Las rebajas, ¿cuándo son oportunas?
El comercio clásico frente a los retos del mercado
Con la crisis vivimos permanentemente en rebajas. Muchas marcas han reducido su nivel de producción para no incrementar su stock. Mientras, las tiendas han optado por reactivar el consumo con descuentos y ofertas.
En la nueva cultura low cost los consumidores se han acostumbrado a pagar menos por lo que antes estaban dispuestos a pagar más.
El pez que se muerde la cola
En el momento justo
Desde el punto de vista del consumidor
Las rebajas no deben cambiar la política de un comercio
Cada establecimiento ofrece un plazo de tiempo para devolver un producto. Este margen debe respetarse también con los productos rebajados.
En las devoluciones, algunos comercios reintegran el importe al cliente, otros le ofrecen la posibilidad de cambiarlo por otro producto o emiten un vale por el importe para hacer efectivo en otra ocasión. Sea cual sea la normativa que se aplique, debe de seguir respetándose en tiempos de rebajas. La misma filosofía debe aplicarse a los productos con garantía.
Condiciones ineludibles
- El comercio debe establecer claramente el plazo de tiempo en que se realizan las rebajas y que varía de acuerdo al sector.
- Es importante que se disponga de un stock moderado de cada producto, no solamente de una unidad.
- Los productos rebajados deben estar correctamente etiquetados e indicar características o composición.
- La etiqueta de cada producto debe precisar el precio anterior y el precio rebajado.
- No pueden ofrecerse entre las rebajas artículos con algún defecto o deterioro.
El consumidor ante lo desconocido
Una situación muy distinta se presenta cuando se le ofrece al cliente un producto cuya marca desconoce o bien le resulta distinto a lo que tiene en mente. Inmediatamente aparece en escena el factor riesgo. En estos casos el vendedor, además de ser convincente, tiene que estar seguro de que ofrece para no defraudar al comprador. Y es que hoy en día no se puede perder ni un solo cliente.