qué es tan importante: “La industria plantea requisitos cada vez más elevados para los lubricantes refrigerantes en cuanto a rendimiento y rentabilidad. El rendimiento de lubricación, la limpieza, la estabilidad y el consumo son criterios importantes. Al mismo tiempo, los cambios en las condiciones de seguridad laboral y el aumento de las exigencias medioambientales marcan nuevas referencias”. Como proveedor de servicios externo, Pentafluid asiste y optimiza la gestión de fluidos en Manroland, desde la compra hasta el control del proceso.
Anteriormente, tenía que afrontarse el problema de que el lubricante refrigerante, en los meses de verano, tenía que cambiarse después de tiempos de servicio breves debido a su disociación, lo que resultaba costoso. La causa era la alta contaminación bacteriana de la emulsión. Además, las impurezas en forma de biomasa causaban la problemática formación de marcas en forma de coma y la coloración del material; otro problema derivado era la pérdida de protección anticorrosiva debido al descenso del valor de pH. En la búsqueda de una solución de lubricantes refrigerantes sostenibles, se decidió probar una nueva generación de lubricantes refrigerantes sin bactericidas, miscibles en agua, que Henkel comercializa con el nombre Multan 71-2.
Prolongación considerable de la duración del baño
El ejemplo de Manroland muestra las ventajas de la gestión de fluidos a largo plazo. Después de las pruebas con éxito, Multan 71-2 ha convencido también en el uso práctico y se usa actualmente en 33 máquinas para la fabricación de cilindros de impresión. Los parámetros de rendimiento fueron mejores que los de los lubricantes refrigerantes existentes hasta ahora. “En las máquinas con una alta ocupación y con un volumen de lubricante refrigerante de 6.000 litros teníamos que realizar antes unos siete cambios debido a la producción. Con la nueva tecnología Multan, la aplicación es mucho más estable. Aunque tenemos aplicaciones muy exigentes, sólo es necesario un cambio al año”, informa Anton Büchele. Y esto supone unos ahorros de unos 14.000 euros por máquina anuales. También se evitan los cuatro días de trabajos de limpieza en las instalaciones; la emulsión usada sólo tiene que eliminarse y llenarse la nueva.
Trabajar con seguridad sin bactericidas
Al mismo tiempo, mediante el uso de tecnología sin bactericidas se minimiza el riesgo sanitario para los trabajadores. Hasta ahora se han utilizado en la industria grandes cantidades de bactericidas que pueden causar problemas para las personas y el medio ambiente. Los lubricantes refrigerantes más comunes usados hasta ahora requieren la adición de bactericidas como conservantes bien durante su puesta en marcha o bien durante su uso en producción. Manroland intenta evitar el uso de sustancias peligrosas para la salud dentro del marco de la gestión de sustancias peligrosas. “El uso del nuevo lubricante refrigerante Multan supone otro paso importante para garantizar los máximos niveles de seguridad laboral”, afirma Anton Brucklachner, director de Sustancias Peligrosas en Manroland.
Además, se obtuvieron mejoras considerables en el rendimiento de lubricación y limpieza. Todos los materiales de corte y procedimientos de producción corrientes pueden realizarse con el nuevo lubricante refrigerante Multan. Puede prepararse fácil y económicamente con agua corriente, sin que se forme espuma. El buen efecto de limpieza se pone de manifiesto durante la inspección visual. “El lubricante refrigerante absorbe la suciedad y la libera nuevamente en el filtrado posterior, lo que permite que recupere prácticamente el color original”, explica Anton Büchele. Las virutas se evacuan eficientemente, de modo que las herramientas y las máquinas no se atascan y las piezas mecanizadas salen limpias de la máquina. “En definitiva, el nuevo lubricante refrigerante proporciona más seguridad y calidad en la producción”.